Psyciencia
  • SECCIONES
  • PSYCIENCIA PRO
    • ÚNETE A LA MEMBRESÍA
    • INICIA SESIÓN
    • CONTENIDO PARA MIEMBROS
    • RECURSOS PARA MIEMBROS
    • TIPS PARA TERAPEUTAS
    • PODCAST
    • WEBINARS
  • NORMAS APA
  • SPONSORS
  • NOSOTROS
Psyciencia
  • SECCIONES
  • PSYCIENCIA PRO
    • ÚNETE A LA MEMBRESÍA
    • INICIA SESIÓN
    • CONTENIDO PARA MIEMBROS
    • RECURSOS PARA MIEMBROS
    • TIPS PARA TERAPEUTAS
    • PODCAST
    • WEBINARS
  • NORMAS APA
  • SPONSORS
  • NOSOTROS

Salud Mental y Tratamientos

1163 Publicaciones

Incluye trastornos, psicopatología y terapias.

  • Salud Mental y Tratamientos

Nuevo estudio sugiere que el trastorno de los circuitos neuronales en autistas es reversible

  • 17/09/2012
  • Maria Fernanda Alonso

Las personas con autismo sufren de un trastorno generalizado del desarrollo del cerebro que se hace evidente en la primera infancia. Peter Scheiffele and Kaspar Vogt, profesores en el Biozentrum de la Universidad de Basilea, han identificado una disfunción específica en los circuitos neuronales que es causada por el autismo. En la revista Science, los científicos también informan sobre su éxito en la reversión de estos cambios neuronales. Estos resultados son un paso importante en el desarrollo de fármacos para el tratamiento del autismo.

De acuerdo con las estimaciones actuales, alrededor de un 1% de todos los niños desarrolla un trastorno del espectro autista. El autismo es un trastorno hereditario del desarrollo del cerebro. Un factor de riesgo esencial para el desarrollo de autismo son numerosas mutaciones en más de 300 genes que se han identificado, incluyendo el gen neuroligin-3, que está implicado en la formación de sinapsis, la unión de contacto entre las células nerviosas.

La pérdida de neuroligin-3 interfiere con la transmisión de señales neuronales

Las consecuencias de la pérdida de neuroligin-3 pueden ser estudiado en modelos animales. Los ratones que carecen del gen para neuroligin-3 desarrollan patrones de comportamiento que reflejan aspectos importantes que se observan en el autismo. En colaboración con Roche, los grupos de investigación del Biozentrum de la Universidad de Basilea han identificado un defecto en la transmisión de la señal sináptica que interfiere con la función y plasticidad de los circuitos neuronales. Estos efectos negativos se asocian con el aumento de la producción de un receptor de glutamato neuronal específico, que modula la transmisión de señales entre neuronas. Un exceso de estos receptores inhibe la adaptación de la transmisión de la señal sináptica durante el proceso de aprendizaje, rompiendo así el desarrollo y función del cerebro a largo plazo.
De gran importancia es el hallazgo de que el retraso del desarrollo del circuito neuronal en el cerebro es reversible. Cuando los científicos reactivaron la producción de neuroligin-3 en los ratones, las células nerviosas redujeron la producción de los receptores de glutamato a un nivel normal y desaparecieron los defectos estructurales en el cerebro, típicos en el autismo. Por lo tanto, estos receptores de glutamato podrían ser un objetivo farmacológico adecuado con el fin de detener el desarrollo del trastorno autista o incluso revertirlo.

Visión para el futuro: Medicamentos para el autismo

El autismo en la actualidad no tiene cura. En el presente, sólo los síntomas de la enfermedad pueden ser aliviados con terapia conductual y otros tratamientos. Un nuevo enfoque de su tratamiento, sin embargo, se ha descubierto a través de los resultados de este estudio. En uno de los proyectos apoyados por la Unión Europea, UE-AIMS, los grupos de investigación del Biozentrum están trabajando en colaboración con Roche y otros socios de la industria en la aplicación de los antagonistas del receptor de glutamato en el tratamiento del autismo y esperan, que en el futuro, este trastorno se puede tratar con éxito, tanto en niños como en adultos.

Fuentes: Sciencedaily; Biozentrum

  • Salud Mental y Tratamientos

Cautivar a un niño y su familia

  • 15/09/2012
  • Jorge Ayala Salinas

Imagina que visitas por segunda, tercera o cuarta vez el consultorio de un psicólogo. Llegas con la etiqueta que cargas en la escuela: eres un niño problemático, antisocial, hiperactivo, incorregible, inadaptado, abusivo. Crees que vas a pasar nuevamente por esos tediosos tests que vienen señalando desde hace un tiempo que tu personalidad es defectuosa y que en tu familia reina la falta de afecto, la incomprensión, la intolerancia, poca comunicación, pésima calidad de tiempo juntos, fracaso de tus padres en la crianza y un sin número de recomendaciones y clichés psicológicos.

A esto hay que agregarle que tus padres se encuentran cansados de todas estas tribulaciones y gastos de energía, tiempo y dinero (sería fabuloso que por hacer un pésimo trabajo algunos profesionales no deriven gastos. Sin embargo, incluso el mal trabajo nos cuesta).

Ahora imagina que eres tú el terapeuta que esta familia ha elegido para, digamos, volver a confiar en el trabajo de los psicólogos. Tienes una enorme tarea. Tienes la misión de ganarte la confianza y atención del niño: atraerlo. Vas a necesitar ejercer una fuerte influencia en el niño y en esta familia que ha ido perdiendo las esperanzas de encontrar verdaderamente la ayuda que necesitan y desestigmatizar al niño. Necesitarás ejercer una enorme influencia en el ánimo de estas personas. Vas a necesitar ejercer una suerte de hechizo. Necesitas cambiar los corazones, las mentalidades y las acciones de cada uno. Y también las tuyas. En una sola palabra: necesitas Cautivar.

Cuanto mayor sea la necesidad de cambio mayor será nuestra necesidad de cautivar al niño.

¿Por qué es necesario cautivar al niño y su familia?

La familia llega a consulta con una necesidad enorme y una meta, y nosotros vamos a responder a esas necesidades con nuestras acciones. Las razones por las que necesitamos cautivar al niño y su familia son las siguientes:

1. Llegan a consulta con expectativas nobles y elevadas

El niño desea cambiar y sus padres quieren ayudarlo. Vamos a necesitar más que una relación cordial con el niño, mucho más que una relación ordinaria. Necesitamos convencer al niño de que compartimos no una meta o un objetivo, sino más bien algo superior: un sueño. Es mejor pensar las acciones como sueños, anhelos y promesas, que como procesos de (auto) corrección y normalización.

2. Han tomado una decisión difícil e infrecuente

Hace más de un año recibí a una familia: papá, mamá y el niño de 7 años. En el auto esperaban los abuelos. Renzo, el papá, apenas recibí a la familia, tomó mi brazo y me llevó a un lado del jardín:

El pequeño no sabe que eres un psicólogo, le dijimos que visitaríamos a un amigo que es muy bueno aconsejando a los niños. Mis padres, que están en el carro, tampoco desean que visitemos más a los psicólogos, han terminado odiándolos cada vez que han leído en los informes cómo han descalificado la crianza que le hemos dado al niño. Yo creo que no es justo que hagan eso. Ya hemos visitado a cuatro profesionales y todos han hecho lo mismo: nos han dicho que es un niño difícil, inadaptado e incluso la psicóloga de la escuela se atrevió a decirnos que estábamos criando al futuro líder de una pandilla o barra brava. Eso enfureció a mi esposa y también a mi papá, que no quiere saber nada con los psicólogos. No es justo que nos digan eso y comparen a mi hijo con un barrista. He venido a ti por recomendación de un amigo y confiamos en que puedas ayudarnos.”

Renzo y su familia habían tomado una decisión difícil: volver a confiar en el trabajo de un psicólogo, por enésima vez. Lo hacían pese a todas las pruebas de su inefectividad. Cada terapeuta se parecía más al otro.

Cuanto mayor sea la dificultad de cambio del niño y la familia, mayor será la necesidad de nosotros de cautivar. Si el cambio es muy importante, hacerlo realidad será algo muy importante.

3. Traen algunos hábitos arraigados y un problema difícil

Con frecuencia los hábitos facilitan la vida y permiten tomar decisiones rápidas y buenas. Pero también pueden impedir que el niño adopte una nueva idea que ponga en cuestión el hábito que perjudica su vida y que se ha establecido en casa o en la escuela. Cautivar al niño y cultivar un hechizo puede abrir una puerta para plantear cualquier cambio y empezar un nuevo desafío.

4. Tienen un desafío con nuestra propia disciplina

La práctica psicoterapéutica no siempre es sabia. Puede conducir a las personas por un camino absurdo, a opciones que no recogen sus habilidades, fortalezas, saberes y conocimientos necesarios para superar el problema en un intento terrible por normalizar o “corregir” la conducta.

Necesitamos estar alineados con el niño, con cada uno de los detalles que hará posible la colaboración. Nuestros intereses deben estar en la misma onda que los intereses del niño. Si no lo están debemos cambiarlos, o bien replantear lo que hacemos.

5. Quieren desafiar a la masa

Si, como lo lees. Están decididos a demostrarle a todos los que no confiaron en ellos en que pueden re-escribir su historia. Los niños me han demostrado tener serios intereses en mostrarle a sus compañeros y a sus profesores que no son lo que ellos piensan y creen que son. Bien motivados, están dispuestos a desafiar a la masa, y cautivar es tan necesario para conseguir que la familia discrepe de la masa y para lograr unirnos a ella y su sueño.

¿Te resultan familiares estas situaciones? Están presentes cada vez que los niños se interesan por conseguir junto a su familia, que el mundo sea un lugar mucho mejor para ellos. ¿Cómo podemos hacer para cautivar a un niño? Volveremos con esto en un siguiente artículo.

  • Salud Mental y Tratamientos

Normalizar y despatologizar

  • 14/09/2012
  • Jorge Ayala Salinas

Generalmente las personas llegan a consulta sin darse cuenta de que los problemas que experimentan son una respuesta simple y normal a las circunstancias que atraviesan. Romper una relación de muchos años, descubrir una infidelidad, la muerte de una persona que queremos, la renuncia o el despido en un trabajo, se convierten en dificultades que nos llevan a recurrir a la culpabilización y la autorecriminación severa de lo que somos y lo que hacemos. También nos lleva inexorablemente a buscar una definición que pueda caracterizar lo que sentimos y ubicarnos en el orden que ha impuesto la cultura sobre estos temas, cosas que alimentan aún más el problema, como encontrar marcos de referencia para hablar del problema asignándole una “patología”como “depresiva”, “bipolar”, “con una pobre autoestima”, “dependiente”, y un largo etcétera.

En ese momento las personas no son capaces de observar que si han terminado con una relación de 5 años, es normal que estén tristes y sientan que no valen nada. O que es normal estár desesperado por conseguir otro trabajo tras haber sido despedido.

¿Qué podemos hacer nosotros por estas personas? ¿Cómo procuramos darles un alivio y no perpetuar la situación y el problema a través de lo que vamos a decir?

Cuando normalizamos las dificultades que trae una persona a consulta, estamos haciendo algo por procurarle alivio. Cuando los acompañamos a pensar que las cosas no son tan malas como parecen a través de frases como “No eres el único que siente todo esto bajo estas circunstancias” o “No quiero ni imaginarme como estaría yo en tu lugar, me sorprende que hayas podido resistir toda esta enorme presión y tengo mucha curiosidad por saber cómo lo has hecho”, re-estructuramos activamente la situación como algo normal y cotidiano. Terapeutas que hacen frecuentemente la connotación de “Esto debiste de superarlo hace mucho tiempo”, no hacen más que ponerse del lado del problema y no de la persona, muchas veces patologizando y generando aún más desesperanza.

Vamos a ver a continuación algunas formas que podemos usar en la entrevista para normalizar el problema y despatologizar, ayudando a las personas a encontrar alivio.

1. A través de una historia

Podemos compartir una historia real de alguna persona que pasó por lo mismo, o una que funcione como metáfora. En ambos casos la historia nos debe servir para dar a entender que no son las únicas personas que pasan por esto. Cuando la historia ha sido bien elegida y logra tener un impacto en la personas, las respuestas suelen ser como esta:

“Jorge, ayer mismo en la noche, debo reconocer que dormi muy bien, realmente relajado. La verdad que sólo despues de leer la historia que pusiste en un sobre para abrir cuando me sintiera presionado, me sentí mucho mejor, más tranquilo, como que ayuda a uno entender algunas cosas que le pasan y a no sentirse el único al que le suceden estas cosas, y me preparó muy bien para poder dormir muy relajado y quitarme la ansiedad que había sentido toda esta semana antes de ir a la cama.”

2. Interrumpir y/o adelantarse a la descripción

Esta intervención cambia el contexto de descripciones saturadas del problema por otro contexto donde podemos sonreír y otorgarle una dosis de buen humor y esperanza a la conversación. Ocasionalmente lo podemos hacer así:

“No me digas, ya sé como termina esta historia: mientras más sermones le ofreces a tu hijo, peores se ponen las cosas. Incluso has llegado a pensar que en silencio y sin hacer nada al respecto, puedes obtener mejores resultados.”

3. Introducir la duda en creencias que no son muy útiles

Es una de las mejores cosas que podemos hacer para cuestionar las interpretaciones o connotaciones negativas:

“Estoy algo confundido…entonces, en lugar de tener a tu hija y a su enamorado en tu casa, protegidos, en confianza contigo y tu familia, preferirías que se reunieran a escondidas para conversar en uno de los parques que están cerca de tu casa.”

4. Ver el lado bueno y normalizar una recaída

Hace poco me escribió Carola, contándome lo siguiente:

“Bueno, pasó lo que temía que pasara. Salió todo el resentimiento con fuerza, como un vómito, como si lo hubiera estado tratando de meter en un cajón y ya no pude más, me ganó y por KO, de un momento a otro una situación me saco de quicio, trate de manejarla, pero una cosa llevo a la otra y a otra y a otra.”

¿Es desalentador verdad? Aquí una respuesta:

“Esto que temías que pasara es también parte del cambio. Parece no ser un retroceso sino algo que tenía que suceder en este momento, por lo demás, un buen momento para tu vida. Siempre que hay un cambio parece que el resentimiento que tienes controlado, entra en un pequeño desequilibrio e intenta dar un golpe o un manotazo de ahogado: es parte de la maduración. Todos los campeones han perdido alguna vez una pelea en el cuadrilátero, en la cancha de fútbol, y han regresado victoriosos luego de aprender de esta experiencia…me pregunto como volverás tú…”

Con una respuesta que busque normalizar esta situación no como una crisis o un retroceso, sino como parte misma del proceso vital de cambio, podemos generar reflexiones como esta:

“Gracias, ahora leo mi mail y me doy cuenta de lo errada que estaba y sesgada también, más tarde ese mismo día recapacité y caí en cuenta que fui YO quien creo una situación así, que estoy buscando cualquier excusa para “escapar” de esto. Lo que si fue muy positivo es que a pesar de todo NO me sentí una mierda, looser, horrible, asquerosa….eso me dio la posibilidad de analizar lo que había hecho mal, no cerrarme, no menospreciarme, asumir que puedo arreglar las cosas, ser capaz de aceptar que alguien me quiere y no quiere irse y debería aprender a recibir eso con gracia y no con rencor, y eso hice…de todas maneras no caí en el fondo, solo resbale y me pare, y estoy contenta.”

Con estas y otras formas podemos lograr que las personas dejen de describirse a sí mismas muy pobremente desde algún discurso patologizante o “anormalizador”, reduciendo el peso de la culpa y la recriminación con que llegan a buscar ayuda.

  • Salud Mental y Tratamientos

¿Psicología y música?

  • 13/09/2012
  • Sebastián Miranda Payacán

Una de mis pasiones en la vida es la música, disfrutarla, componerla e interpretarla. La música es una de las formas de arte más fáciles de utilizar, podría decirse que es la expresión artística que más moviliza nuestro ser interior o acaso ¿quién no ha empezado a mover el pie con un ritmo “pegajoso”? ¿Quién no bailó alguna vez en su vida? ¿Quién no recordó momentos o imaginó mundos surreales escuchando una canción? La música suele motivarnos (“Eye Of The Tiger” de Survivor, reconocida por la película Rocky), celebramos con ella (“We Are The Champions” de Queen), acompañarnos en nuestros momentos más importantes (el Vals de los Novios de Strauss) y así podemos seguir con más ejemplos, porque tal es la importancia de la música en nuestras vidas.

Hay estudios que indican la música puede tener profundos efectos físicos y psicológicos no sólo en personas, sino también en animales y en plantas, para Jennifer Copley, las investigaciones de los efectos de la música en el comportamiento, la inteligencia, el aprendizaje, la tolerancia al dolor y la salud han generado varios descubrimientos interesantes, así los describe en su artículo.

MÚSICA, RATONES Y LOCURA

David Merril, un estudiante, diseñó un experimento para descubrir cómo la música afectaba la habilidad de los ratones para aprender nuevas cosas. Merril hizo que un grupo de ratones escucharan música clásica 24 horas al día y otro grupo escucharan heavy metal, entonces cronometró el tiempo que demoraban los ratones en correr a través de laberintos para ver si la música afectaba su velocidad de aprendizaje. Desafortunadamente, tuvo que acortar su primer experimento porque los ratones “metaleros” se mataron todos entre ellos. En un segundo experimento, los ratones que escucharon Mozart 10 horas al día mejoraron dramáticamente sus habilidades para resolver laberintos mientras que los ratones “metaleros” se volvieron peor resolviendo laberintos de lo que habían sido al comienzo del experimento.

MÚSICA, INTELIGENCIA Y APRENDIZAJE

De acuerdo a la Asociación de Ciencias Psicológicas, los resultados de los tests de inteligencia aumentaron en los niños que tomaron lecciones de teclado o canto, en otro estudio, chicos de entre seis y quince años que tomaron lecciones de música obtuvieron valores más altos en tests de memoria verbal que un grupo control de estudiantes sin entrenamiento musical.

MÚSICA Y VIOLENCIA

En un estudio con estudiantes universitarios, los participantes escucharon siete canciones que tenían letras violentas, mientras que un grupo control escuchó siete canciones del mismo artista pero sin letras violentas. Después de eso, cuando se les pidió clasificar palabras como violentas y no violentas, aquellos que habían escuchado letras violentas fueron más propensos a atribuirle significados violentos a palabras como “roca” y “palo”. La Sociedad Psicológica Americana también publicó un reporte estableciendo que las investigaciones han probado definitivamente la relación entre la violencia juvenil y la violencia en los medios, incluida la música.

MÚSICA Y SUICIDIO

En una publicación extranjera, el profesor de sociología James Gundlach descubrió altas tasas de suicidio entre aquellos que escuchaban música country, sin embargo, Gundlach remarca que esta relación con el suicidio ocurría sólo con la música country de antaño, la cual, según él cree, no tiene un ritmo tan rápido como el actual.

MUSICOTERAPIA Y AUTISMO

La musicoterapia es de particular ayuda para estudiantes autistas que tienen dificultades para interactuar con sus compañeros de clase y profesores, volviéndose agitados en ambientes ruidosos y cambiantes. Los estudiantes autistas responden muy bien a la musicoterapia, la que puede utilizarse para ayudarles a mantener la calma bajo estrés y socializar de manera más efectiva, además de esto, muchos niños autistas tienen habilidades musicales espectaculares.

MÚSICA Y REDUCCIÓN DEL DOLOR

Investigadores han descubierto que algunos pacientes que escuchaban arpa, piano, sintetizador, orquesta o jazz lento experimentaron menos dolor post-quirúrgico que aquellos que no.

MÚSICA Y SALUD DE LAS PLANTAS

Una serie de experimentos dirigidos por Dorothy Retallack para aprender sobre los efectos de la música sobre las plantas son descritos en su libro de 1973 “El sonido de la música y las plantas”. Retallack les tocó música rock (Jimi Hendrix, Led Zeppelin y Vanilla Fudge) a un grupo de plantas y jazz a otro grupo, luego de dos semanas, las plantas “jazzeras” estaban saludables y se habían inclinado hacia la radio, por su parte, las plantas “rockeras” habían crecido muy altas y caídas, con flores desvanecidas y la mayoría murió en un lapso de dieciseis días. Retallack trató con otros tipos de música, incluida la música country, pero las plantas no mostraron ninguna reacción y con música clásica moderna (discordante) que causó las plantas se inclinaran lejos de la radio. Las plantas parece gustaban más de Bach, la cítara del norte de India y la música suave.

Otras personas han dirigido experimentos similares y algunos anuncian haber alcanzado resultados similares, no obstante, Retallack ha sido criticada por usar métodos no cientificos en sus experimentos.

La mayoría de los estudios sobre música a la fecha han utilizado muestras pequeñas y algunos no han controlado variables de error y que causan confusión, así que aunque estos descubrimientos son irresistibles, aún se necesita más investigación. Sin embargo, dado que tantos estudios han generado resultados similares para ciertos tipos de música, la psicología de la música ciertamente es digna de mayor exploración.

La investigación sobre música es un área muy poco explorada y estimada, pero sus descubrimientos son sumamente ricos para nuestro quehacer profesional y para la vida humana en general, hablamos de aquello que nos moviliza a todos, esa música que está constantemente sonando en nuestras cabezas con cada ritmo aleatorio que escuchamos en la calle y en nuestros recuerdos de momentos, peliculas, sentimientos, etc. Personalmente gusto mucho de esta área de investigación y espero pronto poder compartir mi trabajo de investigación sobre música y personalidad pero, por lo pronto, esperamos el tema sea de interés y podamos compartir opiniones al respecto.

  • Salud Mental y Tratamientos

La primera entrevista como catalizadora de recursos y resiliencia en las personas

  • 12/09/2012
  • Jorge Ayala Salinas

Tradicionalmente se ha usado la primera –o primeras- entrevistas en función de métodos interpretativos, como los que pusieron de modelos cuestionarios y tests proyectivos, cada uno trabajando en función del diagnóstico, explorando “objetivamente” la “personalidad”. De esta forma, la entrevista se convirtió en un interrogatorio cuyo fin era definir la experiencia de la persona en un diagnóstico preciso que pudiera categorizarla y etiquetarla, intentando dar con la causa del problema, ya que sin esto el terapeuta no podía comenzar el“tratamiento”. Sin una “verdad objetiva”, sin una patología, era imposible. Incluso, comúnmente, la primera entrevista se convertía en una mera práctica confesional, en la línea caracterizada por David Epston como las terapias “misioneras” o de “degradación” (en una ocasión, una joven me dijo, sobre su anterior experiencia con el psicólogo: “fue como sostener una conversación con mi abuela, llena de consejos y recriminaciones, sólo que esta vez yo pagaba por eso”), con una sola voz: la del problema y el terapeuta experto.

Las 12 ideas que compartiremos a continuación, podrán permitir centrar nuestro enfoque en la búsqueda de recursos y concentrarnos en la resiliencia, en todo aquello que se relaciona con lo que la persona “ha-hecho-hasta-el-momento-para-seguir-adelante-y-sobrevivir”, y lo bien que lo ha desarrollado. Con esta convicción -la convicción de que la persona ha hecho cosas extraordinarias hasta hoy para mantenerse “en pie de lucha”-, podemos encontrar brillantes excepciones que nos proporcionen más luz en nuestro camino. Algunas de estas ideas son ordinarias, es cierto, talvez no contengan ninguna novedad: el caso es que aun muchos terapeutas que desean enfocarse en los recursos y hablan de resiliencia, ¡actúan como si no lo supieran!

Puedes descargar el completo: 12 principios de la primera entrevista como catalizadora

Esperamos tus comentarios, criticas o dudas.

  • Salud Mental y Tratamientos

El manifiesto del terapeuta estupido

  • 11/09/2012
  • Jorge Ayala Salinas

“Ahora preferimos pensar en terapeutas estúpidos cuya misión es generar conversaciones que faciliten la renegociación de los significados que paralizan a las personas… preferimos un terapeuta más estúpido, que va por detrás de los clientes, adaptándose a su ritmo; un terapeuta centrado en las soluciones que trata de facilitar que se amplíen las cosas que ya funcionan.”
Alberto Rodriguez Morejón
Marc Beyebach

Este manifiesto está dedicado a los inconformistas, a los bichos raros de la clase, a los estudiantes e internos de psicología que lo cuestionan todo y no saben qué hacer y qué seguir. A los que la economía los anima a abandonar la Psicoterapia. Que ven cómo fallece el sueño de trabajar en un estudio propio y dedicarse a la clínica (aunque clínica es un término inexacto. Preferiero usar el término “dedicarse a la terapia”). A terapeutas y consultores que buscan obtener su propia voz o hacer de otras voces la suya en el camino de su formación como terapeutas. A todos aquellos que están haciéndose preguntas
constantemente. A los que se ven tentados a traicionar su sueño y eligen la comodidad de un trabajo de cuello blanco y corbata como asistentes o trabajadores de Recursos Humanos. A los talentosos, a los estudiosos, a los estratégicos, a los ideadores, a los que tienen iniciativa y a los que buscan la excelencia. A los que observan su estilo y se exigen con los ojos de un artista. A los que quieren vivir su propia vida ayudando a los demás.

Descarga: MANIFIESTO-EL-TERAPEUTA-ESTÚPIDO

  • Salud Mental y Tratamientos

¿Por qué los niños autistas son blancos fáciles de bullying?

  • 09/09/2012
  • Maria Fernanda Alonso

Un estudio reciente halla que los niños con trastornos del espectro autista son víctimas de bullying (o acoso escolar) con mucha más frecuencia que sus compañeros de desarrollo típico – casi cinco veces más a menudo – pero los padres de niños autistas piensan que la tasa es aún mayor.

(Artículo relacionado: Bullying y el derecho de no tener miedo.)

En el estudio, cerca del 46% de los niños autistas en las escuelas intermedia y secundaria dijeron a sus padres que fueron víctimas de acoso escolar durante el año anterior, en comparación con poco más del 10% de los niños de la población general. Llamando a esta situación “grave problema de salud pública», el autor principal del estudio, Paul Sterzing de la Universidad de Washington en St. Louis, dijo al New York Times que la «tasa de bullying y victimización entre estos adolescentes es alarmantemente alta.»

Cerca del 46% de los niños autistas en las escuelas intermedia y secundaria dijeron a sus padres que fueron víctimas de acoso escolar

El Dr Paul A. Law, director de la Red Interactiva de Autismo del Instituto Kennedy Krieger en Baltimore, dijo que la escuela intermedia puede ser particularmente peligrosa para los niños de alto funcionamiento con autismo que carecen de habilidades sociales, ya que representa un momento en el que los compañeros pueden ser especialmente intolerantes a los errores sociales.

(Artículo relacionado: Buscar lo imposible. Hablemos de autismo.)

Muchas personas con autismo tienen problemas para reconocer las señales sociales, lo que les hace sentir incómodos alrededor de otros. Asimismo, a menudo se involucran en conductas repetitivas y tienden a ser hipersensibles a los estímulos ambientales, todo lo cual hace que los niños con este trastorno sean objetivos perfectos para los agresores que detectan sus diferencias y disfrutan molestando a sus víctimas. Alrededor de un tercio de los casos de autismo son gravemente discapacitantes (los afectados pueden sufrir de bajo coeficiente intelectual y pueden ser incapaces de hablar) pero la mayoría de las personas autistas tienen una inteligencia promedio o alta y muchos pueden funcionar bien, si sus problemas sociales y sensoriales se abordan debidamente.

Artículo relacionado: Indicadores y modelos de intervención en niños con autismo.)

Eso puede ayudar a explicar por qué los niños de más alto funcionamiento en el presente estudio se encontraban en mayor riesgo de ser blancos de bullying, mientras que su incomodidad social fue más evidente porque en realidad interactuaban más con sus pares autistas, esto hizo que su discapacidad real fuera menos visible, probablemente haciendo que su trastorno sea aún más difícil de entender para sus compañeros.

(Artículo relacionado: Una intervención temprana podría ayudar a los niños autistas con las habilidades del habla.)

Los niños con autismo que podían hablar bien, por ejemplo, eran tres veces más propensos a ser intimidados que aquellos cuya capacidad de conversación era limitada o inexistente. Además, los que fueron educados principalmente en clases regulares eran casi tres veces más propensos a ser blanco de bullying que los que pasaron la mayor parte de su tiempo con educación especial.

Los padres de niños autistas piensan que las verdaderas tasas de victimización son mucho mayores

(Artículo relacionado: Temple Grandin.)

La investigación, publicada en los Archivos de Medicina Pediátrica y Adolescente (Archives of Pediatric and Adolescent Medicine), comprende datos de las encuestas de los 920 padres de niños autistas, a quienes se les preguntó acerca de la experiencia de sus hijos con relación al bullying.

Se informó que alrededor del 15% de los niños autistas también eran agresores (más o menos la misma proporción que en la población adolescente general), y el 9% eran agresores y víctimas. El bullying, que puede tomar la forma de burlas, exclusión, humillación o agresión física, puede llevar a la depresión y otros problemas de salud mental, junto con bajas calificaciones e incluso enfermedades físicas en las víctimas debido al estrés grave que causa.

(Artículo relacionado: Mascotas, habilidades sociales y autismo.)

Los padres de niños autistas piensan que las verdaderas tasas de victimización son mucho mayores que las encontradas por el estudio, y que las tasas de cometer bullying son más bajas, precisamente porque los trastornos del autismo se caracterizan por una incapacidad para leer las señales sociales sutiles y por la dificultad en la comunicación. Con el fin de informar el hecho de haber sido víctima de bullying, uno necesita entender, por ejemplo, cuándo se está en la mira; por el contrario, en orden de informar que se es un matón (o bully), también hay que entender y desplegar de manera efectiva acoso social. Cosas que los niños autistas generalmente no pueden hacer.

«Lo único que puedo entender es que tal vez los padres están interpretando mal los torpes intentos de sus hijos «, dice Eileen Riley-Hall, una profesora de secundaria con una hija autista y autora de “Parenting Girls on the Autism Spectrum: Overcoming the Challenges and Celebrating the Gifts” (Padres de niñas con Trastorno del Espectro Autista: Superando los desafíos y Celebrando los dones), con respecto a la tasa de agresores entre los niños autistas en el nuevo estudio. «Pienso en el bullying como manipulación sistemática. Pero son tan sinceros, no son típicamente capaces de ese tipo de premeditación y malicia».

(Artículo relacionado: Bullying: 5 Factores predisponentes.)

Las dificultades en las habilidades del lenguaje y la incapacidad para leer las señales sociales también significan que muchos niños autistas son víctimas de bullying sin darse cuenta o sin ser capaces de denunciarlo. Riley-Hall recordó un incidente que involucró a su hija en la escuela primaria. «Niños pequeños le hacían decir malas palabras y se reían de ella. Ella pensó que esto era una cosa buena y que estaban siendo amigables, pero en realidad se estaban burlando de ella», dice, describiendo cómo otra niña, sabiendo que eso estaba mal, le dijo al maestro. Pero hasta que la compañera de clase lo informó, Riley-Hall no tenía idea de que su hija estaba siendo víctima de bullying.

«Los niños con trastornos del espectro autista no son muy buenos para entender cosas como el sarcasmo y el humor», dijo la Dra Catherine Bradshaw, directora adjunta del Centro para la Prevención de la Violencia Juvenil y experta en bullying en la Universidad Johns Hopkins. «Ellos pueden ser provocados y ser víctimas de burlas frente a grupos, sin entenderlo». “Muchas de las características que definen al autismo son las que ponen a estos niños en gran riesgo de ser víctimas de bullying”, agregó.

“Siempre me sorprende cuando escucho que culpan a la víctima»

Las investigaciones han encontrado que los mejores programas anti-bullying son los integrales, con la participación de toda la escuela y no sólo de los estudiantes individualmente. Los programas que funcionan bien tienden a fomentar un ambiente escolar cálido en el que se celebra la diversidad; también depende de los adultos en la escuela, desde el director a los porteros, para establecer un tono que indique claramente que el bullying no es aceptable. Esto último es de gran importancia, puesto que a menudo se tiende a culpar a las víctimas de bullying por aquello que les sucede.

(Artículo relacionado: Análisis del Bullying sufrido por Karen Klein, la monitora escolar de 68 años.)

El 18 de julio pasado Elizabeth J. Meyer, doctora en materia de género y escolaridad, publicó en Psychology Today: “La semana pasada estaba dando un taller sobre prevención del bullying con un grupo de profesores de educación física de todo California. Empecé a hablar sobre el caso de Seth Walsh, el muchacho de 13 años que murió por suicidio después de años de ser víctima de bullying en sus escuelas en la zona rural de Tehachapi, California. Un maestro que trabajó en esa región dijo, ‘sí, pero él era realmente diferente y extravagante. Realmente buscó que le sucediera eso’».

La Dra. Meyer continúa diciendo “siempre me sorprende cuando escucho que culpan a la víctima. Hay tantos casos de directores o maestros o padres diciendo a los niños que no se vistan de tal manera, o que no hablen de tal forma, o que hagan alguna cosa que a los otros niños les guste, ya que de esa forma no los molestaran tanto. El mensaje es este: ‘no tendrías tantos problemas si fueras menos…TU’. Los niños aprenden que hay algo mal con ellos cuando sucede esto. En lugar de culpar a la víctima, tenemos que mirar el entorno, y no al niño, como el problema”.

(Artículo relacionado: El éxito empresarial de los inadaptados.)

Los estudios muestran que los estudiantes de las escuelas que crean un ambiente acogedor, no sólo se desempeñan mejor académicamente, sino que también tienen menores tasas de problemas de comportamiento, como el alcohol y el consumo de drogas.

Pero a pesar de los esfuerzos para fomentar la inclusión, la aceptación de los estudiantes con discapacidades sigue siendo baja en general. «Todavía hay una sensación de que no son plenamente humanos como los demás», dice Riley-Hall.

(Artículo relacionado: Autismo: complejidad genética y riesgos para los padres de edad avanzada.)

Otro factor que a menudo conduce a la exclusión y la burla es el miedo. «Tenemos muchas generaciones que no han tenido experiencias personales con personas con necesidades especiales, y les temen», nota Riley-Hall. «Ellos pasan esa ignorancia a sus hijos.»

Los autores del estudio concluyen: «Las aulas inclusivas necesitan aumentar la integración social de los adolescentes en grupos protectores de compañeros, al tiempo que aumenta la empatía y las habilidades sociales de parte de los estudiantes (que se han desarrollado normalmente) hacia sus compañeros con y otras discapacidades del desarrollo».

(Artículo relacionado: Los niños con asma son más propensos a sufrir de bullying)

En efecto, aunque a menudo se afirma que las personas autistas carecen de empatía, sus problemas por lo general se refieren a la incapacidad de comprender la mente de otros – no a una falta real de interés cuando saben que alguien está sufriendo. Mientras tanto, no se supone que las personas sin autismo tengamos impedimentos para comprender el dolor de otros, entonces ¿cuál es la excusa?

Fuentes: Why Autistic Kids Make Easy Targets for School Bullies.
School Bullies Prey on Children With Autism.
Bullying Involvement and Autism Spectrum Disorders Prevalence and Correlates of Bullying Involvement Among Adolescents With an Autism Spectrum Disorder.
Stop Blaming the Victim: Changing Gender Paradigms for Safer Schools.

Imagen: Rollout

 

  • Salud Mental y Tratamientos

11 Estrategias para superar la depresión en adultos mayores

  • 07/09/2012
  • David Aparicio

Según los estudios, una cuarta parte de las personas de 65 años o mayores sufren de depresión. Más de la mitad de las visitas al médico involucran quejas por la tensión emocional. 20% de los suicidios en los países desarrollados son cometidos por adultos mayores.

En el último reporte del Journal of the American Geriatrics Society (Revista americana de sociedad geriátrica) se expone que la depresión es una de las principales causas de la disminución de la calidad de la salud en los adultos mayores.

¿Por qué los adultos mayores son más propensos a sufrir de depresión?
El médico Rafi Kevorkian, utiliza las 5 D para explicar esta propensión: discapacidad, descenso, disminución de la calidad de vida, demanda de cuidadores y demencia.

Esta propensión motivó a elaborar las 11 estrategias que pueden ayudar a romper la prisión de la depresión y ansiedad:

1.Separa la enfermedad de la depresión

Es más complicado identificar y tratar la depresión en los adultos mayores que en los sujetos más jóvenes, debido a las otras enfermedades que están involucradas. Por ejemplo, el mal de parkinson directamente afecta la química del cerebro y puede exacerbar los síntomas depresivos. Se estima que el 25% de los pacientes con cáncer sufren de depresión  y 50% de los pacientes con accidentes cerebrovasculares son afectados también con la depresión.

Según Karen Swartz, directora del programa clínico  en el reconocido centro medico John Hopkins: Los pacientes con depresión y con enfermedades crónicas tienden a centrarse más en las dolencias físicas y por lo tanto retrasan o impiden la plena recuperación del trastorno del estado de ánimo. Ella aconseja que se trate la depresión y la enfermedad crónica al mismo tiempo, así como establecer metas de tratamiento y que no se conforme con los resultados de un tratamiento de calidad inferior (si no encuentra resultado, cambiar de enfoque). Es importante también que haya una completa cooperación y comunicación entre el médico y el psicólogo.

2.Controla las bebidas

¿Crees que los adolescentes se encuentran en mayor riesgo de abusar de las sustancias? En realidad el abuso de alcohol y drogas es muy frecuente entre las personas mayores de 60 años y afecta al 17 % de los adultos mayores. Es algo común para los adultos mayores recurrir a la automedicación con alcohol y drogas como una forma de hacerle frente a la soledad o para tratar con el dolor crónico. Como sabemos, el alcohol es un depresor y deprime aún más en estas situaciones. Los sedantes  pueden ser mortales, especialmente cuando se combinan con el alcohol. El alcohol y las drogas pueden interferir con los efectos de los medicamentos que se toman para la diabetes, enfermedades del corazón y otras enfermedades comunes entre los adultos mayores. Por último y no menos importante, el abuso de sustancias aumenta el riesgo de suicidio, sobre todo en los hombres mayores.

3.Trata el insomnio

El médico David N Neubauer, autor del libro  “Understanding Sleeplessness: Perspectives on Insomnia” (Comprendiendo La falta de sueño: Perspectivas del Insomnio): nos ofrece un interesante dato:

“A medida que envejecemos, por lo general pasamos menos tiempo en los niveles más profundos del sueño REM (estadios 3 y 4) y pasamos más tiempo en los niveles más ligeros. Consecuentemente, las personas mayores sufren de un sueño fragmentado, se despiertan más seguido durante la noche y cerca del amanecer. Como respuesta a estos patrones de sueño, muchos adultos mayores han desarrollado pobres hábitos del sueño que agravan el problema”

Según las estadísticas el 80 % de las personas que están deprimidas experimentan problemas de sueño, y cuando más depresiva este la persona, más probable es que tenga problemas de sueño y viceversa. Por lo tanto es absolutamente esencial para el tratamiento de la depresión, ocuparse de tratar los problemas del sueño y practicar buenos hábitos de sueño: ir a la cama a la misma hora cada noche, despertarse a la misma hora en la mañana, reducir o eliminar la cafeína, etc.

4.Distinguir el dolor de la depresión

Las estadísticas dicen que para la edad de 65 años, las mitad de las mujeres serán viudas. Entre el 10 y 15 % de las esposas que experimentaron la pérdida, sufriran de  depresión crónica. Lo que nos lleva a una pregunta fundamental: ¿Qué es el dolor normal y qué es la depresión? Kay Redfield Jamison, Doctora en Psicología y profesora de psiquiatría en la Universidad Johns Hopkins los distingue de la siguiente manera:

“La tristeza por el dolor o pérdida, por lo general, se presenta en oleadas, con mayor o menor intensidad y con periodos de llanto y sentimientos de tristeza, culpa, ira, irritabilidad o soledad. Sin embargo, una persona que experimenta dolor, puede disfrutar de algunas actividades. El dolor generalmente se presenta por un tiempo limitado y se resuelve por sí solo. En cambio la depresión es una tristeza más persistente y constante”

En otras palabras, una persona deprimida es incapaz de disfrutar de las actividades de la vida, También es posible que empiece a abusar del alcohol o de las drogas, experimentando dificultad para comer, y puede sufrir de problemas del sueño.

5.Conserva algunas fotos

Una forma fácil que sirve para protegerse de la depresión es llevar fotos de sus seres queridos y amigos en su billetera. Un estudio realizado por psicólogos de la Universidad de California encontró que con solo mirar una fotografía de sus seres queridos un grupo de mujeres reportaron menos dolor a los estímulos en sus antebrazos que cuando miraban imágenes de un objeto o de un extraño. Según la autora de la investigación, Naomi Eisenberger: “el mero recordatorio de la pareja a través de una simple fotografía fue capaz de reducir el dolor. Este estudio concuerda con otros trabajos que enfatizan la importancia del apoyo social para la salud física y mental”

6.Haz nuevos amigos

Innumerables estudios han demostrado que las personas con fuertes redes sociales son más resistentes a la depresión y la ansiedad, especialmente en sus últimos años, desde que perdieron a sus amigos y familiares. Es especialmente importante para las personas mayores hacer un esfuerzo para conocer gente nueva. Algunas sugerencias que pueden facilitar esto son: probar el voluntariado, tomar una clase de noche, mantener conexión con compañeros y amigos antiguos, involucrándose en la iglesia o buscar un restaurante o cafetería para pasar el rato y salir un poco de la casa.

7.Usa el Internet

Según un nuevo reporte publicado en EE.UU, pasar tiempo online puede reducir la depresión en casi un 20% en los sujetos de la tercera edad. La coautora del estudio, Sherry G. Ford,  nos dice: “Mantener relaciones con amigos y familiares en un momento de la vida, cuando la movilidad es cada vez más limitada, es todo un reto para las personas mayores. El aumento del acceso a Internet permite conectarse con fuentes de apoyo social, cuando la interacción cara a cara se vuelve más difícil”.

8.Ejercitate

Los estudios publicados en Archives of Internal Medicine,  (Archivos de Medicina Interna) demostraron que los adultos mayores que se ejercitan, incluso si lo hacen hasta los 85 años, viven vidas más largas y saludables. Experimentan menos descensos en su calidad de vida, están menos solos y son más propensos a seguir siendo independientes.

9.Revisa tus opciones

Es comprensible que los adultos mayores se sientan deprimidos, cuando pierden su independencia y su movilidad. Un estudio publicado en Journal of Leisure Research (Revista de Investigación de la Libertad) confirmó una teoría muy básica: Los seres humanos prosperan cuando tienen opciones y se sienten en control. Cuando no lo hacen se vuelven impotentes y pierden voluntad para vivir. Por lo tanto un buen ejercicio es hacer un inventario de nuestras opciones: la marca de dentífrico que desean, las novelas que leen, los programas de tv que prefieren, los cereales que les guste, la marca de café favoritos, los crucigramas, etc., incluso en medio de opciones limitadas siempre tenemos algo de control y una gran cantidad de posibilidades y basta con tomar notas de ellas.

10. Obtén un propósito

Una compañía de seguros, se preguntó qué era lo verdaderamente importante para los adultos mayores y le preguntó a 1000 personas entre 45 y 74 años ¿por qué te levantas por la mañana? ¿qué es lo que realmente importa al final? Contrariamente a lo que se piensa, los sujetos informaron que lo que era verdaderamente importante, incluso más que el dinero o la salud y a medida que la gente envejece, es el sentido de propósito.

Así que es importante que busquen un propósito, no importa cuán grande o pequeño: reciclar, cuidar a los nietos o a los niños de los vecinos, visitar al vecino, etc. No es necesario que se emplee una gran cantidad de tiempo, energía, dinero o poder.

11.Ve con el dolor

Parece que no hay escapatoria del dolor cuando envejecemos. Es totalmente comprensible que los adultos se sientan deprimidos y ansiosos, cuando se considera todos los sufrimientos físicos y las enfermedades crónicas que experimentan los adultos mayores. Por no mencionar el agonizante proceso de perder a sus seres queridos y experimentar la soledad aguda. El autor espiritual Henri Nouwen dijo que el dolor que sufrimos ahora tiene la intención de ponernos en contacto con la sanación de nuestro corazón. A veces lo mejor que se puede hacer con el dolor es simplemente entregarse a él e ir con el. Mi abuela muy sabia me dice “el dolor es lo que me recuerda que estoy viva, si algo no me duele entonces debo de estar preocupada. Agradezco cada día que tengo para disfrutarlo con mi familia”.

Como psicólogos podemos implementar algunas de estas estrategias. Todo lo que se necesita es un poco de motivación y un toque de amabilidad.

Fuente: 12 Depression Busters for Seniors

Imagen: Anael Granoux

  • Salud Mental y Tratamientos

Trastorno Dismórfico Corporal: Obsesión por la belleza fisica

  • 07/09/2012
  • En Buena Salud

 

Se refiere a la imagen distorsionada de sí mismo o la preocupación exagerada por un defecto físico real o imaginario

Ha recibido múltiples nombres a través de los tiempos, entre ellos “Cultura Light”, “Síndrome de la mujer Fashion” y “Síndrome Post Estético”. Me refiero a una patología de connotaciones psicológicas como lo es el Trastorno Dismórfico Corporal (TDC), el cual fue descrito en un principio como Dismorfofobia por el Dr. Enrico Morselli en el año 1886 y se refiere a la imagen distorsionada de sí mismo o la preocupación exagerada por un defecto físico real o imaginario que causa un malestar significativo que puede deteriorar las áreas laboral, académica, social y de pareja del individuo.

El trastorno suele manifestarse desde la adolescencia y, según las acciones tomadas por los padres en cuanto a la enseñanza de límites y valores, puede desarrollarse como una verdadera enfermedad, o no. De igual manera es posible verlo en personas adultas con personalidad frágil y ampliamente manipulable. Afecta por igual a hombres y mujeres y pareciera encontrarse predominantemente en personas de clase social alta.

El TDC suele estar acompañado por el trastorno obsesivo-compulsivo. Se describe también la predisposición genética, los abusos extremos en la infancia y juventud, tortura psicológica o bullying, así como el abandono físico o emocional y los estigmas físicos o dermatológicos; pero en la actualidad nos encontramos con dos grandes detonantes que han influenciado el incremento en las conductas exageradas en cuanto a la imagen se refiere, éstos son:

Sigue leyendo  en la web de nuestros socios En Buena Salud

  • Salud Mental y Tratamientos

Una intervención temprana podría ayudar a los niños con autismo con las habilidades del habla

  • 06/09/2012
  • Maria Fernanda Alonso

Estudio de seguimiento muestra mejoría a largo plazo en el lenguaje en niños con autismo después de un programa intensivo y específico de terapia conductual.

(Artículo relacionado: Indicadores y modelos de intervención en niños con autismo.)

Los niños autistas luchan con muchos obstáculos, entre ellos aprender a hablar. Los expertos han señalado, que si estos niños aprenden habilidades verbales a los cinco años de edad, tienden a ser más felices y adultos más funcionales que sus compañeros no verbales. Hace treinta años, los psiquiatras sólo esperaban que la mitad de todos los niños autistas adquieran habilidades del habla. Estudios recientes, sin embargo, indican que hasta un 80 por ciento de los niños con autismo pueden aprender a hablar. Uno de estos estudios en 2006 mostró que los niños que recibieron tratamiento intensivo dirigido a desarrollar las habilidades fundamentales del lenguaje oral lograron avances significativos en su capacidad de comunicarse verbalmente. Los investigadores han seguido a varios de esos niños y encontraron que la mayoría de ellos continuaron cosechando los beneficios de aquella terapia años después de su finalización.

(Artículo relacionado: Buscar lo impensable. Hablemos de autismo.)

Varios comportamientos tempranos construyen la base del lenguaje. Estas habilidades también han sido vinculadas a si un niño puede o no anticipar el estado mental de otra persona y usar ese conocimiento para explicar y predecir el comportamiento. Desarrollar esta «teoría de la mente» puede ser una dificultad central para los niños con autismo. El equipo de Kasari dirigió dos de los comportamientos tempranos en su trabajo: El primero es la habilidad de participar en un juego simbólico, en el que un objeto representa otro (un niño fingiendo que un muñeco es su padre, por ejemplo). El segundo es la atención conjunta, en el que un niño se divide su atención entre un objeto y otra persona. Este comportamiento se puede considerar como «miradas compartidas». Por ejemplo, cuando un niño señala un tren de juguete para mostrarselo a un compañero, mira el tren en marcha y a su vez comprueba que su compañero participe.

(Artículo relacionado: Mascotas, habilidades sociales y autismo.)

En el estudio inicial, Connie Kasari de la Universidad de California, Los Angeles, y sus colegas evaluaron a 58 niños de entre tres y cuatro años de edad en un estudio aleatorio controlado. Los niños jugaban con los estudiantes graduados capacitados durante 30 minutos cada día durante un período de cinco a seis semanas. Las intervenciones intensivas en tiempo estaban enfocadas al juego simbólico o a la atención conjunta. Un tercer grupo, que sirviendo como control, participó en el tiempo de juego, pero no fue dirigido a completar tareas y objetivos.

Probadores clínicos independientes evaluaron a los niños antes y después de la intervención. Midieron el lenguaje y las habilidades cognitivas con pruebas estándar, evaluaron el nivel de juego y la diversidad, y la interacción con un cuidador. El primer estudio, publicado en 2006, mostró que el grupo de atención conjunta fue mejor para mostrar y señalar el comportamiento, mientras que el grupo de juego simbólico mostró un comportamiento más simbólico, tanto en términos de nivel de juego como en diversidad.

Doce meses después del período de tratamiento, el equipo de Kasari evaluó las habilidades lingüísticas de los niños. En un examen lingüístico estándar, los dos grupos de intervención mostraron una mejoría en el lenguaje hablado que correspondió a 15 y 17 meses de desarrollo, el grupo de control sólo había hecho un avance de nueve meses durante el mismo período. Los niños más pequeños y los niños con los niveles más bajos de habla antes de la intervención realizaron las mayores mejoras. Kasari se sorprendió inicialmente de que los grupos mostraran tal progreso. El aspecto más importante de ambas intervenciones, dice, fue «la participación del niño por períodos de tiempo con un interlocutor social».

(Artículo relacionado: Autismo: complejidad genética y riesgo para los para los padres de edad avanzada.)

En el nuevo estudio, el equipo de Kasari volvió a visitar a 40 de los niños, cinco años más tarde. Los investigadores encontraron que el 80 % de ellos, que ahora eran niños de ocho o nueve años de edad, todavía tenían «lenguaje hablado útil y funcional». Un pequeño número de niños permanecieron no verbales, lo que es típico en los estudios de niños con autismo, dice Kasari. Algunos niños no parecen ser capaces de aprender lenguaje útil a la edad de cinco años, pero los estudios sugieren que es posible adquirir el lenguaje más tarde. Los nuevos estudios muestran un método para enseñar a niños en edad preescolar, habilidades básicas que les ayudarán a desarrollar el lenguaje a los cinco años y continuar haciendo mejoras años más tarde. Los investigadores detallan sus hallazgos en la edición de mayo de 2012, de la Revista de la Academia Americana de Psiquiatría Infantil y del Adolescente (Journal of the American Academy of Child and Adolescent Psychiatry).

(Artículos relacionados: Temple Grandin y El éxito empresarial de los inadaptados.)

Objetivo

Este estudio examina los resultados cognitivos y del lenguaje de niños con un trastorno del espectro autista (TEA) después de un período de 5 años desde que recibieron intervenciones tempranas enfocadas en la atención conjunta y habilidades de juego.

Método

Cuarenta niños del estudio original (n = 58) tenían datos completos en el seguimiento, a la edad de 5 años.

Resultados

En total, el 80% de los niños había alcanzado un uso funcional de la lengua oral con el nivel basal de juego prediciendo el lenguaje hablado a los 5 años del seguimiento. De los niños que utilizaban el lenguaje hablado a la edad de 8 años, varios comportamientos básicos predijeron su posterior habilidad, incluyendo participar en el estudio a una edad más temprana, iniciando habilidades de atención conjunta, el nivel de juego, y la asignación al grupo de intervención de atención conjunta o de juego simbólico. Solo la línea basal de diversidad de juego predijo las puntuaciones cognitivas a la edad de 8 años.

Conclusiones

Este estudio es una de las únicas investigaciones de seguimiento a largo plazo de niños en edad preescolar que participaron en las intervenciones tempranas destinadas a responder dificultades básicas del desarrollo. Los hallazgos del estudio sugieren que centrarse en la atención conjunta y en las habilidades de juego en los modelos de tratamiento integral, es importante para obtener resultados a largo plazo en el lenguaje hablado.

Fuentes: Early Intervention Could Help Autistic Children Learn to Speak
Longitudinal Follow-Up of Children With Autism Receiving Targeted Interventions on Joint Attention and Play

Paginación de entradas

Anterior1…110111112113114…117Próximo
Regístrate al boletín semanal 💌
PSYCIENCIA PRO
  • Inicia sesión
  • Cuenta
  • Cierra sesión
  • Artículos
  • Recursos
  • Webinars
Recomendados
  • El estatus científico de las técnicas proyectivas
  • El diagnóstico del TDAH en adultos: características clínicas y evaluación
  • Cómo actuar cuando alguien expresa directa o indirectamente pensamientos de suicidio
Tips para terapeutas
  • 3 preguntas para realizar cuando tienes la sospecha de que tu paciente está ocultando sus pensamientos suicidas
  • Cómo podemos motivar a un adolescente a realizar terapia de exposición
  • Seis maneras en que los pacientes pueden ayudar a que la psicoterapia sea más efectiva
Recursos
  • Preparándome para teleterapia: Checklist para consultantes
  • (PDF) Diagnóstico del TDAH en adultos: características clínicas y evaluación
  • Entender el trastorno dismórfico corporal (guía)
Podcast
  • «No le tengo miedo al exilio» con Pablo Gagliesi – Watson, episodio 16
  • «Curiosidad, terapia y vida”, con José Dahab – Watson, episodio 11
  • «El camino del psicólogo», con Karemi Rodríguez Batista – Watson episodio 4
Webinars
  • Fortaleciendo la conexión: Método Gottman para terapia de parejas
  • Optimiza tu trabajo clínico con la Terapia Basada en Procesos
  • Domina tu productividad con Todoist (Webinar)
Psyciencia
  • Contáctanos
  • Publicidad
  • Nosotros
  • Publica
Psicologia y neurociencias en español todos los días

Ingresa las palabras de la búsqueda y presiona Enter.