[Estamos en Discord. Empieza a seguirnos ahora]
Cualquiera pensaría que tener sobrepeso u obesidad no tiene nada de positivo ya que no hay estudios que describan los beneficios de ser obeso, pero un estudio publicado por la revista médica The Lancet Diabetes and Endocrinology podría ser el primero en encontrarle beneficios a esta condición, sugiriendo que las personas con obesidad mórbida (IMC superior a 40) tienen un 29% menos de riesgo de presentar demencia que las de peso normal.
Este estudio de tipo retrospectivo, basado en los informes médicos de 1.958.191 personas procedentes del Reino Unido desde el año 1992 hasta el 2007, incluyó a personas de 40 años o mayores. Se excluyó a personas con un historial previo de demencia. Además, se ajustaron los resultados para tener en cuenta otros factores de riesgo de demencia (como el alcohol o el tabaco).
Se encontró que las personas de entre 40 y 55 años, delgadas, tienen un 34% más riesgo de desarrollar demencias en el futuro, si se las compara con las que tienen un peso normal.
Estos resultados sirvieron para que los investigadores pudieran establecer un vínculo entre el aumento del IMC y la reducción progresiva del riesgo de sufrir demencia, incluyendo a las personas obesas o con sobrepeso.
Mensaje de nuestro sponsor exclusivo: Ítaca Formación
Descubre cómo brindar atención psicológica eficaz a distancia con curso especializado en telepsicología de Ítaca Formación. Aprende las mejores prácticas, herramientas y técnicas para ofrecer apoyo emocional y terapéutico a tus pacientes desde la comodidad de tu hogar. Este curso está diseñado por expertos y te proporciona las habilidades necesarias para adaptarte a las nuevas demandas del sector. No pierdas la oportunidad de ampliar tus competencias y mejorar tu práctica profesional.
![](https://pavlov.psyciencia.com/2024/07/SEMANA-3-PSICIENCIA-ITACA-FORMACION-1200x720.jpg)
El doctor Nawab Qizilbash, epidemiólogo y coordinador del estudio, reconoce que es incapaz, actualmente, de explicar los resultados.
“Numerosos factores como el régimen alimentario, la actividad física, la fragilidad, los factores genéticos o las modificaciones de peso relacionadas con otras patologías podrían influir”, dice el doctor.
Estos hallazgos son preliminares, así que tomalos con pinzas, no estamos diciendo que debes subir de peso para prevenir el alzheimer.
Fuente: El País