Psyciencia
  • SECCIONES
  • PSYCIENCIA PRO
    • ÚNETE A LA MEMBRESÍA
    • INICIA SESIÓN
    • CONTENIDO PARA MIEMBROS
    • RECURSOS PARA MIEMBROS
    • TIPS PARA TERAPEUTAS
    • PODCAST
    • WEBINARS
  • NORMAS APA
  • SPONSORS
  • NOSOTROS
Psyciencia
  • Inicia sesión
  • Membresía
  • Secciones
    • Psicología clínica
    • Psicología aplicada
    • Neurociencias
    • Biografías
    • Definiciones
    • Entrevistas
  • Guías y recursos
    • Videos, Recursos
    • Guías y manuales
    • Prevención de suicidio
    • Normas APA
    • Apps para psicólogos
  • Recomendados
  • Nosotros
  • Psicología clínica

Lo que necesitas saber para entender la terapia narrativa

  • Carlos Chimpén
  • 21/09/2012

Las entrevistas terminan y el terapeuta le otorga un certificado al consultante donde dice:

Esto es para certificar que Raquel ha dominado la mentira que en tantos problemas la metía. Las siguientes personas han notado el cambio: Carlos, José, Manuel, Laura y Soledad. En Cáceres a 20 de Abril.

La terapia narrativa fue reconocida fuera de Australia, lugar donde fue creada, por el archiconocido libro de White y Epston (1993) Medios Narrativos para fines terapéuticos. Estos autores usaban certificados, cartas y todo tipo de documentos para lograr externalizar el problema y que la persona tuviera más espacio para crear una identidad distinta a la que el problema proponía.

Desde entonces, la terapia narrativa ha pasado por un periodo de crecimiento de contextos de aplicación, así como de riqueza conceptual que la han hecho muy atractiva para los profesionales de la psicoterapia.

En el presente artículo vamos a ver algunas nociones básicas para comprender la práctica narrativa.

Comprendiendo la terapia narrativa

En muchos lugares aparece la definición de terapia narrativa como un enfoque respetuoso y no culpabilizador que sitúa a las personas como expertas de sus propias vidas (Morgan, 2004). Esto conlleva un cambio de conceptualización con respecto a quién busca ayuda. No se le llama paciente, ni se le llama cliente sino que se le denomina “coautor” del proceso de terapia (White, 2004).

El problema es el problema y la persona es la persona.

Con este término Michael White quiere cuestionar la posición del terapeuta como experto y, por tanto, cuestiona su superioridad explícita e implícita sobre la persona que busca su ayuda. Coautor es quien ayuda al terapeuta a comprender la situación desmontando los prejuicios inherentes a la profesión, a la raza, a la clase social, al género, etc., facilitando la auto descripción del problema.

De este modo, el discurso de la persona, su historia, se convierte en fundamental para el terapeuta narrativo, acompañado de un análisis reflexivo de la posición que ocupa y de la necesidad de no imponer sus criterios a la vida de los consultantes (otro término que se utiliza para referirse a las personas que solicitan nuestra ayuda). Gergen (1996) lo llama auto narración y con ello “se refiere a la explicación que presenta un individuo de la relación entre acontecimientos auto relevantes a través del tiempo” (p. 233).

Con el concepto de coautor y con el cuestionamiento del papel de terapeuta como experto, Michel White da paso a otro fundamento teórico de las prácticas narrativas: la valoración de los saberes locales o populares. Basándose en trabajos antropológicos de Gregory Bateson, Cliford Geertz y Bárbara Myerhoff, por citar algunos de los más relevantes, y en reflexiones filosóficas de Michel Foucault y Jacques Derrida, White (2002) destaca que en la enseñanza de las disciplinas profesionales no sólo se marginan los saberes locales o populares, sino que también se los descalifica, olvidándose de la propia historia de las personas y las comunidades y desechando la sabiduría, los recursos, valores, actitudes, etc., que cada persona y cada comunidad puso en juego para enfrentar las situaciones conflictivas. De la valoración de la sabiduría popular surge la práctica colectiva narrativa que trabaja con comunidades.

(Artículo relacionado: Chimamanda Adichie: El peligro de una sola historia)

Por poner un ejemplo de lo anterior, podemos citar la prevalencia del modelo de tratamiento del duelo según las escuelas occidentales de psicología y psiquiatría por encima de los saberes locales de los aborígenes australianos o los Zíngaros, impone la producción de una catarsis para liberarse del sufrimiento por la pérdida o un desprendimiento de los objetos personales de la persona fallecida para “despedirse correctamente”, sin respetar las costumbres y formas de resolver los duelos de las diferentes culturas. Lo anterior llevaría a descripciones pobres (magras en algunas traducciones) refiriéndose a una interpretación de la realidad con limitaciones, frente a descripciones ricas (densas en algunas traducciones) refiriéndose a interpretaciones más completas de la realidad de la persona.

“las acciones de una persona son descripciones que excluyen las interpretaciones de quienes están participando en sus acciones… las descripciones magras son típicamente aquellas a las que se arriba por medio de las “observaciones” de personas consideradas forasteras, quienes están estudiando las vidas de otras personas y las comunidades en las que esta vive… a la inversa, descripciones densas de las acciones de las personas son descripciones informadas por las interpretaciones de aquellos que están participando en esas acciones…” (M. White, 2002: 32; citado en Montes, 2011) 

El binomio pobre/rico (magro/denso, en inglés thin/rich) es fundamental en la práctica narrativa. La persona sumida en el problema cuenta un relato pobre de su experiencia, el cual constituye la historia del problema. La identidad de la persona se ve saturada por la descripción que hace el problema de ella ante sí misma y ante los demás. La terapia narrativa tiene como objetivo enriquecer la historia mediante la introducción de aquellos detalles que han quedado fuera por el predominio del problema, es decir, la co-creación junto al paciente de una historia alternativa.

De este modo, surgen algunas premisas importantes de la práctica narrativa.

Premisas de la terapia narrativa

  1. El problema es el problema y la persona es la persona, esto hace que se analicen los problemas separados de las personas y se asume que las personas tienen muchas habilidades, capacidades, competencias, creencias, valores y compromisos que les ayudarán a cambiar su relación con los problemas en sus vidas. La externalización del problema es una de las técnicas más conocidas de la terapia narrativa (aunque desde la práctica narrativa se ve más como una cosmovisión que como una técnica)
  2. La palabra historia tiene que ver con una serie de sucesos que están relacionados a través de una secuencia temporal y que están de acuerdo con un argumento determinado. Interpretamos lo que nos sucede y le damos un significado uniendo determinados hechos para darle un sentido. Este sentido final formaría el argumento de la historia. Para llegar a ese sentido final hemos tenido que elegir ciertos sucesos y otros dejarlos fuera, probablemente porque no encajan con el argumento de la historia.
  3. Los relatos mediante los que damos sentido a nuestra experiencia están influidos sobre todo por factores culturales y sociales.
  4. El lenguaje sirve de mediador en estos procesos interpretativos: por medio de él definimos y mantenemos nuestros pensamientos y sentimientos (incluido nuestro monólogo interior).
  5. Las historias dan forma a nuestras vidas e impulsan o impiden la realización de ciertos actos. Esto es lo que llamamos los efectos de la historia dominante. Vivimos varias historias a la vez no podemos explicar nuestra vida sólo desde un punto de vista, por eso consideramos que los seres humanos tenemos vidas con historias múltiples. Esto permite la creación de una historia alternativa.

Creando la historia alternativa

Como puede observarse, la co-creación entre terapeuta y consultante de una historia alternativa al problema es el punto clave de la práctica narrativa. Podemos llegar a una historia alternativa, introduciendo aspectos, actos, personas, etc. que quedaron fuera de la historia dominante, mediante la exploración y desconstrucción de lo que mantiene al problema como la historia dominante en la vida de la persona que nos consulta. La desconstrucción se logra mediante preguntas reflexivas para narrar y re-narrar la historia que llevan al descubrimiento de los llamados “logros aislados”. Esos logros aislados juntos constituyen la historia alternativa, una historia que proporciona una identidad diferente a la que el problema pretendía, constituida por los momentos en los que el problema no ha tenido una influencia tan fuerte o no ha tenido influencia en absoluto.

La práctica narrativa es un campo rico de crecimiento en todas las áreas de una relación.

Hay muchas formas de lograr crear la historia alternativa y la práctica narrativa ha crecido en técnicas que facilitan al terapeuta la posibilidad de co-construir ésta con el consultante. Algunas técnicas bien conocidas son: conversaciones de externalización, conversaciones de remembranza, conversaciones de reautoría, ceremonias de definición, el uso de certificados, documentos, canciones, poesías, etc, terapéuticas, el árbol de la vida, el equipo de la vida, la cometa de la vida, etc.

La práctica narrativa es un campo rico de crecimiento en todas las áreas de una relación de ayuda, a nivel individual, de pareja, familiar y comunitario. Merece la pena que los profesionales sigan explorando las diferentes posibilidades que ofrece.

Sobre el autor: El Dr Carlos Chimpén es profesor en la Universidad de Extremadura y Presidente de la Asociación Española de Terapia Narrativa. Puedes escribirle a la siguiente dirección: [email protected]

Referencias Bibliográficas

Gergen, K., J. (1996). Realidades y relaciones, aproximaciones a la construcción social. Buenos Aires: Paidós.

Montes, J.G. (2011). Del saber al poder en la terapia. La narración de un sobreviviente de intento suicida y su mamá. Revista científica electrónica de psicología, nº 11, julio, pp. 340-356.

Morgan, A. (2004). What is narrative therapy? An eassy-to-read introduction. Adelaide, Australia: Dulwich Centre Publications.

White y Epston (1993). Medios Narrativos para fines terapéuticos. Barcelona: Paidós.

White, M. (2002). El enfoque narrativo en la experiencia de los terapeutas. Barcelona: Gedisa.

White, M. (2004). Guías para una terapia familiar sistémica. Barcelona: Gedisa.

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

  • Psicología aplicada

Nuevo estudio demuestra que los niños obesos tienen papilas gustativas menos sensibles

  • David Aparicio
  • 20/09/2012
¿Los niños obesos tienen menos capacidad gustativa en comparación a los niños con peso normal? Sí. Así lo indica una investigación recientemente publicada en la revista online Archives of Disease in Children (Archivos de Enfermedades en Niños). Según los investigadores, esta reducida capacidad de distinguir entre los 5 sabores: amargo, dulce, salado, agrio y umami (sabroso) puede incitar a los niños a consumir grandes cantidades de comida en un intento de registrar la sensación del gusto. Esta conclusión se basa en una muestra de 94 niños que tenían peso normal y 99 niños obesos que tenían entre 6 y 18 años, los mismos gozaban de buena salud y no tomaban medicamentos que pudieran afectar el gusto o el olfato. Los científicos evaluaron la sensibilidad del gusto de todos los niños por medio de 22 tiras con gustos que colocaron en la lengua, para incluir cada una de las 5 sensaciones gustativas en cuatro niveles diferentes de intensidad, más dos tiras insípidas. A cada niño se le pidió que se abstuviera de comer o beber cualquier cosa que no fuera agua y que no masticaran chicle por lo menos una hora antes de que tomaran los dos análisis, que incluían la identificación del gusto y su intensidad. La suma de los 5 sabores y de las 4 diferentes intensidades permitían un puntaje máximo de 20 en las escalas que le otorgaron a los niños. Se encontró que las niñas y los chicos mayores eran mejores para escoger los sabores adecuados. En general, los niños fueron mejores en diferenciar entre salado y dulce, pero se encontró que tenían más dificultad para distinguir entre salado y agrio, y entre salado y umami.

¿Y que se encontró en los niños obesos?

Los niños obesos tenían una dificultad significativa en identificar las diferencias en las sensaciones gustativas, su promedio fue de 12.6 en comparación al promedio de 14 perteneciente a los niños con peso normal. También fueron menos propensos a identificar correctamente las sensaciones gustativas, particularmente entre salado, umami y amargo; mientras que los niños con peso normal identificaron correctamente todos los niveles de la categoría dulce, los niños obesos las calificaron entre tres y cuatro niveles de intensidad más bajo que los niños con peso normal. Del mismo modo se encontró que entre los niños con peso normal la tendencia era que a mayor edad había mayor capacidad de distinguir las sensaciones gustativas, pero esta tendencia no se encontró entre los niños obesos. Aunque aún no se sabe porque tenemos diferencias en la percepción del gusto, los investigadores creen que los genes, las hormonas, la aculturación y la exposición a diferentes gustos en la vida temprana juegan un papel importante. Investigaciones previas indican que una alta sensibilidad para diferenciar las sensaciones gustativas puede ayudar a reducir la cantidad de comida consumida que se requiere para obtener el “gusto”. Fuente: Study :Obese Kids Have Less Sensitive Taste Buds

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

Sin categoría

El miedo puede ser borrado de nuestro cerebro

  • David Aparicio
  • 20/09/2012
Nuevos recuerdos emocionales pueden ser borrados del cerebro humano. Así sostienen los investigadores Thomas Ågren, Mats Fredrikson y Tomas Fumark de la Universidad de Uppsala en una nueva investigación publicada en el Academic Journal Science (Revista Académica de Ciencia). Cuando una persona aprende algo nuevo, una memoria de largo plazo es creada para ayudar al proceso de consolidación, que es sustentado por un proceso de formación de proteínas. Cuando recordamos algo, la memoria se estabiliza momentáneamente y luego se restablece mediante otro proceso de consolidación. Lo que significa que no recordamos lo que originalmente pasó, sino más bien se recuerda la última vez que se pensó en lo sucedido. Esto nos dice que se puede afectar el contenido de la memoria al interrumpir el proceso de reconsolidación que sigue al proceso de recordar.

La investigación

Los investigadores le mostraron a los participantes imágenes neutrales y simultáneamente les administraron descargas eléctricas, lo que provocó temor en los sujetos y consecuentemente se formó un recuerdo del miedo. Para activar el recuerdo de miedo, los investigadores les mostraron repetidamente la imagen a los sujetos sin aplicar simultáneamente la descarga eléctrica. Al grupo experimental se le interrumpió el proceso de reconsolidación, con la ayuda de presentaciones repetidas de las imágenes. Y al grupo control, se le permitió completar el proceso de reconsolidación antes de que se le mostrará las mismas imágenes. (Artículo relacionado: El vinculo emocional entre la percepción y la memoria) Al no completarse el proceso de reconsolidación del recuerdo, la memoria se hizo neutra y el miedo previamente asociado con la imagen se disipó, se eliminó el miedo en el grupo control. Para confirmar que el recuerdo había sido eliminado por completo, los investigadores utilizaron el IRM (Imagen por Resonancia Magnética) y fueron capaces de mostrar que las rutas de la memoria también habían desaparecido de la amígdala en el lóbulo temporal (área cerebral encargada de almacenar los recuerdos de miedo). Thomas Ågren y sus colaboradores creen que estos descubrimientos son un gran avance para el tratamiento de millones de personas alrededor del mundo que sufren de trastornos de ansiedad, fobias, estrés postraumático y ataques de pánico. Fuente: Fear can be erased from memory

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

  • Psicología clínica

Trastorno por Estrés Postraumático Postparto

  • Alejandra Alonso
  • 20/09/2012
Aproximadamente del 1 al 6% de las mujeres experimentan el Trastorno por Estrés Postraumático (TEP) Postparto. Muy a menudo, esta enfermedad es causada por un trauma real o imaginado durante el parto o luego de este.

Este trauma puede incluir:

  • Prolapso del cordón umbilical
  • Cesárea no planeada
  • Utilización de extractores de vacío o pinzas para asistir el parto
  • El bebé va a la incubadora
  • Sentimientos de impotencia, pobre comunicación y/o falta de apoyo y seguridad durante el parto
Las mujeres que experimentaron traumas previos, como violaciones o abuso sexual, también tienen alto riesgo de padecer TEP postparto. (Artículo relacionado: Lo que todos debemos saber sobre la Psicosis Postparto)

Los síntomas del TEP postparto pueden incluir:

  • Re-experimentación intrusiva de un evento traumático pasado (que en este caso puede haber sido el nacimiento mismo).
  • Flashbacks o pesadillas.
  • Evitación de estímulos asociados con el evento, incluyendo pensamientos, sentimientos, personas, lugares y detalles del evento.
  • Ansiedad y ataques de pánico.
  • Sensación de irrealidad y desapego.
Si sientes que puedes estar sufriendo de esta enfermedad, nota que no es tu error y no puedes culparte. También es muy importante que la familia entienda esto, brinde su apoyo y que busquen asistencia ya que el TEP postparto es temporal y tratable con ayuda profesional. Fuente: Postpartum Post Traumatic Stress Disorder

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

  • Psicología clínica

El origen de la terapia breve centrada en las soluciones

  • Jorge Ayala Salinas
  • 19/09/2012
 La familia tiene la solución. Este es uno de los supuestos más importantes de la Terapia Centrada en Soluciones, concebida como terapia breve a finales de la década de los 70 por Steve de Shazer. A diferencia de las intervenciones de la terapia breve del MRI (Mental Research Institute), que apuntaba a interrumpir las pautas interacciones que los terapeutas identificaban como más de lo mismo, como imperfectos intentos de solución, el enfoque del equipo del Brief Family Therapy Center de Milwaukee empezó a recurrir más a la colaboración y al modo de pensar que posteriormente daría contigencia al lenguaje de las terapias posmodernas. El paso de la terapia familiar practicada por el equipo de De Shazer, centrada en el problema como sus colegas del MRI, hacia un enfoque más colaborativo y centrado en las excepciones y la solución, ocurrió de una manera totalmente fortuita. Eve Lipchik recuerda en su libro “Terapia Centrada en la Solución. Más allá de la técnica”, que varios miembros del equipo se encontraban detrás del espejo formulando un mensaje de intervención (lo que ahora reconocemos como Mensaje Final de Recapitulación y Sugerencia) para una familia que había acudido a consulta con su hija adolescente con una actitud muy rebelde, y que al final de la tercera sesión no informaba progreso alguno respecto a las metas. Los padres estaban saturados del problema: contaban únicamente lo que la hija hacía muy mal, eludiendo cualquier pregunta sobre las excepciones. Ese día, a una de las personas detrás del espejo se le ocurrió lo siguiente: “¿Por qué no les pedimos que la próxima vez traigan una lista de lo que no quieren que cambie?” Todo el equipo se mostró de acuerdo y la siguiente semana recibieron una enorme sorpresa cuando la familia volvió con una lista muy extensa acerca de las cosas que apreciaban el uno del otro. Lo que más asombró al equipo, cuenta Lipchik, fueron los cambios positivos que cada uno de los tres estaba informando. Todos estaban de acuerdo que la tensión en el hogar había disminuido. Los padres consideraban que la actitud de la hija había mejorado muchísimo, mientras la hija sostenía que sus padres habían dejado de estar encima suyo criticándola. Esta noticia fue el germen de una investigación realizada por el equipo: empezaron por asignar esta misma tarea a otras familias con resultados semejantes. Los resultados indicaron que los cambios concretos logrados por cada familia poco tenían que ver con su descripción del problema y las quejas presentadas durante la primera sesión, lo que permitió el desarrollo de otra semilla muy importante para el enfoque centrado en soluciones: la primera entrevista como lugar de intervención y posteriormente la atención en el mensaje final y la tarea, reforzando el proceso generado. El énfasis en la forma en que los clientes podían cooperar con el terapeuta fue marcando cada vez más la actitud colaborativa del equipo, definido por Steve de Shazer de esta manera: “Cada familia, o individuo o pareja, muestra un modo singular de tratar de cooperar, y la tarea del terapeuta consiste, primero, en describirse ese modo particular exhibido por la familia y, luego, en cooperar con él.” Lo que el equipo había logrado fue resultado de cambiar el foco de atención de la familia: re-dirigieron cada mirada sobre aquello que funcionaba, sobre la excepción, sobre todo lo que podían hacer en ausencia del problema, ayudando a la familia no sólo a ver, sino también a hacer las cosas de un modo diferente, transformando las expectativas de cada miembro y favoreciendo el desarrollo posterior de una teoría de la solución para el proceso terapéutico.

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

  • Psicología clínica

‘El terapeuta aprende de sus pacientes, por eso su formación no termina jamás’

  • David Aparicio
  • 19/09/2012
psicoterapia
En el marco de la 22da. conferencia de promoción de la Terapia Gestaltica, desarrollada en Levante, España, el fundador y director del instituto de Terapia Gestalt en Valencia, Manuel Ramos aseguró:

“Aún con más de 30 años de experiencia profesional, nunca tendré la sensación de saber lo bastante para acompañar a los pacientes. El arte de ser psicoterapeuta es algo sagrado porque se trabaja con personas y se acompaña a personas en su camino de crecimiento. Yo no soy un terapeuta todo el tiempo, pero si soy una persona cuando acompaño al paciente.”

Por su parte la psicoterapeuta Raquel Ros transmitió su experiencia al público y afirmó:

“La vocación es la que determina que las personas quieran dedicarse a la psicoterapia; también la capacidad o el gusto por el análisis, por la intimidad en el acompañamiento a los demás en procesos difíciles y dolorosos.”

Esto posibilita un alto grado de estimulación para el psicoterapueta, ya que tiene que ser más consciente que los otros (el darse cuenta), por el contacto íntimo y profundo que se establece entre psicoterapeuta y paciente. Además es un trabajo muy desafiante, es un reto constante que nos hace crecer como personas. Según Ramos, el terapeuta debe contar con humildad y ser consciente de que está acompañando a los pacientes en su camino de crecimiento, pero ese camino no es el del terapetua y podemos aprender a mostrar nuestras debilidades y limitaciones. Ramos también comentó que la psicoterapia es la profesión con mayor incertidumbre de todas. “El psicoterapeuta aprende de sus pacientes, por eso su formación no termina jamás” dijeron Manuel Ramos y Raquel Ros. Para mayor información puedes visitar la web https://www.itgestalt.com/ Fuente: Levante-emv.com

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

Sin categoría

El ejercicio físico y sus efectos sobre el control del estrés cotidiano

  • Maria Fernanda Alonso
  • 19/09/2012
El ejercicio moderado puede ayudar a las personas a lidiar con la ansiedad y el estrés durante un período de tiempo prolongado después de haberlo practicado, de acuerdo con un estudio realizado por investigadores de kinesiología en la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Maryland, publicado en la revista Medicine and Science in Sports and Exercise (Medicina y Ciencia en Deportes y Ejercicio). «Aunque es sabido que el ejercicio mejora el estado de ánimo, entre otros beneficios, no se sabe mucho acerca de la potencia del impacto de la gimnasia en el estado emocional y si estos efectos positivos perduran cuando nos enfrentamos a los factores de estrés de todos los días una vez que dejamos el gimnasio «, explica J. Carson Smith, profesor asistente en el Departamento de Kinesiología. «Hemos encontrado que el ejercicio ayuda a amortiguar los efectos de la exposición emocional. Si realizas ejercicios, no sólo reducirás tu ansiedad, también serás capaz de mantener esa reducción de la ansiedad cuando enfrentes eventos emocionales». (Artículo relacionado: El estrés cotidiano contrae nuestro cerebro.) Smith, cuya investigación explora cómo el ejercicio y la actividad física afectan la función cerebral, el envejecimiento y la salud mental, compara cómo afectan a los niveles de ansiedad en un grupo de estudiantes universitarios saludables, el ciclismo de intensidad moderada y un período de descanso tranquilo (ambos 30 minutos). Se evaluó su estado de ansiedad antes del período de actividad (o del de descanso), poco después (15 minutos después) y, finalmente, después de exponerlos a una variedad de fotografías muy excitantes, agradables y desagradables, así como imágenes neutras. En cada punto, los participantes del estudio respondieron 20 preguntas del Inventario de Ansiedad Estado-Rasgo (o STAI), que está diseñado para evaluar los diferentes síntomas de la ansiedad. Todos los participantes fueron sometidos tanto al ejercicio como al resto de los estados (en días diferentes) y fueron evaluados sus niveles de ansiedad antes de los ejercicios, después de los ejercicio y después de ver las imágenes. Smith encontró que el ejercicio y el descanso tranquilo eran igualmente efectivos para reducir los niveles de ansiedad inicialmente. Sin embargo, una vez que fueron estimulados emocionalmente (habiéndoseles mostrado 90 fotografías del Sistema Internacional de Imágenes Afectivas (International Affective Picture System), una base de datos de fotografías utilizadas en las investigaciones sobre emociones) por aproximadamente 20 minutos, los niveles de ansiedad de los que habían descansado simplemente volvieron a subir a su nivel inicial, mientras que los que se habían ejercitado mantuvieron sus niveles de ansiedad reducidos. «El conjunto de estímulos fotográficos que utilizamos de la base de datos del IAPS fue diseñado para simular la gama de eventos emocionales que puedes experimentar en la vida diaria», explica Smith. «Ellos representan agradables eventos emocionales, eventos neutrales y eventos o estímulos desagradables. Estos varían desde fotos de bebés, familias, cachorros y apetitosos alimentos, a cosas muy neutras como platos, vasos, muebles y paisajes de la ciudad, hasta imágenes muy desagradables de violencia, mutilaciones y otras cosas horribles».
Los hallazgos del estudio sugieren que el ejercicio puede desempeñar un papel importante para ayudar a la gente a soportar los factores de estrés de la vida diaria.
Smith planea explorar si el ejercicio podría tener el mismo efecto beneficioso persistente en los pacientes que experimentan regularmente síntomas de ansiedad y depresión. En colaboración con el nuevo Centro de Neuroimagen de Maryland, también está estudiando la incorporación de la resonancia magnética funcional, o fMRI, para medir la actividad cerebral durante el periodo de exposición a las imágenes emocionalmente estimulante para ver cómo el ejercicio puede alterar las emociones relacionadas con las redes neuronales del cerebro. Smith también investiga el papel del ejercicio en la prevención del deterioro cognitivo en los adultos mayores. Su investigación ha mostrado que la actividad física promueve cambios en el cerebro que puede proteger a aquellos con alto riesgo de desarrollar Alzheimer. Su artículo, «Effects of Emotional Exposure on State Anxiety after Acute Exercise»  (Efectos de la exposición emocional sobre el Estado de Ansiedad después de Ejercicio Agudo), fue publicado online antes de imprimir el 14 de agosto de 2012 en la revista Medicine and Science in Sports and Exercise. Fuentes: Exercise May Protect Against Future Emotional Stress, Study Shows. UMD Study Shows Exercise May Protect Against Future Emotional Stress.

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

  • Psicología clínica

Psicólogos, Guantanamo y Tortura

  • RodrigoBarahona
  • 18/09/2012

A través de los años, las profesiones dedicadas a la salud mental en EE. UU. han estado en una lucha de poderes. El desarrollo de un estado militarizado para la seguridad nacional, después de la Segunda Guerra Mundial, ha ofrecido múltiples oportunidades para que la psicología profesional logre llamar la atención a sus especialidades. Esto ha sido a través de sus aportes en el área de propaganda, así como en el campo del desarrollo de armas sofisticadas logradas con la ingeniería de factores humanos ( human factors engineering ). Un campo particularmente perturbador donde los psicólogos estadounidenses han demostrado lo que valen ha sido en el desarrollo de técnicas de interrogación para obtener información de prisioneros resistentes. El historiador Alfred McCoy, en «La cuestión sobre la tortura», ha documentado el uso que ha hecho la CIA de los psicólogos para desarrollar formas de tortura que podrán derrumbar la personalidad del prisionero. Muchas de estas técnicas fueron utilizadas durante la guerra de Vietnam, además de en las brutales contrainsurgencias, apoyadas por los EE. UU., en América Latina. No obstante la condición inmoral de estos hechos, que hacía imposible promoverlos públicamente, confluyeron para su continuación los intereses políticos del aparato militar y los corporativos de los psicólogos que buscaban de esta manera incrementar su estatus. Esto se haría, por supuesto, a través del otorgamiento de fondos para trabajos de investigación y la ampliación del campo laboral posible para los psicólogos, es decir, el campo militar. De esa manera, lo que se dio fue un silencio total por parte de la Asociación Psicológica Estadounidense (la APA), la representación mas grande en los EE. UU. y en el mundo para la psicología profesional.

El estrés extremo

La “guerra mundial contra el terror”, lanzada después del 11 de setiembre del 2001, aportó otra oportunidad de experimentar con estas técnicas de la psicología conductual. El establecimiento de ese infierno llamado Centro de Detención de Guantánamo, donde se mantienen los detenidos en la campaña en Afganistán y en otras partes, ofreció un ambiente particularmente favorable. Se creó una institución donde todos los detenidos, en contra de la ley internacional, carecen de todos sus derechos y donde son monitoreados y controlados durante las 24 horas del día. La definición del término ‘tortura’ se ha debilitado de tal manera que prácticas previamente prohibidas ahora son permitidas, un verdadero retorno de lo reprimido. Varios psicólogos y psiquiatras funcionaron como asesores en el desarrollo de esta institución dedicada a la destrucción de la personalidad humana. Jane Mayer, escritora de la prestigiosa revista The New Yorker , describe cómo un psiquiatra determinó que a un reo se le permitiera nada más que 7 cuadritos de papel higiénico al día, mientras que un psicólogo aplicó la técnica de interrogación llamada “la desesperación aprendida”. En el New England Journal of Medicine (2005), los investigadores Bloche y Marks notan que, desde el 2002, psiquiatras y psicólogos han sido parte de una estrategia que utiliza el estrés extremo como modificador de conducta. Otras medidas son la privación del sueño, el aislamiento prolongado, posicionamiento corporal doloroso, cambios extremos de temperatura y humillación sexual y cultural. Además de la cuestión moral, la participación en estas actividades de profesionales de la salud mental entra en conflicto con las normas de ética establecidas por las asociaciones psiquiátricas y psicológicas estadounidenses. El escándalo de Abu Ghraib hizo pública la participación de psicólogos y psiquiatras; después de un período de debate, en mayo del 2006, la Asociación Psiquiátrica Estadounidense emitió una orden que prohíbe la participación directa de psiquiatras en actos de interrogación, en Guantánamo o en cualquier parte.

Indefinición de términos

Lo mismo no se puede decir de los psicólogos. La asociación de psicólogos formó un comité para determinar cuál sería su posición acerca de las interrogaciones,  llamado “El consejo presidencial sobre la ética psicológica y la seguridad nacional» (The Presidencial Task Force on Psychological Ethics and Nacional Security ). La mayoría de los integrantes votantes, 6 de los 9, eran psicólogos que ya trabajaban en asuntos militares y de inteligencia, varios de ellos conectados con Guantánamo y las interrogaciones. El resultado fue previsible; dice el informe final: “Es congruente con los códigos de ética de la APA que los psicólogos sirvan como consultores en los procesos de interrogación y la extracción de información para propósitos relacionados con la seguridad nacional”. El informe dice que los psicólogos no deberían estar involucrados en actos de tortura o conductas crueles, degradantes o inhumanas pero, al igual que la administración de Bush, se resiste a definir estos términos. A pesar de que se sigue reportando la participación de psicólogos en actos de tortura, la APA no ha abierto ninguna investigación. Más bien, su presidente manifestó: “Un numero de comentadores oportunistas disfrazados de académicos han continuado reportando supuestos abusos por profesionales de salud mental. Pero no entregan a la APA los nombres y circunstancias de los involucrados…”. La participación de psicólogos en actos de interrogación en Guantánamo, donde ha habido por lo menos 120 intentos de suicido desde el 2002, no es simplemente un asunto profesional. Es un reto moral para el concepto del uso del conocimiento al servicio del bien y no del mal. Si esta participación sigue, la psicología perderá su alma, así como la sociedad estadounidense perderá su alma si se siguen cometiendo estos horrores en su nombre. Aquí, en Costa Rica, hace unos días, un médico prominente en este mismo diario alabó el uso de la máquina de muerte y tortura llamada Guantánamo, como fortaleza última en una guerra galáctica entre el demonio y el mundo occidental. Es decir, nos pertenece a todos esta cuestión moral. Escrito por Rodrigo Barahona, puedes escribirle a su correo [email protected]

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

  • Psicología clínica

¿Qué es el trastorno de procesamiento sensorial?

  • David Aparicio
  • 18/09/2012

Muchos niños con problemas de aprendizaje, de conducta y/o coordinación motriz, sufren silenciosamente del trastorno de procesamiento sensorial (TPS). Este trastorno tiene una alta relación con otros trastornos como el TDAH, el autismo y los trastornos de ansiedad; pero pasa generalmente desapercibido, ya que todavía no está descrito en manuales de diagnóstico como el DSM.

¿Qué es el trastorno de procesamiento sensorial?

Este trastorno, también conocido como Disfunción de Integración Sensorial (DIS) fue descrito por primera vez por la terapeuta ocupacional, Dra. Janes Ayres. Y se caracteriza por una dificultad en la interpretación y organización de la información captada por los órganos sensoriales del cuerpo (gusto, vista, tacto, olfato). El niño que padece de este trastorno, es un niño que tiene reacciones exageradas, no soporta cambios en su rutina diaria, tiene problemas de conducta, aprendizaje, es muy inquieto, se asusta fácilmente, tiene problemas de sueño, de autonomía, en su higiene y para hacer amigos. Por lo general, los signos de un desarrollo sensorial inadecuado son mal interpretados. Las evaluaciones de los terapeutas ocupacionales especializados en la integración sensorial revelan que muchos niños diagnosticados con trastorno de déficit de atención e hiperactividad (TDAH), autismo y trastornos de ansiedad, son hipersensibles al tacto. Un estudio de 2410 niños previamente diagnosticados con TPS o TDAH, encontró que el 60% de los niños padecía en realidad  ambos trastornos y  otro estudio sostiene que al menos 1 de cada 20 niños sufre de TPS.

Teoría de integración sensorial

Según la teoría de integración sensorial, se necesita de un buen desarrollo sensorio-motor para lograr un buen desarrollo perceptivo y cognitivo. Aunque esta teoría toma en consideración todos los sistemas sensoriales, se centra específicamente en 3: sistema táctil, sistema propioceptivo y el sistema vestibular.

Sistema táctil

Por ejemplo, un niño que es hipersensible al tacto tendrá, a menudo, reacciones negativas ante el toque inofensivo de un compañero que lo roza sin querer, o ante los efusivos gestos de amor de sus familiares. Se dirá que el niño es un antipático, arisco o agresivo. Pero la verdadera causa de este comportamiento se debe a su hipersensibilidad. También se dan comúnmente los casos en que los niños son hipo-responsivos al estímulo propioceptivo, quienes demuestran poca fluidez en sus movimientos, debido a la escasa percepción que tienen sobre su propio cuerpo, la posición de este, la velocidad y la dirección del movimiento y la percepción de la fuerza generada por los músculos.

Sistema propioceptivo

El niño con dificultades en el procesamiento de las sensaciones propioceptivas mostrará poca fluidez en sus movimientos, debido a la escasa percepción que tiene sobre su propio cuerpo. Es probable que utilice fuerza desproporcionada a ciertos objetos. Tardará mucho en aprender a vestirse y a comer solo. También tardará en aprender habilidades motoras no programadas, como andar en bicicleta,  nadar o jugar al fútbol.

Sistema Vestibular

Algunos niños son especialmente sensibles al estímulo vestibular y reaccionan de una forma exagerada al movimiento y a cualquier desplazamiento de su eje corporal fuera de su verticalidad. Son excesivamente cautos y se caracterizan por su falta de exploración del ambiente. Pueden mostrar un auténtico pavor a los juegos típicos de parque como los toboganes y columpios, por lo general prefieren juegos tranquilos y sedentarios, y se mantendrán al margen de todos los juegos gratificantes como saltar, trepar, correr, etc. Además sus relaciones sociales pueden verse afectadas debido a su estado de tensión.

Indicadores del TPS

Bebés de 0 y 36 meses

  • Problemas de alimentación o sueño.
  • Irritable cuando lo están vistiendo, incómodo por su ropa.
  • Rara vez juega con sus juguetes.
  • Resiste a que lo alcen; curva la espalda cuando lo alzan.
  • No puede calmarse solo.
  • Torpe, poco flexible, cuerpo tieso. Demorado en sus habilidades motoras.

Preescolares entre 3 y 5 años

  • Muy sensibles al tacto, ruidos, olores u otras sensaciones o a la gente.
  • Se distrae fácilmente, se mueve mucho, es agresivo.
  • Dificultad para vestirlo, darle de comer, dormirlo y/o entrenarlo para ir al baño solo.
  • Dificultad para hacer amigos.
  • Torpe, débil, habilidades motoras bajas.
  • En constante movimiento.
  • Pataletas frecuentes, especialmente cuando debe cambiar de actividades.

Niños entre 5 y 12 años.

  • Muy sensible al tacto, ruidos, olores u otras sensaciones y/o a la gente.
  • Se distrae fácilmente, se mueve mucho, es agresivo.
  • Se sobrecarga fácilmente, sintiéndose angustiado por las circunstancias.
  • Dificultad para escribir o para realizar actividades motoras.
  • Dificultad para hacer amigos.
  • Indiferente al dolor propio o el de los demás.
Si quieres ampliar en este tema te recomiendo leer leer las siguientes fuentes: Fundación del Trastorno de procesamiento sensorial. ALERTA 
ROJA
 PARA 
DETERMINAR
 EL
TRASTORNO 
DE 
PROCESAMIENTO
 SENSORIAL
(TPS*) Un trastorno en el procesamiento sensorial es frecuentemente la causa de problemas de aprendizaje, conducta y coordinación motriz en niños.

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

  • Psicología aplicada

(Vídeo) Alison Gopnik: ¿Qué piensan los bebés?

  • David Aparicio
  • 18/09/2012
¿Te has preguntado qué sucede en la mente de los bebés? Hace 30 años, los investigadores y psicólogos habrían respondido que los bebés son egocéntricos, irracionales e ilógicos. Pero actualmente, la psicóloga Alison Gopnik nos ofrece una interesante perspectiva diferente. Nos habla sobre la sofisticada construcción de la inteligencia y la toma de decisiones de los bebés cuando juegan. Para ella, los niños pequeños son como el departamento de investigación y desarrollo de la especie humana, sus pensamientos son comparables al de los científicos más brillantes.

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

Paginación de entradas

Anterior 1 … 662 663 664 665 666 … 679 Próximo
Sponsor exclusivo de la semana
Formación Método Gottman Nivel 1

Únete a Psyciencia Pro y apoya nuestro trabajo 💞.

      Únete a la membresía    
Contenido para miembros
  • Inicia sesión
  • Tips para terapeutas
  • Podcast
  • Recursos
  • Webinars
  • Artículos
  • La exposición a la luz del sol, durante la mañana, mejora la calidad de sueño
  • No todo es psicología (27): Me pasó un camión por encima
  • Tarjetas DNA-V para trabajar flexibilidad psicológica con adolescentes
  • Club de lectura de Psyciencia: La Matrix, manual de usuario: entrenando la flexibilidad psicológica
  • No todo es psicología (8): Miedo, fusión y resonancia magnética
Psyciencia
  • Contáctanos
  • Publicidad
  • Nosotros
  • Publica
Psicologia y neurociencias en español todos los días

Ingresa las palabras de la búsqueda y presiona Enter.