Psyciencia
  • SECCIONES
  • PSYCIENCIA PRO
    • ÚNETE A LA MEMBRESÍA
    • INICIA SESIÓN
    • CONTENIDO PARA MIEMBROS
    • RECURSOS PARA MIEMBROS
    • TIPS PARA TERAPEUTAS
    • PODCAST
    • WEBINARS
  • NORMAS APA
  • SPONSORS
  • NOSOTROS
Psyciencia
  • SECCIONES
  • PSYCIENCIA PRO
    • ÚNETE A LA MEMBRESÍA
    • INICIA SESIÓN
    • CONTENIDO PARA MIEMBROS
    • RECURSOS PARA MIEMBROS
    • TIPS PARA TERAPEUTAS
    • PODCAST
    • WEBINARS
  • NORMAS APA
  • SPONSORS
  • NOSOTROS

Publicaciones por autor

Alejandra Alonso

640 Publicaciones
Licenciada en Psicología, editora y miembro fundador de Psyciencia.com. Master en Análisis de Conducta Aplicado.
  • Salud Mental y Tratamientos

¿Los hombres se sienten mal cuando su pareja femenina tiene éxito?

  • Alejandra Alonso
  • 16/10/2013

Si le preguntas a un hombre cómo lo hace sentir que su novia o esposa sea exitosa, probablemente lo que responda no sea coherente con lo que siente en el fondo. Un nuevo estudio publicado por la American Psychological Association sugiere que los hombres no disfrutan ver triunfar a sus parejas de sexo femenino, sin embargo esto no se aplica a las mujeres, más bien al contrario, ellas se sienten más satisfechas con una pareja exitosa.

No importaba si era una excelente anfitriona o inteligente, los hombres mostraron ser más propensos a sentirse peor inconscientemente cuando su pareja femenina tenía éxito que cuando fracasaba. Sin embargo, la autoestima de las mujeres no se veía afectada por el éxito o el fracaso de su pareja masculina, de acuerdo al estudio en el que participaron personas heterosexuales norteamericanas y holandesas.

“Tiene sentido que un hombre se pueda sentir amenazado si su novia lo supera en algo que están haciendo juntos, como tratar de perder peso. Pero esta investigación encontró evidencia de que los hombres interpretan automáticamente el éxito de su pareja como su propia falla, incluso cuando no están compitiendo directamente”, dice la autora principal, Dra. kate Ratliff, de la Universidad de Florida.

Los hombres mostraron ser más propensos a sentirse peor. 

Los hombres se sentían peor cuando pensaban sobre un momento en que su pareja femenina había prosperado en una situación en la cual ellos no pudieron, de acuerdo a los hallazgos. Los investigadores estudiaron 896 personas en 5 experimentos. En uno de ellos, se les dio a 32 parejas de la Universidad de Virginia lo que se presentó como un “test de resolución de problemas e inteligencia” y luego se les dijo que su pareja había quedado en el 12% de los primeros o últimos puestos de todos los estudiantes de la universidad. Escuchar que sus parejas habían puntuado alto o bajo en el test no afectó a lo que los investigadores denominaron ‘autoestima explícita” de los participantes (es decir, cómo ellos decían sentirse).

También se les dio un test para determinar cómo se sentían inconscientemente sobre el rendimiento de sus parejas; los investigadores llamaron a esto ‘autoestima implícita’. En este test, una computadora registra cuán rápido las personas asocian palabras buenas o malas con ellos mismos. Por ejemplo, los participantes con autoestima implícita alta, cuando veían la palabra “yo” en la pantalla eran más propensos a asociarla con palabras tales como “excelente” o “bueno” que con “malo” o “pésimo”. Si entiendes inglés, puedes visitar el website Project Implicit para ver y realizar muestras del test.

Los hombres que creían que su pareja puntuó en el top 12%, demostraron una autoestima implícita más baja que aquellos hombres que creían que su pareja había puntuado entre el 12% inferior. Los participantes no recibieron información sobre su propio rendimiento.

Otros dos estudios hechos en Holanda arrojaron resultados similares. Dicho país se caracteriza por tener unas de las más pequeñas diferencias de género en el trabajo, la educación y la política, de acuerdo con el Índice de Igualdad de Género de las Naciones Unidas. Sin embargo, al igual que los hombres norteamericanos, los holandeses que pensaban en el éxito de sus parejas románticas se sentían mal consigo mismos a un nivel inconscientemente que cuando pensaban en el fracaso de sus parejas, de acuerdo a ambos estudios. Ellos dijeron sentirse bien con esto, pero el test de autoestima implícita reveló otra cosa.

El peor golpe para la autoestima implícita de los hombres fue cuando recordaron una situación en que ellos fracasaron y sus parejas no. 

En los dos experimentos finales, conducidos de forma online, se les pidió a 657 participantes de Estados Unidos (284 de los cuales eran hombres) que pensaran en un momento en el que sus parejas habían tenido éxito o habían fracasado. Por ejemplo, se les pidió a algunos participantes que pensaran sobre éxitos o fracasos sociales de su pareja, tales como ser un anfitrión encantador en una fiesta o un logro o fracaso más intelectual. En un estudio se les pidió que pensaran en un momento en que sus parejas habían tenido éxito o fracasado en algo en que ellos mismos habían tenido éxito o habían fracasado.

Al comparar todos los resultados, los investigadores encontraron que no importaba si los logros eran sociales, intelectuales, o relacionados a los éxitos o fracasos de los participantes, los hombres se sentían igual de mal inconscientemente cuando sus parejas tenían éxito comparado a las situaciones en que fallaban. Sin embargo, el peor golpe para la autoestima implícita de los hombres fue cuando recordaron una situación en que ellos fracasaron y sus parejas no.

Los investigadores también buscaron saber cómo la satisfacción en la pareja afectaba a la autoestima. Las mujeres en este estudio reportaron sentirse mejor con su relación cuando pensaban en un momento en que su pareja había sido exitosa comparado a cuando pensaban en un fracaso de la misma; no pasó igual con los hombres.

Fuente: American Psychological Association
Imagen: cristinabe (Flickr)

  • Salud Mental y Tratamientos

El estrés puede reducir la efectividad de la regulación cognitiva

  • Alejandra Alonso
  • 10/10/2013

En un estudio reciente, se investigó si la regulación cognitiva, una técnica muy utilizada para reducir el miedo o la ansiedad en la Terapia Cognitivo Conductual, seguiría siendo efectiva bajo situaciones de estrés. Sus hallazgos sugieren que la técnica investigada podría necesitar ajustes.

Algunos estudios (estudios 1 y 2) encontraron que justo cuando el autocontrol es crítico (por ejemplo, en situaciones aterradoras o traumáticas) el estrés incapacita a las partes del cerebro que son esenciales para mantenerse racional. Eso significa que algunas técnicas de la Terapia Cognitivo Conductual pueden fallar a los pacientes cuando más necesitan de estas habilidades de afrontamiento.

“El estudio es un llamado a la reflexión y una demostración sorprendentemente simple de posiblemente una limitación muy común y crucial en las técnicas de reestructuración cognitiva, como las que se aprenden en TCC”, dice Keith Laws, profesor de psicología de la Universidad de Hertfordshire en Inglaterra, quien no estaba asociado al estudio.

Metodología de la investigación

La investigación contó con 78 sujetos que gozaban de buena salud y no tenían historial de fobias o trastornos de ansiedad previos.

Los participantes se sometieron a un paradigma de condicionamiento por miedo, mediante la utilización de imágenes como estímulo condicionado y descargas eléctricas moderadas en la muñeca como estímulo incondicionado.

En el primer día una imagen era acompañada de una descarga eléctrica en un subconjunto de ensayos, pero en el otro no era seguido de nada (este último sirvió como medida de referencia de la excitación). Luego del condicionamiento por miedo, los participantes reportaron tres emociones que estaban asociadas con cada estímulo condicionado y calificaron la intensidad de las emociones en una escala que iba del 1 (menor intensidad) al 10 (mayor intensidad).

Algunas técnicas de la Terapia Cognitivo Conductual, pueden fallar a los pacientes cuando más necesitan. 

Posteriormente se entrenó a los participantes para utilizar una estrategia de regulación cognitiva que incluyó elementos de reevaluación y estaba basado en uno de los principios de la TCC. Esta regulación ha demostrado en trabajos previos que puede atenuar persistentemente el miedo condicionado comparado con el miedo prolongado visto en los participantes que estaban en las pruebas de control.

Luego del entrenamiento, los participantes volvieron a calificar la intensidad de las emociones que habían reportado y se les pidió que volvieran al día siguiente para realizar la misma tarea de condicionamiento de miedo utilizando las técnicas de regulación recientemente adquiridas.

Las estrategias de afrontamiento ayudaron a los participantes a reconocer cómo sus pensamientos influían sobre sus sentimientos y se les ayudó a replantear la experiencia temida para reducir el impacto de los pensamientos negativos. Así, por ejemplo, en vez de anticipar el dolor de las descargas y preocuparse sobre cuánto durarían, se los instruyó para que se distrajeran y vieran la experiencia como una molestia y no como una experiencia penosa. “La idea es que la forma en que elegís ver la situación puede alterar tu respuesta,” dice la coautora del estudio, Elizabeth Phelps, profesora de psicología en la Universidad de New York.

Esa es la forma en que se supone que trabaja la TCC y cientos de estudios han documentado que enseñarles a las personas cómo aprovechar estas habilidades puede ayudarles a luchar contra trastornos de ansiedad y depresión.

Pero algunas técnicas utilizadas por la TCC no funcionan para todas las personas en cualquier situación y Phelps puede haber encontrado una buena razón de por qué. Ella trajo a los pacientes de vuelta al laboratorio luego de su entrenamiento TCC para ver si las técnicas que habían aprendido funcionarían. Para provocar estrés, hizo que la mitad del grupo sumergiera su brazo en agua congelada por 3 minutos (lo que aumentó los niveles de cortisol, la hormona del estrés). El resto de los participantes mantuvo su mano en agua a temperatura ambiente por la misma cantidad de tiempo.

Diez minutos después, todos fueron confrontados con las imágenes que ellos sabían que precedían a las descargas, pero solo el grupo no estresado mostró menos miedo del que sintieron en el experimento inicial.

Conclusiones

Los autores concluyen que: “sólo el grupo no estresado fue capaz de utilizar exitosamente estas técnicas de regulación para disminuir la excitación del miedo posteriormente en el test. En contraste, las respuestas del miedo en el grupo estresado eran comparable a aquellas dadas durante la primer adquisición de miedo, antes del entrenamiento de regulación.”

“Lo que pensamos que está pasando es que, incluso el estrés leve, puede llevar a déficits sutiles en la corteza prefrontal (CPF)”, dice Phelps, refiriéndose al área cerebral responsable del control de las emociones.

El hecho de que el estrés puede abrumar a las áreas cerebrales cognitivas y racionales, no es nuevo (a corto plazo, las hormonas del estrés pueden incapacitar funciones y con exposiciones repetidas, puede incluso matar células cerebrales). “La CPF es una región cerebral muy sensitiva al estrés y muy maleable,” dice Bruce McEwen, profesor de neurociencias en la Universidad Rockefeller, quien editó el estudio para el Proceedings of the National Academy of Science.

La novedad del estudio reside en que la TCC, la cual los investigadores pensaban que podría contrarrestar este efecto, no siempre hace el trabajo. Esto puede deberse a que los científicos no han apreciado plenamente los efectos combinados del miedo y el estrés en el cerebro. En la investigación, el miedo por sí solo no disparaba la respuesta de estrés. Los participantes no mostraron elevaciones en las hormonas del estrés durante la primera parte del experimento, incluso aunque temían las descargas antes de ser entrenados con técnicas de la TCC.

“Sólo el grupo no estresado fue capaz de utilizar exitosamente estas técnicas de regulación.»

Phelps no sugiere que la TCC pueda no ser útil, sino que piensa que su investigación sugiere  que podría requerir práctica para dar resultados exitosos. Bajo estrés, el cerebro de las personas trabaja en modo de piloto automático y reacciones preestablecidas se convierten en la prioridad, mientras que el tipo de pensamiento abstracto, lógico y razonado (el tipo que es fomentado por esta terapia) es reducido. Puede tomar varios ensayos para comprometer activamente a las habilidades TCC y sobreponerse a la respuesta instintiva del estrés ante las crisis. “Una vez que algo se vuelve más automático, depende menos de la CPF. Si practicas realmente y se convierte en segunda naturaleza,` no debería importar mucho”, dice Phels.

Laws sugiere que los resultados también podrían indicar un papel importante de medicaciones tales como los beta bloqueadores, los cuales podrían ser más importantes en ciertos pacientes que no responden inicialmente a la TCC, dado que dichas drogas pueden reducir la respuesta al estrés. Otros investigadores están estudiando una medicación diferente que afecta a la CPF, ya que algunos trabajos indican que la forma en que la CPF es activada en la respuesta de estrés podría distinguir entre pacientes que responden a la TCC y aquellos que no lo harán.

La efectividad de la TCC podría también verse afianzada al introducir un poco de estrés cuando se aprende, para simular mejor un escenario del mundo real. Investigaciones sobre resiliencias conducidas en Navy Seals (marines estadounidenses), encontró que su entrenamiento altamente estresante es crítico para su habilidad de mantenerse racionales bajo coacción. Y se ha demostrado que el estrés moderado mejora el aprendizaje y aumenta la resiliencia. La clave, por supuesto, sería resolver cuánto estrés es suficiente (algo que varía de persona en persona, e incluso de sesión en sesión).

También sería importante considerar no correr a los medicamentos para ver si allí encontramos la solución, sino probar la efectividad de otros tipos de terapia en esta problemática.

Fuentes: Healthland; Proceedings of the National Academy of Science of the United States of America (PDF)
Imagen: Pulse72Plus

  • Ciencia y Evidencia en Psicología

Posible vínculo entre fumar durante el embarazo y el Trastorno Bipolar

  • Alejandra Alonso
  • 02/10/2013

El tabaquismo materno durante el embarazo ha sido vinculado con varios resultados adversos para el mismo. Específicamente, se ha encontrado asociación entre esta conducta y un tamaño pequeño para la edad de gestación en el nacimiento (estudios 1 y 2).

Un buen cuerpo de información (aunque menos consistente) también apoya la asociación entre el tabaquismo materno durante el embarazo y los problemas cognitivos y conductuales del hijo, incluyendo una gran frecuencia de déficits atencionales, de aprendizaje y de memoria y un mayor riesgo de sufrir trastornos del desarrollo como el TDAH, Trastornos de Conducta, Trastorno Oposicionista Desafiante y Trastornos por uso de sustancias (estudios 1, 2, 3, 4 y 5).

Un estudio publicado ayer en el American Journal of Psychiatry sugiere una asociación entre el hecho de fumar durante el embarazo y un riesgo mayor de desarrollar un Trastorno Bipolar (TB) en el hijo. Los investigadores evaluaron a los hijos de un gran cohorte de embarazadas que participaron en el Estudio de Salud y Desarrollo del Niño (CHDS por sus siglas en inglés) de 1959 a 1966.

La investigación se basó en 79 casos y 654 sujetos de comparación. Los casos fueron entrevistados directamente y diagnosticados según los criterios del DSM IV. Los sujetos de comparación fueron emparejados a los casos según fecha de nacimiento, sexo, membresía en el cohorte al momento del comienzo de la enfermedad y disponibilidad de los archivos sobre suero materno. Luego de ajustar los resultados por posibles factores de confusión, se encontró que el fumar durante el embarazo se asociaba con un riesgo doble de desarrollar un Trastorno Bipolar en los descendientes de las embarazadas. La asociación fue vista primordialmente entre hijos sin características psicóticas.

Este es el primer estudio en sugerir dicha asociación entre la exposición prenatal al tabaco y el Trastorno Bipolar, que se caracteriza por cambios significativos en el humor, que alternan entre períodos de depresión y manía. Los síntomas se hacen notorios en la adolescencia tardía o la adultez temprana.

El Dr. Alan Brown, autor del estudio y Profesor de Psiquiatría Clínica y Epidemiología en El Instituto de Psiquiatría del Estado de New York, comenta: “Estos hallazgos subrayan el valor de la educación en materia de salud pública sobre las consecuencias potencialmente debilitantes y altamente prevenibles que el fumar puede tener en niños con el tiempo.”

Los autores escriben: “Muchas de las psicopatologías asociadas con la exposición prenatal al tabaco se agrupa en torno al espectro ‘de externalización’ que incluyen al TDAH, Trastorno Oposicionista Desafiante, Trastornos de Conducta, y Trastornos por Abuso de Sustancias. Aunque no está clasificado en el espectro de externalización, el Trastorno Bipolar comparte cierto número de características clínicas con estos desórdenes, como falta de atención, irritabilidad, pérdida de autocontrol y tendencia al consumo de drogas y/o alcohol.”

Así mismo concluyen que: “La exposición prenatal al tabaco puede ser una posible causa del trastorno bipolar. Sin embargo, será necesario tener en cuenta otros factores familiares no medidos antes de que efectos causales teratogénicos puedan ser sugeridos.”

Fuentes: ScienceDaily y The American Journal of Psychyatry
Imagen: DucDigital (Flickr)

Sin categoría

6 Cómics que representan la depresión y sus frustraciones

  • Alejandra Alonso
  • 23/09/2013

depre 1

Por Shannon Sophia.

Decir que alguien no puede estar triste porque alguien más está peor es igual que decir que alguien no puede estar feliz porque hay otra persona que está más feliz.

 

 Por Kristian Nygård.

 Por Sylvie Reuter

 .

 Por Claire Jarvis.

En vez de salir de la cama y disfrutar tu día libre de trabajo, creo que sería divertido si te quedaras aquí por horas y pensaras en todos las cosas malas que has hecho. Todas.

 

Por Ryan Pequin.

Parkour depresivo

 

 Por Megan Rose Gedris.

Soñé que encontraba la fuente de mi depresión.
Era un insecto en mi espalda drenando toda mi felicidad.
¿Cómo es que nunca antes lo noté?
Y todo lo que tenía que hacer para volver a estar bien…era arrancarmelo y aplastarlo.
Es raro despertarte desilusionada de no estar cubierta con parásitos.

Fuente: BuzzFeed

  • Ciencia y Evidencia en Psicología

¿Botox para tratar la depresión?

  • Alejandra Alonso
  • 12/09/2013
Depresión

Nuevas investigaciones sugieren que suavizar las arrugas del ceño y eliminar las señales exteriores de envejecimiento, podría realmente hacernos sentir mejor y aliviar los síntomas depresivos.

Antecedentes

Aunque esto suene raro (y un poco superficial), la conexión deriva de un cuerpo de investigaciones significativo. La idea de que las expresiones físicas de emoción influencian nuestra experimentación de sentimientos va hasta Charles Darwin, quien estudió las emociones tanto en animales como en humanos de varias culturas. Darwin se refirió a los músculos del ceño como los “músculos de la aflicción” y los conectó con los sentimientos de tristeza.

La investigación fue presentada por el Dr. Eric Finzi, director médico del Chevy Chase Cosmetic Center de Maryland (Centro Cosmético de Chevy Chase), en la reunión anual del American College of Neuropsychopharmacology (Universidad Americana de Neuropsicofarmacología) en Diciembre.

Aunque investigaciones posteriores han mostrado que la conexión va en ambos sentidos (puedes sentir lástima y llorar, o al revés), la expresión física de una emoción parece ser un importante disparador de sentimientos; por ejemplo, fruncir el ceño puede iniciar un ánimo deprimido, mientras que sonreir deliberadamente puede elevar dicho ánimo, al menos temporalmente. Otros estudios también han mostrado que las personas encuentran los chistes más graciosos cuando ponen un lápiz entre sus dientes longitudinalmente, lo que fuerza una sonrisa, que cuando lo sostienen apuntando hacia afuera.

Este nuevo estudio es el segundo en comparar el Botox con un placebo, aunque los resultados todavía no han sido revisados exhaustivamente como para ser publicados en una revista científica. Sin embargo, ya existen estudios y una prueba controlada pequeña, que sugieren que es prometedor.

La investigación y sus resultados

Los 84 participantes del estudio padecían de depresión severa que, en promedio, tuvo una duración de 2 años y falló en responder completamente a los antidepresivos. Los pacientes recibieron al azar uno de los dos tratamientos: Botox para suavizar las líneas del entrecejo o una inyección placebo en la misma región facial. Además se los evaluó 3 y 6 semanas después. Al final del estudio, alrededor del 27% de los que recibieron el tratamiento con Botox reportaron remisión completa de su depresión, comparados con sólo el 7% de los que recibieron el placebo.

Es posible también que el Botox este afectando a la depresión de una forma más biológica, como por ejemplo a través del sistema inmune, que puede estar alterado durante la depresión. Sobre esto, Finzi explicó que otros estudios, que utilizaron dosis mayores de Botox, no han encontrado efectos sistemáticos significativos, y que eso lo lleva a creer que el efecto básico podría ser ayudar a las personas a verse a sí mismos más felices.

“Varios cuerpos de evidencia de grupos independientes, ninguno de los cuales fue fundado por compañías farmacéuticas, muestran que en un gran porcentaje de pacientes, obtiene una mejora muy significativa de sus síntomas de depresión”, dice Finzi.

Críticas

Sin embargo, se ha argumentado sobre esto que las emociones deberían ser mostradas.

Finzi piensa que con cada medicina hay potenciales efectos secundarios, así que es siempre importante tener en cuenta los riesgos y beneficios que acarrea.

«En este caso, el riesgo es que podría ser un poco más difícil llorar y sentirse triste, pero si estas deprimido ese no es un riesgo para nada, eso es lo que deseas”, dice él. “Si un ser querido muere, vas a sentirte muy mal por esa pérdida así tengas Botox o no, es solo que este puede disminuir la amplitud del sentimiento de tal manera que no toma todo tu ser.”

Finzi dice que el Botox cambia tu humor al controlar las expresión que las personas son capaces de hacer. El músculo entre las cejas, el músculo corrugador superciliar, es el centro de expresión del enojo, el miedo y la tristeza.

«Si pones Botox allí,  haces que sea más difícil para tu cara expresar una emoción negativa y por ende, que sea más difícil que tu cuerpo la sienta. No lo hace imposible, es solo un camino. Pero es un camino en el cerebro que puede dirigirse específicamente a este músculo emocional negativo en particular”, explica Finzi.

Debe recordarse que, debido a que hay muy pocas investigaciones sobre el tema, es demasiado pronto para sugerir que el Botox podría ser el próximo tratamiento para la depresión. Además debemos considerar cuán duraderos serían los efectos del Botox tanto a nivel físico como emocional y que posibles “efectos secundarios” podría dejar a nivel psíquico (como la adicción al botox que parecen tener muchas celebridades). Sin embargo, es intrigante la conexión mente-cuerpo que sugieren los resultados, que tal vez podría abrir nuevos caminos para aliviar los síntomas depresivos.

Fotografía: Steven Depolo (Flickr)
Fuente: Healthland; PRI

  • Salud Mental y Tratamientos

Yo, pedófilo

  • Alejandra Alonso
  • 09/09/2013

*Aclaración del editor: Este ensayo fue escrito por David Goldberg y publicado originalmente en la revista The Atlantic y ha sido traducido y adaptado por Alejandra Alonso para ser publicado en Psyciencia.

La pornografía infantil debería terminar. Como ex-convicto, pregunto: ¿es la prisión la manera más efectiva de hacer frente a la demanda?

Faltaba poco para las 3:00 a.m., el 30 de Mayo del 2012, cuando apagué mi computadora por última vez. Deslicé mi silla reclinable tres pies y me metí en la cama, para otra sesión de insomnio de auto-odio y lástima. Más tarde esa mañana, no estaría en la casa de mis amigos, como había planeado para ayudarlos a celebrar su aniversario de 25 años de casados. En su lugar, me encontré a mi mismo sentado en el duro banco de madera de una celda de la policía.

Por casi 20 años, pasé prácticamente cada noche de mi vida de la misma manera: Sentado frente a mi computadora rastreando pornografía infantil en Internet o mirando las fotos y videos que ya eran parte de mi colección. Sin importar cuántas imágenes encontrara, e independientemente de cuán privado de sueño me sintiera, nada me detendría para continuar esta búsqueda perversa. Fue mi propia falta de cuidado lo que finalmente me llevó a ser arrestado, cuando utilicé mi tarjeta de crédito para pedir algunas películas que tenían imágenes de niños desnudos, aunque ninguna de esas películas eran de naturaleza sexual. Un oficial de policía me dijo más tarde que pensó que yo había sido atrapado a propósito, porque, subliminalmente, era la única forma en que pararía. Estaba en lo correcto sobre esto último, pero no en lo primero. Nadie que sea pedófilo quiere ser descubierto y que su horrible secreto sea revelado al mundo.

(Artículo relacionado:  Pedofilia ¿qué puede hacerse?)

De hecho, habían noches (pero no muchas) donde me atrevía a sentarme en mi silla cuando mi computadora estaba apagada e imaginaba cómo se sentiría ser arrestado ¿Caería al suelo en posición fetal, vomitaría, me echaría a llorar o tal vez incluso tendría un ataque cardíaco? Cuando ese día finalmente llegó para mi, no hice nada de eso. Luego de que el detective principal me leyera mis derechos y me hiciera muchas preguntas sobre mi computadora, una extraña calma se apoderó de mi. Supe que mi trabajo como editor en un diario local y mi hobby enseñando béisbol habían llegado a su fin. Aunque los pensamientos predominantes de mi cabeza no eran sobre mi pasado, sino más bien sobre mi futuro. Supe que estaba en una posición única para ayudar a otros a entender la perturbadora vida de un pedófilo. Nunca pedí ser maldito con esta atracción sexual, y jamás lastimé a ningún niño. De hecho, siempre fui un buen modelo a seguir como entrenador, y un ciudadano recto durante el día. Las noches eran el problema.

No estoy defendiendo el estilo de vida intergeneracional

Durante los meses que siguieron a mi arresto, mis instintos periodísticos se hicieron cargo. Quería saber cómo una vida entera de codiciar a niños pequeños podía parecer tan normal para mi a un nivel emocional, incluso aunque sabía racionalmente que era un estilo de vida completamente desviado. Pasaría mis días anhelando volver a mi computadora, de la misma manera en que un goloso anticipa un banquete delicioso. Sin embargo, cuando la computadora estaba apagada, me despreciaba por estar tan excitado al mirar fotos de niños pequeños cuyas vidas habían sido destruidas gracias a su participación involuntaria.

Pasé mucho tiempo en los días que siguieron a mi arresto reflexionando sobre mi niñez. ¿Hubo algún terrible trauma, un incidente de abuso tal vez, que había ocultado y que me llevó a la pedofilia?¿Hubo alguna anomalía en mis años formativos que torcieron mi desarrollo sexual? Le pedí ayuda a mi hermana, una experimentada terapeuta, pero me aseguró que hasta donde ella sabía nada de eso me había pasado. Fui víctima de una infancia infeliz y de un padre psicológicamente perturbado. Tuve todos los síntomas de la detención del desarrollo, lo que me dejó en el nivel emocional de un niño de 10 años de edad. Pero no había nada notable o indecible sobre mi niñez.

Decidí continuar mi viaje buscando la ayuda de un terapeuta y haciendo tanta investigación sobre el tema de la pedofilia como pudiera, con la ayuda de mi hermana y su computadora. Lo que descubrí fue que por cada pepita de información útil, había un hoyo profundo de preguntas sin respuesta que le seguían. El mayor interrogante que estoy convencido de que siempre carecerá de respuesta es por qué soy pedófilo. Es el equivalente a  tratar de determinar por qué alguien es heterosexual o gay. No elegimos nuestra orientación sexual. Si pudiéramos, creeme, nadie elegiría la mía.

Lo más importante que descubrí en los 15 meses desde mi arresto no es el por qué, sino lo que se puede hacer para cambiar las preconcepciones y  equivocaciones que tiene la sociedad cuando se trata de pedófilos. Muchas personas escuchan esa palabra y piensan en los Jerry Sanduskys  y los curas católicos abusadores del mundo. Muy pocos piensan en los millones que luchan con sentimientos sexuales sobre los cuales jamás pueden actuar. Cuando alguien oye la palabra “pedófilo”, inmediatamente piensa en un abusador de niños. Sin embargo, la mayoría de los pedófilos no abusan, en su lugar pasan horas buscando pornografía infantil. Y mientras esos números crecen, también lo hace el número de víctimas.

No estoy defendiendo el estilo de vida intergeneracional. De hecho, nunca hay una instancia en que un adulto debiera involucrarse en comportamiento sexual con un niño. Pero hasta que como sociedad aprendamos que la ayuda para aquellos que ven pornografía infantil es una alternativa mucho mejor que la encarcelación, estamos condenados a ver la proliferación continua de este problema. Los científicos no saben con seguridad si hay una correlación entre ver pornografía infantil y atentar contra los niños ¿No sería lindo conseguir ayuda para los pedófilos antes de que lo sepamos con certeza?

pedofilia
Artículo relacionado: Pedofilia ¿qué puede hacerse? (click en la imagen)

A pesar de mi arresto, soy uno de los afortunados. Porque fui arrestado en Canadá, solo me dieron una sentencia de 90 días. De haber sido arrestado en Estados Unidos, podría haber servido muchos años con criminales endurecidos. Mi familia y amigos me han apoyado desde mi arresto y me aman y aceptan, a pesar de mis defectos sexuales.

¿Cuántos millones de pedófilos alrededor del mundo no son tan afortunados como yo?¿Cuántos jamás buscarán ayuda, demasiado asustado por las consecuencias sociales y legales? ¿Cuántos continuarán creando la demanda que alimenta un mercado malicioso de pornografía infantil?¿Encerrarlos por un tiempo es la solución?¿Llegará alguna vez el día en que nosotros, como sociedad alcancemos y ofrezcamos la ayuda que tan desesperadamente necesitan?

Imagen: legends2k (Flickr)

  • Análisis

No todo es saber comunciarse para hacer feliz a tu pareja

  • Alejandra Alonso
  • 21/08/2013
Pareja

Hemos escuchado muchas veces que la comunicación es una parte fundamental en toda relación, y según un nuevo estudio, es crucial para sentirse satisfecho con la misma. No obstante, según el mismo estudio, para estar feliz con tu pareja existen otros dos factores que podrían ser mucho más relevantes. Si querés conocer cuáles son, seguí leyendo.

En un estudio basado en internet, que involucró a 2201 participantes referidos por consejeros de parejas, los científicos decidieron probar siete “competencias” en materia de relaciones, que investigadores y terapeutas encontraron importantes para promover la felicidad en las relaciones románticas. La idea fue ordenar las habilidades en orden de importancia para comenzar a acumular datos sobre qué aspectos de las relaciones son más importantes para mantenerlas saludables.

Sumado a la comunicación y la resolución de conflictos, los investigadores también estudiaron el sexo o romance, el manejo del estrés, las habilidades para la vida, el conocimiento de la pareja y el autocontrol, para ver cuáles eran los mejores predictores de la satisfacción en las relaciones.

Se les preguntaba a las parejas sobre cuestiones que probaban sus competencias en todas estas áreas y luego se inquirió sobre cuán satisfechos estaban con sus relaciones. Los investigadores correlacionaron las debilidades y fortalezas de cada persona en cada área con la satisfacción con respecto a la relación que cada persona había reportado percibir.

Encontraron que aquellos que reportaron comunicarse más efectivamente mostraron la mayor satisfacción con sus relaciones. Pero los siguientes dos factores (que también fueron los únicos que se vincularon fuertemente con la felicidad en la pareja) fueron el conocimiento de la otra persona (que incluye desde el sabor de helado que prefieren hasta sus esperanzas y sueños en la vida) y habilidades para la vida (ser capaz de mantener un trabajo, manejo de dinero, etc.).

(…)Se necesita comunicación, pero también una comprensión de que incluso las redes de comunicación más fuertes entre los miembros de la pareja, pueden vacilar cuando están bajo esta presión interna-externa(…)

Los consejeros de pareja, sin embargo, raramente abordan estas dos áreas, ya que el foco para fortalecer a las parejas se ha centrado en mejorar la comunicación para reducir las conductas destructivas y construir apoyo y consuelo para el otro. Tom Bradbury, un investigador de parejas veterano de UCLA, dice: “Durante los últimos 25 años, la actitud prevaleciente ha sido que las relaciones necesitan encontrarse con nuestras necesidades emocionales.”

Por otro lado, el encontró que, para ser exitosas, las relaciones necesitan funcionar de una manera más práctica y mundana. Y aprender más sobre tu pareja, dice el autor principal Robert Epstein, un profesor de psicología en la Universidad de South Pacific, podría ser relativamente fácil si la gente (especialmente los hombres, ya que puntuaron peor en esta área) se tomara el trabajo de averiguar, recordar y utilizar información relativamente simple como los nombres de los familiares de su pareja y las fechas de cumpleaños y aniversarios.

Epstein dice que es incluso más importante que esto, conocer cosas críticas como si tu pareja quiere tener hijos en un futuro. Aunque su estudio no separó conocimientos triviales de los más profundos, el dice que los dos están fuertemente vinculados.

Aunque otros investigadores de matrimonios han concordado en que olvidar cosas como cumpleaños y preferencias de comida puede ser molesto y perjudicial para una relación, ellos creen que la importancia de las habilidades para la vida reveladas en el estudio es fuerte.

“En realidad es una idea vieja. En 1900 una mujer u hombre pensarían, ‘mi pareja debe ser capaz de proveer.’ ‘Ella debe ser capaz de plantar y desenterrar los cultivos’”, dice Badbury. Si la pareja tenía esa base, deberían haberse considerado afortunados si también tenían sus necesidades emocionales cubiertas.

Para las parejas actuales, interesadas en mejorar su relación, dicen los autores del estudio, los terapeutas podrían considerar volver a lo básico e incorporar habilidades sociales más prácticas en su discusión. Y eso podría incluir referir a aquellos que les faltan habilidades a manejadores de dinero o entrenadores de profesión. “Las habilidades de comunicación son necesarias, pero no son suficientes cuando están bajo estrés”, dice Lisa Neff, investigadora de parejas de la Universidad de Texas.

Es importante para las parejas saber cómo el mundo externo (es decir, la posibilidad de conseguir trabajo, si sus hijos podrían jugar con seguridad afuera o ir a una buena escuela) afectará su relación incluso si tienen buenas habilidades para la vida y para comunicarse. Las relaciones sólidas, dice Bradbury, reconocen cómo las presiones de afuera de la casa y de la relación pueden influenciar, e incluso romper buenas habilidades de comunicación.

“Afuera hay un mundo real que nos afecta”, dice Bradbury. Para lidiar con esto se necesita comunicación, pero también una comprensión de que incluso las redes de comunicación más fuertes entre los miembros de la pareja, pueden vacilar cuando están bajo esta presión interna-externa. La estrategia que él sugiere para las parejas que lo consultan es unir fuerzas en vez de alejarse del otro. “No es uno contra el otro; son los dos contra el mundo», dice el.

Fuente: Healthland
Imagen: Gonzales-Alba (Flickr)

  • Ciencia y Evidencia en Psicología

¿Querés sentirte más feliz? Tal vez deberías usar menos Facebook

  • Alejandra Alonso
  • 15/08/2013
Bienestar

Facebook ayuda a las personas a sentirse conectadas, pero no necesariamente las hace más felices, muestra un nuevo estudio titulado “El uso de Facebook predice la disminución del bienestar subjetivo en adultos jóvenes”. El mismo fue publicado en PLOS ONE. Cabe destacar que este es el primer estudio conocido que examina la influencia de dicha red social en la felicidad y la satisfacción.

“En la superficie, Facebook provee un recurso invalorable para llenar la necesidad humana básica de conexión social,” dice Ethan Kross, psicólogo social de la Universidad de Michigan, autor principal del artículo y asociado del Instituto de Investigación Social de la Universidad de Michigan. “Pero en vez de afianzar el bienestar, encontramos que el uso de Facebook predice el resultado contrario-lo socava.”

«Esto es un resultado de importancia crítica porque va hasta el mismo corazón de la influencia que las redes sociales pueden estar teniendo en la vida de las personas,” dice John Jonides, neurocientífico cognitivo de la Universidad de Michigan y coautor del estudio.

Mientras más utilizaba Facebook, peor se sentían posteriormente

Para el estudio, los investigadores reclutaron a 82 adultos jóvenes, un núcleo demográfico de los usuario de Facebook. Todos tenían smartphones y cuentas en Facebook. Utilizaron muestreo de experiencia (una de las técnicas más confiables para medir cómo piensan, sienten y se comportan las personas momento a momento en su vida cotidiana) para evaluar su bienestar subjetivo mandandoles mensajes de texto en momentos seleccionados al azar, 5 veces al día por dos semanas.

Cada mensaje contenía un link a una encuesta online que constaba de 5 preguntas:

1. ¿Cómo te sientes ahora?

2. ¿Cuán preocupado estás ahora?

3. ¿Cuán solo te sientes ahora?

4. ¿Cuánto has utilizado Facebook desde la última vez que te preguntamos?

5. ¿Cuánto has interactuado con otras personas “directamente” desde la última vez que preguntamos?

Disminuían sus niveles de satisfacción

El estudio encontró que mientras más utilizaba Facebook durante un período de tiempo, peor se sentían posteriormente. Los autores también indagaron sobre sobre el nivel de satisfacción en la vida de los participantes, al principio y al final del estudio. Con respecto a esto, encontraron que mientras mayor tiempo le dedicaban los individuos a Facebook durante esas dos semanas, más disminuían sus niveles de satisfacción.

Es importante destacar que los investigadores no encontrar evidencia de que  interactuar con personas directamente vía teléfono o cara a cara influenciara negativamente al bienestar. Al contrario, encontraron que las interacciones directas con otras personas llevaron a que las personas se sintieran mejor con el tiempo.

Así mismo, no encontraron evidencias para dos posibles explicaciones alternativas para el descubrimiento de que Facebook socava la felicidad. Las personas no eran más propensas a utilizar Facebook cuando se sentían mal. Por otro lado, aunque los individuos si tendían a utilizar más esta red social cuando se estaban solos, tanto la soledad y el uso de Facebook predecían de forma independiente cuán felices se sentían los participantes posteriormente.

“Esta es la ventaja de estudiar el uso de Facebook y el bienestar como un  proceso dinámico que se despliega en el tiempo,” dice el investigador emocional Philippe Verduyn, otro coautor del artículo. “Nos permite  extraer inferencias sobre la probable secuencia causal del uso de Facebook en el bienestar.»

Los investigadores esperan poder conducir estudios adicionales en una variedad de grupos etarios para examinar la generalizabilidad de estos resultados y los mecanismos psicológicos implicados.

Fuente: Universidad de Michigan

Fotografía: Gabriel Flores en Flickr

  • Salud Mental y Tratamientos

TIC para personas con autismo

  • Alejandra Alonso
  • 14/08/2013
Autismo

Autismo España sacó una nueva herramienta para las personas con esta condición que apunta a contribuir a mejorar la calidad de vida de esta población. Según la página, el proyecto plantea una guía que sirva de “recurso de apoyo y de intercambio de experiencias en las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC).”

Configurada de manera sencilla, clara y prolija, la página se propone mantener informados a padres y profesionales sobre los últimos recursos informáticos disponibles para individuos con trastornos del espectro autista, especialmente los que tienen que ver con habilidades de comunicación.

El sitio también permite descargar PDFs y observar videos ejemplificadores para cada herramienta.

Haciendo click aquí podes explorar la página y enterarte por vos mismo cómo funciona, quiénes colaboraron en el proyecto y otras cuestiones que podrían interesarte.

Se recomienda utilizar los navegadores Chrome o Mozilla Firefox para una experiencia óptima.

Fuente: Autismo Diario

  • Salud Mental y Tratamientos

Romance y autismo

  • Alejandra Alonso
  • 08/08/2013

Alguien me pasó un artículo de The Atlantic, cuyo título en español sería “Citas en el espectro autista” y se refería a las citas románticas. Enseguida me llamó la atención porque era algo en lo que nunca me había detenido a pensar, yo asumía que no era un aspecto de la vida al que ellos le dieran mucha importancia. Después de terminar el artículo me di cuenta que estaba muy equivocada. Ellos están muy interesados en las relaciones amorosas, pero sus dificultades sociales, entre otras, no se las hacen muy fáciles.

Una de las historias que comparte el artículo es la de Paulette Penzvalto, ex concursante de Señorita América y cantante de ópera formada en Julliard, quien sabía que tenía un concepto de romance diferente al de sus ex novios y al de la mayoría de las personas. Su idea de una cita incluye el siguiente protocolo, en sus propias palabras:

“Honestamente, si quieres ser romántico conmigo, mandame un e-mail a través de Outlook y dame todas las fechas, ubicaciones y tiempos posibles, así puedo prepararme. La gente tiende a pensar en el romance como el estímulo del momento y excitación, yo pienso en el romance como cosas que tienen sentido y son lógicas”.

Sin embargo, y esta es la parte más interesante de la historia, ella desconocía por qué le pasaba esto, hasta que, a la edad de 31 años, fue diagnosticada con autismo.

El caso de Penzvalto resalta lo difícil que puede ser involucrarse en relaciones románticas siendo un persona con autismo. Muchos autistas altamente funcionales tienen deseos de tener citas románticas con otros. Sumado a esto, las tasas de autismo han aumentado dramáticamente durante las últimas dos décadas, razón por la cual se ha centrado el foco en las intervenciones tempranas y se ha dejado un poco de lado a los adolescentes y adultos con esta condición, quienes claramente necesitan ayuda, especialmente cuando se trata de construir una relación amorosa. Con las personas en el espectro hay que considerar cuidadosamente los lugares y las cuestiones sensoriales (sonidos y luces) que podrían ponerlos muy incómodo. Sin dejar de mencionar lo que tiene que ver con el contacto sexual.

Si quieres ser romántico conmigo, mandame un e-mail a través de Outlook y dame todas las fechas, ubicaciones y tiempos posibles, así puedo prepararme

“Podría generarles malestar si alguien los besa ligeramente o les agarra la mano. Necesitan presión y eso no es lo que comúnmente uno piensa del amor romántico y tierno,” dice Dorsey Massey, un trabajador social que ayuda a llevar a cabo citas y otros eventos sociales a personas con diferentes discapacidades intelectuales.

Tal vez por todas estas cuestiones, que caracterizan a la persona con autismo y que van un poco en contra del concepto de “romance normal”, es que raramente se los considere en este tipo de contextos. Con respecto a esto, la autora del artículo expresa que una queja constante entre los individuos autistas es el concepto errado que muchos tienen de que ellos no pueden expresar amor o interés por otros. Alex Plank, el otro testimonio en el que se centra el artículo, y fundador de WrongPlanet.net (una comunidad autista muy popular),
dice:

“Yo pienso muchas veces que alguien sale en una cita con alguien en el espectro y piensa que son robots. Es difícil leernos si no decimos nuestros sentimientos explícitamente, pero todos los sentimientos están ahí.”

De hecho, las personas con autismo podrían tener mayores capacidades emocionales. “Estudios han mostrado que los individuos con autismo pueden tener sentimientos que son más fuertes y profundos que los de aquellos sin autismo,” dice John Elder Robinson, autor del bestseller “Look Me in the Eyes”  (Mirame a los Ojos) y un defensor del autismo. “A pesar de esto, esos sentimientos pueden ser invisibles para los de afuera porque no los mostramos. Porque no mostramos o  la respuesta esperada, las personas hacen suposiciones erróneas sobre la profundidad de nuestros sentimientos hacia otras personas.”

La Dra. Elizabeth Laugeson, una profesora en UCLA, quien también fue entrevistada para el artículo, agrega: “Si le preguntas a una persona con autismo si querrían una relación romántica, probablemente digan que sí, pero posiblemente también digan que no saben cómo conseguirla.”

Esto enfatiza el hecho de que las personas con autismo están muy interesadas en las relaciones amorosas solo que, por las características propias de su condición, se les hace muy difícil. También hay una escasez de programas que enseñen efectivamente las habilidades necesarias para relacionarse románticamente con otros.

“Si le preguntas a una persona con autismo si querrían una relación romántica, probablemente digan que sí, pero posiblemente también digan que no saben cómo conseguirla.”

“Las intervenciones tempranas pueden mejorar significativamente los resultados, pero los niños crecen, y no tenemos los servicios apropiados,” dice Laugeson, quien sirve como directora para el PEERS en UCLA, un programa que enseña habilidades de interacción social, incluyendo las románticas, a adolescentes y adultos jóvenes en el espectro.

“Sabemos que las personas con autismo piensan muy concretamente. Las habilidades sociales pueden ser comportamientos abstractos difíciles de describir, pero tratamos de desmenuzarlos en pasos concretos,” dice Laugeson.

Por ejemplo, PEERS toma el aparentemente trivial, pero en verdad complejo, acto de coquetear y lo traduce en una lección paso a paso. “Primero, los miembros de una pareja notan al otro en un lugar. Hacen contacto ocular y miran para otro lado, y vuelven a mirar y mirar para otro lado. El mirar para otro lado hace saber que eres inofensivo, pero un error común que una persona con autismo puede cometer es mirar fijamente, lo que puede parecer temible y asustar a una persona,” dice Laugeson. También se instruye específicamente a los individuos con autismo sobre cómo sonreír y por cuánto tiempo ya que “otro error común es una sonrisa muy grande antes que una ligera. Una sonrisa grande puede ser aterradora.”

Aunque para las personas neurológicamente normales el acto de coquetear sea algo de lo más natural y hasta divertido, los autistas lo ven sumamente complicado y sin sentido, en palabras del propio Plank:“Todavía no le encuentro el sentido a coquetear. Parece una pérdida de tiempo.” Sin embargo es necesario para que se pueda dar una cita, así es que Plank y Laugeson trabajaron en un video para enseñar a su comunidad en WrongPlanet cómo coquetear. “Si lo piensas lógicamente, dices cosas que normalmente no dirías, así que es más difícil. Hay todo un set de cosas con las que tienes que lidiar.”

En la universidad, Plank no tenía quién lo guiara, así que tuvo que ingeniarselas solo, estudiaba a los chicos que eran exitosos consiguiendo citas y comenzó a imitar su conducta. Se dio cuenta de que la clave era mostrarse seguro. Pero, lamentablemente, esto significa otro problema para las personas en el espectro, porque según Plank: “Constantemente no somos capaces de leer si una persona está interesada, así que puedes tener una inseguridad sobre si le gustas a la persona con la que estás saliendo.”

Si bien las desventajas y complicaciones que nombramos aplican para todos los autistas,  los hombres en el espectro podrían tener más desventajas con respecto a las mujeres. Robinson lo expresa así: “Para los chicos en el espectro es una cosa de una sola dirección. Podemos estar interesados pero no tenemos forma de saber si ellas están interesadas en nosotros.”

¨Podemos estar interesados pero no tenemos forma de saber si ellas están interesadas en nosotros.”

En cambio las mujeres podrían tener una ventaja entre sus rasgos autistas. Un rasgo común en las personas en el espectro es ser extremadamente lógicos y francos y, si bien un hombre franco puede ser rechazado por las mujeres o abofeteado (pensá cómo reaccionaría una mujer si su cita le dijera: “si, te ves gorda en ese vestido”), si consideramos ese famoso estudio de 1989 donde una investigadora recibió respuestas positivas al solicitar sexo a hombres en la calle el 69 a 75% de las veces, mientras que su contraparte masculino no recibió ni un solo sí, podemos concluir que las mujeres que son francas suelen ser premiadas por ello. “Especialmente si son hombres neurológicamente normales, realmente atractivos, aprecian cuando las mujeres son francas,” dice Plank.

Penzvalto también nota esto, aunque no necesariamente piensa que las mujeres con autismo la tienen más fácil : “He encontrado que las personas neurológicamente normales realmente aprecian las cualidades que poseen los individuos en el espectro: completa honestidad y una casi incapacidad de mentir.”

Por otro lado, ambos sexos en el espectro luchan igualmente con el miedo al rechazo. Ya que mucho de las citas para adultos autistas es prueba y error, el riesgo de errores, y frecuentemente errores vergonzosos, es alto. Jeremy Hamburgh, un especialista en citas para personas con necesidades especiales, incluyendo a aquellos en el espectro autista, ha notado cuán duramente toman sus clientes el fracaso inicial con las citas. “Los riesgos y recompensas son muy diferentes a los de las personas neurológicamente normales. La persona neurológicamente normal puede salir y conocer a diez y que le vaya bien con una persona y sentir éxito, pero para uno con necesidades especiales que ha sido rechazado toda su vida, eso puede lastimar su autoestima,” dice él.

Los diagnósticos no siempre son malos, no siempre empeoran la situación de las personas, sino que algunas veces las liberan.

Plank concuerda, ya que ha visto amigos suyos en el espectro alejarse rápidamente de las citas por miedo al rechazo: “Es un juego de números de muchas formas y dado que las personas en el espectro piensan en blanco y negro, piensan que están haciendo algo mal. Desearía que más gente en el espectro supiera que se necesita práctica, que necesitas salir a más citas,” dice él.

Peor aún,  los autistas a veces llegan a echarse la culpa por no presentar normas neurológicamente normales para las citas y el romance. Mientras entrevistaba a personas en el espectro para su documental Autism in Love (todavía produciéndose, pero tiene un video muy ilustrativo en inglés) el cineasta Matt Fuller notó cómo: “Cuando algo es percibido como inapropiado, y se aborda, se avergüenzan y eso los lleva a un agujero de conejo de pensamientos autocríticos.”

De hecho, durante uno de esos tipos de peleas en una relación al principio de este año fue que Penzvalto decidió ser evaluada para autismo. Se dio cuenta de la frustración de sus novios anteriores sobre su “pensamiento rígido” y sus “problemas con los límites”, y que todo podría ser explicado por el autismo; y una evaluación psicológica posterior lo confirmó. Sin embargo, no se sintió alarmada, sino más bien aliviada. Y aquí es donde tenemos que considerar que los diagnósticos no siempre son malos, no siempre empeoran la situación de las personas, sino que algunas veces las liberan.

No necesariamente todos los miembros en el espectro comparten este sentimiento, pero darse cuenta de por qué ella veía al amor y el romance de la forma en que lo veía la liberó de la presión de los patrones neurológicamente normales. Ella lo explica así: “La liberación número uno que encontré en el diagnóstico es que no necesito realmente ceder a la idea de una pareja sobre cómo debería ser o verse una relación,” dice ella. “Es realmente liberador saber que he estado viviendo mi vida de una determinada manera y que eso está bien.”

Fuente: TheAtlantic
Imagen:  La voz del interior

Paginación de entradas

Anterior1…5556575859…64Próximo

Apoya a Psyciencia con tu membresía 💞.    

Únete a Psyciencia Pro
  • Inicia sesión
  • Tips para terapeutas
  • Podcast
  • Recursos
  • Webinars
  • Artículos
  • Validación de la Escala DERS en Colombia: Lo que necesitas saber
  • Ejercicio clínico: Libérate de la prisión de la opinión ajena (PDF)
  • Canciones para llorar cuando el paciente te cancela
  • Me voy a arrepentir: cuando el miedo al arrepentimiento te paraliza para tomar decisiones
  • Interrumpir a tus pacientes sin romper el vínculo
Psyciencia
  • Contáctanos
  • Publicidad
  • Nosotros
  • Publica
Psicologia y neurociencias en español todos los días

Ingresa las palabras de la búsqueda y presiona Enter.