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Publicaciones por mes

mayo 2019

42 Publicaciones
  • Análisis
  • Ciencia y Evidencia en Psicología

¿Qué es la autopsia psicológica?

  • 31/05/2019
  • Javier Menéndez

En un contexto en el cual los peritos psicólogos cobran creciente relevancia ante las incógnitas judiciales, las técnicas implementadas y su sofisticación resultan aspectos fundamentales a tener en cuenta. En los últimos años, interrogantes vinculados al daño psicológico, síndrome burnout, emoción violenta, entre otros, son materia de consulta de los jueces para con los expertos en el ámbito de la psicología.

A diferencia de las pericias médicas, que cuentan con diversas técnicas para determinar las causas de la muerte de un sujeto, los psicólogos nos encontramos con una enorme desventaja: ¿cómo abordar un objeto de estudio que no permanece post-mortem?

El concepto de autopsia psicológica suele resultar un tanto desconcertante. La representación mental inmediata es la del psicólogo interrogando de manera poco exitosa a un cuerpo inerte dentro de la morgue. Sin embargo, el verdadero procedimiento implica la reconstrucción retrospectiva e indirecta de la personalidad y vida del sujeto, procurando un análisis detallado de la psique sin contar con su presencia. En definitiva, constituye un proceso de investigación que, complementado con otras herramientas, puede contribuir a esclarecer circunstancias de muerte dudosas. Se servirá principalmente de entrevistas a sujetos cercanos a la víctima, el estudio de la escena del crimen y la recopilación de huellas psíquicas (escritos, objetos personales, documentos, libros leídos, entre otros).



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El verdadero procedimiento implica la reconstrucción retrospectiva e indirecta de la personalidad y vida del sujeto

Existen discrepancias en cuanto a los orígenes de este procedimiento. Algunos autores lo sitúan en los años ́30, como intento por dar respuesta a la oleada de suicidios producida en Nueva York luego de la crisis del ́29. No obstante, estrictamente, el término es mencionado por primera vez en los años ́50 por Shneidman y Farberow, investigadores del Centro de prevención de suicidios de Los Ángeles. Es en ese contexto que comienza a gestarse un considerable interés por resolver interrogantes relacionados a muertes dudosas y suicidios en personal militar.

Usos de la autopsia psicológica

Puede determinarse una doble utilidad del mismo: como herramienta de investigación criminal y como instrumento epidemiológico. En el primer caso, interviene en aquellos escenarios en los que la autopsia médico-legal resulta insuficiente para determinar la etiología de una muerte. Su objetivo principal estaría ligado a la posibilidad de aplicar el código NASH, el cual determina si el fallecimiento se debió a causas Naturales, Accidentales, Suicidio u Homicidio.

Por otra parte, su función como instrumento epidemiológico procura recopilar las regularidades existentes en las muertes por suicidio, logrando así establecer factores de riesgo que permitan diseñar programas de prevención. No obstante, también pueden establecerse (aunque menos difundidos) otros posibles usos y aplicaciones, a saber: precisar el estado de salud mental de una persona al momento de su muerte; determinar la validez de acciones legales previas al deceso (evaluando si se contaba con una adecuada capacidad cognitiva al momento de firmar herencias, contratos maritales u otros); evidenciar posibles mala praxis (ante casos de suicidio de personas que se encontraban bajo tratamiento con un profesional de la salud mental) y desarrollar perfiles de asesinos seriales (conociendo las características de personalidad del occiso para determinar los target del homicida).

Protocolos de autopsia psicológica

Actualmente, si bien no existe un único protocolo estandarizado para la realización de la autopsia psicológica, los autores coinciden en que resulta indispensable la inclusión de los antecedentes demográficos, categorización psicológica y evaluación de señales pre-suicidas del occiso.

En el contexto latinoamericano, el protocolo más difundido es el modelo de autopsia psicológica integrado (MAPI), diseñado en los años ́90 por la Dra. Teresita García Pérez. El mismo es altamente valorado dada su notable rigurosidad y estandarización. Cuenta con una entrevista estructurada que evalúa 60 dimensiones diferentes y procura reducir al mínimo los sesgos subjetivos de evaluación. En este protocolo se destacan cuatro áreas a reconstruir sobre la vida del fallecido: interpersonal, emocional, psicosocial y mental. Para ello se determinan aspectos indispensables como un examen psiquiátrico retrospectivo hasta un mes antes de la muerte, el diagnóstico nosológico, las áreas de conflicto existente, las señales relevantes emitidas hasta dos años antes del suceso y los detalles sobre el lugar de los hechos.

El MAPI se desarrolla en tres etapas: el trabajo en el lugar de los hechos, con el objeto de recopilar huellas psicológicas; la realización de al menos tres entrevistas estructuradas a allegados de la víctima que procuren reconstruir de la manera más detallada posible su perfil psicológico; y, finalmente, la discusión colectiva con los profesionales intervinientes.

El final del proceso derivará en un informe pericial de índole probabilística que, en consideración con otras pruebas, puede ayudar a esclarecer las posibilidades de que una persona con determinadas características se haya suicidado, haya sido asesinada o haya tenido un accidente.

Otro procedimiento bastante novedoso es el Protocolo de sociometría conductual aplicada a la realización de autopsias psicológicas (PSCAAP). El mismo concibe que todos nos encontramos inmersos en redes de interacción social que pueden ser analizadas. Así, su estudio permitiría inferir el rol del elemento faltante (a saber, los rasgos de personalidad y conducta del occiso). Dicha evaluación retrospectiva se basaría en análisis funcional de la conducta, procurando inferir las respuestas de un sujeto basándose en su historia general de reacciones a estímulos similares. Este modelo apunta al desarrollo de bases de datos que puedan estudiarse desde la estadística, permitiendo así delimitar objetivamente las probabilidades de que un sujeto haya realizado determinadas acciones.

Controversias de la autopsia psicológica

El ámbito de las pericias psicológicas resulta un campo de grandes debates, dada la falta de validación de las técnicas que muchos profesionales deciden aplicar. Teniendo en cuenta esto, podemos asegurar que la cuestión se vuelve sumamente más compleja cuando esas técnicas procuran aplicarse para un análisis retrospectivo e indirecto que apunta a la reconstrucción de emociones, cogniciones y conductas de alguien que no se encuentra presente.

Otras limitaciones importantes son la imposibilidad de replicar resultados en idénticas condiciones, la subjetividad existente en la interpretación de sus datos, la ambigüedad del proceso, la ausencia de metodología rigurosa, la falta de control de las variables intervinientes, el bajo nivel de eficiencia (considerando que se trata de un procedimiento que requiere de una gran inversión de tiempo) y, la imposibilidad de realizar afirmaciones concluyentes dado su carácter de evaluación indirecta.

El ámbito de las pericias psicológicas resulta un campo de grandes debates, dada la falta de validación de las técnicas que muchos profesionales deciden aplicar

A su vez, también es cuestionada la falta de validez y confiabilidad del procedimiento por la ambigüedad de ciertos conceptos (falta de operacionalización de términos como huella psíquica, por ejemplo), la calidad de la fuente (entrevistas en las que podrían existir diversos conflictos de intereses, dado que se desarrollan en el marco de un proceso judicial), las correlaciones ilusorias (debido al análisis retrospectivo e indirecto) y la falta de precisión para establecer la probabilidad de algún tipo de muerte en particular.

A pesar de las críticas anteriormente mencionadas, debe destacarse que la autopsia psicológica surge como intento de dar respuesta a ciertos interrogantes judiciales ante los cuales aún no existen herramientas que puedan brindar soluciones claras y satisfactorias. Son múltiples los casos mediáticos en nuestro país que presentan muertes dudosas sin esclarecimiento alguno. Los enigmáticos casos de Alberto Nisman y Solange Grabenheimer son un ejemplo de aquellos en los que la autopsia psicológica se aplicó procurando esclarecer las circunstancias de sus muertes.

El panorama hispano resulta alentador, dado que la mayoría de las publicaciones en los últimos años han sido de autores latinos. Probablemente el siguiente paso para una mayor sofisticación sea el diseño de un protocolo local que alcance gran rigurosidad y eficiencia. El contexto nos demuestra que, aún los procedimientos con altos niveles de objetividad como la autopsia médico-legal se ven limitados en algunos casos. Es por ello que, la investigación en evaluaciones periciales
psicológicas puede realizar grandes aportes.

El estudio científico de la autopsia psicológica brindará una mayor rigurosidad al esclarecimiento de muertes dudosas, logrando reconstruir las características psicológicas de un sujeto ausente al servicio del poder judicial.

  • Salud Mental y Tratamientos

Los niños menores de tres años son especialmente vulnerables al trauma

  • 30/05/2019
  • David Aparicio

Los psicólogos sabemos que las situaciones de abuso, pobreza extrema y la inestabilidad familiar, durante la infancia pueden generar serios problemas de salud mental. Un nuevo estudio del Biological Psychiatry, apoya este conocimiento y sugiere que las experiencias adversas durante los tres primeros años de vida tienen efectos duraderos en la epigenética o el proceso que controla si una secuencia de ADN se expresa o no. En este caso secuencias relacionadas con trastornos mentales.

Con los datos del Avon Longitudinal Study of Parents and Children los autores analizaron las pruebas de ADN de más de 1,000 padres e hijos desde su nacimiento hasta la edad de 7 años para evaluar las diferencias de la metilación del ADN, un proceso que puede incrementar o silenciar la expresión genética de ciertas características. Así también el equipo encuestó a las madres para saber si los niños habían sido expuestos a 7 experiencias negativas:

  • Abuso por parte de un padre u otro cuidador
  • Abuso por cualquier persona
  • Historia de trastorno mental en la madre
  • Vivir con un solo adulto
  • Inestabilidad familiar
  • Estrés financiero familiar
  • Pobreza o vivir en un barrio en desventaja social/económica

Las situaciones de adversidad que ocurrieron antes de los tres años tuvieron un mayor impacto en la metilación del ADN

Después los investigadores registraron el numero de veces que los niños fueron expuestos a esta situaciones y evaluaron qué tan cercanas fueron estas situaciones a la toma de la muestra de los análisis de sangre.



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Con estos datos se descubrió que las situaciones de adversidad que ocurrieron antes de los tres años tuvieron un mayor impacto en la metilación del ADN. Entre las situaciones adversas la que mayor impacto tuvo fue la de vivir en un barrio en desventaja social/económica, seguido del estrés familiar y financiero, el abuso físico o sexual y de vivir con un solo adulto.

Por supuesto estos hallazgos no significan que los niños mayores a los tres años sean inmunes a las exposición continua a situaciones adversas o estresantes. Sino que sugiere que hay un periodo temprano de mayor vulnerabilidad.

El estudio abre un nuevo camino de investigación que nos puede ayudar a entender mejor la relación del trauma infantil y los problemas mentales a largo plazo. Pero todavía es necesario que otras investigaciones independientes puedan replicar estos resultados y que puedan determinar si los cambios provocados por la metilación del ADN se asocian directamente con algunos problemas mentales.

Referencia del estudio: 1. Erin C. Dunn, Thomas W. Soare, Yiwen Zhu, Andrew J. Simpkin, Matthew J. Suderman, Torsten Klengel, Andrew D.A.C. Smith, Kerry J. Ressler, Caroline L. Relton. Sensitive Periods for the Effect of Childhood Adversity on DNA Methylation: Results From a Prospective, Longitudinal Study. Biological Psychiatry, 2019; 85 (10): 838 DOI: 10.1016/j.biopsych.2018.12.023

Fuente: Psychcentral

  • Ciencia y Evidencia en Psicología

La Realidad Virtual puede detectar problemas de navegación en personas con Alzheimer

  • 29/05/2019
  • David Aparicio

La Realidad Virtual no solo puede ser una potente herramienta en el tratamiento de las fobias, trastornos de ansiedad y estrés postraumático, sino también podría ayudar en la detección temprana del Alzheimer.

Una investigación de la Universidad de Cambridge y disponible en la revista Brain demuestra que esta tecnología podría ayudar a diagnosticar las fallas en el sistema de navegación cerebral, un sistema descubierto en el año 2014 por los ganadores del premio Nobel, el médico John O´Keefe y los psicólogos May-Britt Moser y Edvard Moseres, que explica cómo el cerebro crea un mapa del espacio que nos rodea y cómo podemos movernos en entornos complejos.

El mal de Alzheimer deteriora diferentes estructuras cerebrales y una de las primeras afectadas es la corteza entorhinal, una estructura clave para el sistema de navegación cerebral. Esto explica porqué el primer síntoma de las personas Alzheimer es la desorientación, el perderse o la deambulación. Sin embargo, las pruebas cognitiva actuales no pueden evaluar las dificultades de navegación con precisión.



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Se reclutaron 45 pacientes que sufrían deterioro cognitivo moderado y les tomaron muestras del liquido cefalorraquideo para observar si tenían los biomarcadores específicos del Alzheimer. Luego el equipo reclutó a 41 sujetos de la misma edad para que fueran parte del grupo control.

Para poner aprueba sus capacidades de navegación los participantes probaron los lentes de Realidad Virtual que los sumergían en una simulación de navegación y ubicación espacial.

Como se esperaba, todos los pacientes con deterioro cognitivo moderado tuvieron un peor desempeño espacial que el grupo control, y los pacientes con deterioro cognitivo moderado, que dieron positivo en los biomarcadores del Alzheimer tuvieron peores resultados en las pruebas de navegación que aquellos que dieron negativo en las pruebas de biomarcadores. Otro dato importante fue que las pruebas con Realidad Virtual fueron más precisas que las pruebas cognitivas actuales de lápiz y papel para diferenciar a los pacientes con alto y bajo riesgo de deterioro cognitivo moderado.

Hace unos años era inimaginable que la Realidad Virtual pudiera utilizarse dentro de los entornos de evaluación clínica. Pero gracias al desarrollo, potencia y accesibilidad de los celulares, esta tecnología es muy accesible y beneficiosa para mejorar los tratamientos y evaluaciones actuales. Si quieres conocer un poco más sobre cómo se puede utilizar esta tecnología en el ámbito psicológico-psiquiátrico, te invito a leer nuestra reseña completa.

Referencias del estudio: David Howett, Andrea Castegnaro, Katarzyna Krzywicka, Johanna Hagman, Deepti Marchment, Richard Henson, Miguel Rio, John A King, Neil Burgess, Dennis Chan. Differentiation of mild cognitive impairment using an entorhinal cortex-based test of virtual reality navigation. Brain, 2019; DOI: 10.1093/brain/awz116

Fuente: ScienceDaily

  • Ciencia y Evidencia en Psicología

Las migrañas podrían aumentar los riesgos de complicaciones en el embarazo

  • 29/05/2019
  • Maria Fernanda Alonso

Investigadores hallan fuerte asociación entre las migrañas y diversos riesgos durante el embarazo que abarcan trastornos de hipertensión durante el embarazo en la madre, y diversos resultados adversos en los recién nacidos: bajo peso al nacer, parto prematuro, parto por cesárea, síndrome de dificultad respiratoria y convulsiones febriles (Skajaa et al., 2019).

«La migraña es una condición incapacitante, común entre las mujeres en edad reproductiva» dijo el autor principal, Nils Skajaa, del Departamento de Epidemiología de Epidemiología Clínica del Hospital Universitario de Aarhus, de Dinamarca. El estudio incluyó 22.841 mujeres embarazadas con migraña (incluyendo 16.861 con bebés nacidos vivos) y 228.324 mujeres embarazadas sin migraña, emparejados por edad y época de concepción (incluyendo 170.334 con bebés nacidos vivos).

La migraña tratada no se asoció con mayores riesgos de resultados adversos en comparación con la migraña no tratada. Esto sugiere que la migraña en sí, más que su tratamiento, está asociada con complicaciones en el embarazo.



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Otro estudio (Chen, Chen, Chen, & Lin, 2010) realizado en Estados Unidos aporta datos similares, concluyendo que las mujeres con migrañas tuvieron mayor riesgo de tener bebés prematuros, con bajo peso al nacer, preeclampsia y parto por cesárea, en comparación con las madres no afectadas.

Por otro lado, las mujeres cuyas migrañas empeoraron durante el embarazo tenían un riesgo 13 veces mayor de padecer trastornos hipertensivos que aquellas en las que la migraña remitía o mejoraba. Generalmente se reconoce que el embarazo ejerce un efecto beneficioso sobre la migraña; sin embargo, los médicos deben estar alertas ante posibles complicaciones cardiovasculares que parecen ser más frecuentes en esta población de pacientes (Allais, Chiarle, Sinigaglia, Mana, & Benedetto, 2019).

Fuente: ScienceDaily

Referencias bibliográficas:

Allais, G., Chiarle, G., Sinigaglia, S., Mana, O., & Benedetto, C. (2019). Migraine during pregnancy and in the puerperium. Neurological Sciences: Official Journal of the Italian Neurological Society and of the Italian Society of Clinical Neurophysiology, 40(Suppl 1), 81-91. https://doi.org/10.1007/s10072-019-03792-9

Chen, H.-M., Chen, S.-F., Chen, Y.-H., & Lin, H.-C. (2010). Increased risk of adverse pregnancy outcomes for women with migraines: a nationwide population-based study. Cephalalgia: An International Journal of Headache, 30(4), 433-438. https://doi.org/10.1111/j.1468-2982.2009.01935.x

Skajaa, N., Szépligeti, S. K., Xue, F., Sørensen, H. T., Ehrenstein, V., Eisele, O., & Adelborg, K. (2019). Pregnancy, Birth, Neonatal, and Postnatal Neurological Outcomes After Pregnancy With Migraine. Headache. https://doi.org/10.1111/head.13536

 

  • Ciencia y Evidencia en Psicología

Pequeños descansos para aprender nuevas habilidades

  • 29/05/2019
  • Maria Fernanda Alonso

“La práctica hace al maestro.” Esta popular frase puede albergar gran sabiduría, pero parece quedarse corta. Por definición, la experiencia es la clave del aprendizaje, pero tomar pequeños descansos entre prácticas podría ser tan importante como la actividad misma. El cerebro fortalece los recuerdos a través de la consolidación, definida como resistencia a la interferencia (estabilización) o mejoras en el rendimiento entre el final de una sesión de práctica y el comienzo de la siguiente (Robertson, Pascual-Leone, & Chris Miall, 2004)

Muchas investigaciones han demostrado que tomar descansos es una parte importante del aprendizaje. Descansar inmediatamente después de adquirir nueva información parece mejorar la memoria de esa información (Dewar, Alber, Butler, Cowan, & Della Sala, 2012), por ejemplo, y dormir es particularmente importante para consolidar lo que acabamos de aprender, no sólo después de haber realizado sesiones de aprendizaje sino también entre sesiones (Mazza et al., 2016).

Un nuevo estudio (Bönstrup et al., 2019) ha encontrado que la mayor parte del avance mientras se aprende una tarea motora simple no se produce realmente cuando se practica, sino durante los descansos entre las sesiones de práctica.¡Aún los descansos minúsculos, de apenas unos segundos, son vitales para aprender nuevas habilidades! Para observar los beneficios de las pausas breves durante el aprendizaje, Marlene Bönstrup y sus colegas reclutaron a 27 participantes que debieron aprender una secuencia corta de pulsaciones de teclas. A lo largo de 36 intentos, cada uno de 10 segundos de duración, los participantes repetidamente tocaron la secuencia 4-1-3-2-4 lo más rápido que podían, usando cuatro dedos de su mano izquierda. Un período de descanso de 10 segundos separó cada prueba.



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Como era de esperar, la velocidad en que los voluntarios escribieron correctamente los números mejoró drásticamente durante las primeras pruebas y luego se estabilizó alrededor de la décimo primera ronda. Cuando la Dra. Bönstrup miró las ondas cerebrales de los voluntarios, observó algo interesante. «Noté que las ondas cerebrales de los participantes parecían cambiar mucho más durante los períodos de descanso que durante las sesiones de tipeo.” Esto le sirvió como puntapié para enfocarse con mayor detenimiento en el momento en que sucedía realmente el aprendizaje. “¿Fue durante la práctica o el descanso?,” se preguntó.

Los descansos desempeñaron un papel tan fundamental en el aprendizaje como la práctica misma

Al volver a analizar los datos, ella y sus colegas hicieron dos hallazgos clave. Primero, encontraron que el rendimiento de los voluntarios mejoró principalmente durante los descansos cortos, y no durante el tipeo. Las mejoras realizadas durante los períodos de descanso se sumaron a las avances generales que los voluntarios lograron ese día. Además, estos avances fueron mucho mayores que los observados después de que los voluntarios regresaron al día siguiente para intentarlo de nuevo, lo que sugiere que los descansos tempranos desempeñaron un papel tan fundamental en el aprendizaje como la práctica misma. En segundo lugar, al observar las ondas cerebrales, la Dra. Bönstrup encontró patrones de actividad que sugerían que los cerebros de los voluntarios estaban consolidando o solidificando los recuerdos durante los períodos de descanso.

Específicamente, encontraron que los cambios en el tamaño de las ondas cerebrales, llamados ritmos beta, se correlacionaban con las mejoras que los voluntarios hicieron durante los descansos. Un análisis adicional sugirió que los cambios en las oscilaciones beta ocurrieron principalmente en los hemisferios derechos de los cerebros de los voluntarios y en las redes neuronales que conectan los lóbulos frontal y parietal, los cuales ayudan a controlar la planificación de los movimientos. Estos cambios solo ocurrieron durante los descansos y fueron los únicos patrones de ondas cerebrales que se correlacionaron con el rendimiento.

Esto es consistente con los estudios anteriores que resaltan la importancia de los períodos de descanso en el aprendizaje, dicen los autores, aunque en una escala de tiempo mucho más corta. «Estos resultados apoyan la idea de que el cerebro consolida oportunamente los recuerdos anteriores cuando no está aprendiendo activamente», sostienen.

Las mejoras durante los descansos fueron más prominentes en las primeras pruebas de entrenamiento cuando la curva de aprendizaje era empinada y no hubo disminuciones en el rendimiento durante los períodos de práctica anteriores. El equipo también identificó una base neuronal para estos avances en los “recreos”. Mientras los participantes completaron la tarea, los investigadores midieron su actividad cerebral utilizando magnetoencefalografía (MEG).

Con esto, encontraron que la mejora en el rendimiento entre los ensayos estaba relacionada con la amplitud de las ondas beta (ondas cerebrales de entre 16 y 22Hz): las ondas beta de menor amplitud en la parte frontal del cerebro durante las pausas se asociaron con mayores mejoras en el rendimiento. La actividad de las ondas beta se reduce mientras las personas preparan y ejecutan movimientos, por lo que los autores sugieren que este patrón de actividad podría indicar algún tipo de reactivación y consolidación de la memoria relacionada con la tarea.

El estudio sólo observó el rendimiento cuando las personas aprendieron una tarea motora muy simple, y queda por ver si los descansos cortos son igual de importantes cuando se adquieren habilidades más complicadas. Pero incluso saber cómo potenciar los avances en funciones motoras básicas podría ser útil en situaciones como la medicina de rehabilitación.

El grupo de investigación espera que estos hallazgos puedan ayudar a pacientes en recuperación de los efectos paralizantes causados ​​por accidentes cerebrovasculares y otras lesiones neurológicas, pues podrían usarse para optimizar el tiempo y la configuración de los intervalos de descanso al implementar tratamientos de rehabilitación para ‘reaprender’ las habilidades perdidas. También sería interesante su implementación cuando una persona quiera, por ejemplo, aprender a tocar el piano.

Fuente: Research Digest

Referencias bibliográficas: Bönstrup, M., Iturrate, I., Thompson, R., Cruciani, G., Censor, N., & Cohen, L. G. (2019). A Rapid Form of Offline Consolidation in Skill Learning. Current Biology: CB, 29(8), 1346-1351.e4. https://doi.org/10.1016/j.cub.2019.02.049

Dewar, M., Alber, J., Butler, C., Cowan, N., & Della Sala, S. (2012). Brief wakeful resting boosts new memories over the long term. Psychological Science, 23(9), 955-960. https://doi.org/10.1177/0956797612441220

Mazza, S., Gerbier, E., Gustin, M.-P., Kasikci, Z., Koenig, O., Toppino, T. C., & Magnin, M. (2016). Relearn Faster and Retain Longer. Psychological Science, 27(10), 1321-1330. https://doi.org/10.1177/0956797616659930

Robertson, E. M., Pascual-Leone, A., & Chris Miall, R. (2004). Current concepts in procedural consolidation. Nature Reviews Neuroscience, Vol. 5, pp. 576-582. https://doi.org/10.1038/nrn1426

  • Ciencia y Evidencia en Psicología

Cibercondría: qué es, riesgos y tratamiento

  • 28/05/2019
  • Maria Fernanda Alonso

¿Podés imaginarte un poco de qué se tratará este artículo?

En nuestra defensa (la tuya y la mía), diré: el que nunca haya buscado en internet un posible diagnóstico para un conjunto de síntomas, que arroje la primera piedra.

Tener esta posibilidad a mano puede ser de ayuda y, con la misma facilidad, puede ser la herramienta más dañina, sobre todo si quien la utiliza sufre de ansiedad, o tiende a la ansiedad. ¿Por qué? Porque el buscador arrojará como diagnósticos para un dolor de cabeza tanto la carencia de descanso apropiado, como estrés o un tumor cerebral, a la vez que sugerirá posibles tratamiento que varían desde los remedios naturales (generalmente inocuos, pero no siempre), hasta el consumo de medicamentos que se extienden bajo prescripción médica. El problema empieza a aparecer cuando decidimos depositar mayor confianza en la información que recabamos de internet, que en nuestros médicos tratantes. De hecho, según un estudio, para el año 2007, los estadounidenses dijeron que tenían más fe en Internet que en los medios de comunicación masivos o en las agencias gubernamentales de salud» (Ye, 2011).



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Desarrollaremos este tema a partir de un estudio reciente cuyo enfoque de investigación fue el posible vínculo entre la autoestima y la cibercondría (Bajcar & Babiak, 2019).

Cibercondría

Para los hipocondríacos, cualquier síntoma físico puede indicar que se padece una grave enfermedad, incluso sin que existan signos médicos de un problema. Esto es conocido como ansiedad extrema por la salud. Para algunas personas, la búsqueda de información médica en Internet se asocia con una exacerbación de la ansiedad por la salud (Fergus, 2013). La «cibercondría» se refiere a la ansiedad excesiva por la salud generada por búsquedas online, dice el Dr. Kelli Harding, un psiquiatra que estudia la ansiedad por la salud. Este padecimiento repercute en el desarrollo del trabajo, las relaciones sociales y el funcionamiento general de la persona.

Muchos investigadores han estudiado el tema. Con base en ellos podemos señalar que la cibercondría se refiere a la búsqueda excesiva y repetida de información médica en Internet y puede considerarse como un uso problemático de Internet relacionado con la salud. Se asocia positivamente con la ansiedad por la salud y los síntomas obsesivo-compulsivos.

Además, las investigaciones sugieren que el uso excesivo o problemático de Internet, así como las preocupaciones de salud y las conductas compulsivas están presentes entre las personas con baja autoestima. Otra investigación (Bajcar & Babiak, 2019) encontró que la autoestima predijo directamente la cibercondría y que la ansiedad por la salud y los síntomas obsesivo-compulsivos mediaron paralelamente la relación entre la autoestima y la cibercondría. Estos hallazgos sugieren que la baja autoestima, la ansiedad por la salud y los síntomas obsesivo-compulsivos pueden considerarse factores de vulnerabilidad para la cibercondría. Además, el modelo de mediación inversa indicó que la cibercondría potencialmente predice la autoestima tanto directamente como a través de la ansiedad por la salud y los síntomas obsesivo-compulsivos (Bajcar & Babiak, 2019).

La literatura existente sugiere que la baja autoestima es un factor de riesgo para problemas relacionados con Internet, como pasar demasiado tiempo en línea (Armstrong, Phillips, & Saling, 2000), dificultad para controlar el uso de Internet (Widyanto & Griffiths, 2011), uso problemático de Internet ((Bulut Serin, 2011); (Durak & Senol-Durak, 2014); (Kim & Davis, 2009); (Mei, Yau, Chai, Guo, & Potenza, 2016)), uso patológico de Internet ((Niemz, Griffiths, & Banyard, 2005); (Sideli, La Cascia, Sartorio, & Tripoli, 2017)), e incluso adicción a Internet ((Tsai et al., 2009); (Aydm & San, 2011); (Bozoglan, Demirer, & Sahin, 2013); (Ivanova, 2013); (Błachnio, Przepiorka, Senol-Durak, Durak, & Sherstyuk, 2017)).

El metaanálisis más reciente ha resumido los datos sobre la asociación positiva de la ansiedad por la salud con la cibercondría (McMullan, Berle, Arnáez, & Starcevic, 2019). Según el modelo cognitivo-conductual de la ansiedad por la salud (Warwick & Salkovskis, 1990); (Cooper, Gregory, Walker, Lambe, & Salkovskis, 2017); (Paul M. Salkovskis & Warwick, 2001), las creencias disfuncionales generales sobre la salud, las evaluaciones erróneas de los síntomas no amenazantes como una amenaza grave para la salud y la intolerancia de cualquier incertidumbre relacionada con la salud puede provocar ansiedad sobre la salud, así como intentos de reducirla a través de la búsqueda de seguridad, es decir, la búsqueda de la seguridad de una buena salud (J. S. Abramowitz & Braddock, 2006). En el marco del modelo cognitivo-conductual, la ansiedad por la salud puede llevar a la cibercondría como una forma de comportamiento de búsqueda de seguridad (Fergus, 2014); (Fergus & Dolan, 2014). Por lo tanto, los individuos con mayor angustia y preocupación por la salud también pueden buscar de manera intensiva y repetida información relacionada con la salud en Internet (Hadjistavropoulos, Craig, & Hadjistavropoulos, 1998) para obtener tranquilidad y comodidad psicológica (Baumgartner & Hartmann, 2011); (Muse, McManus, Leung, Meghreblian, & Williams, 2012); (Singh, Fox, & Brown, 2016). Sin embargo, la tranquilidad que se brinda es probablemente temporal, lo que incita a una persona a buscar más información médica, lo que, en efecto, puede reforzar el temor a la enfermedad (Kobori & Salkovskis, 2013); (P. M. Salkovskis & Warwick, 2001). Esto sugiere que la actividad online excesiva relacionada con la salud, es decir, la cibercondría podría desempeñar un papel en resultados contraproducentes como la exacerbación de la ansiedad por la salud (Starcevic & Berle, 2013); (Poel, te Poel, Baumgartner, Hartmann, & Tanis, 2016); (Muse et al., 2012); (Singh et al., 2016); (Fergus, 2013).

Starcevic & Berle, (2013) sugieren que los síntomas obsesivo-compulsivos también son relevantes para la cibercondría. Varios estudios empíricos han apoyado esta afirmación con resultados que muestran correlaciones moderadas entre la ciberondría y los síntomas obsesivo-compulsivos (Fergus, 2014); (Fergus & Russell, 2016); (Norr, Allan, Boffa, Raines, & Schmidt, 2015); (Bajcar, Babiak, & Olchowska-Kotala, 2019).

Las personas que experimentan pensamientos obsesivos relacionados con la salud, como sobreestimar los efectos nocivos de síntomas benignos, temer una enfermedad grave y experimentar sentimientos de urgencia por lograr tranquilidad relacionada con la salud, pueden mostrar una tendencia hacia la cibercondría (Norr et al., 2015); (Fergus, 2014). Es probable que las personas con síntomas obsesivo-compulsivos busquen excesivamente contenido médico con el objetivo de reducir la gravedad de los pensamientos intrusivos y no deseados, y tratar de prevenir una enfermedad anticipada. Dichos comportamientos pueden interpretarse como intentos de obtener datos relacionados con la salud supuestamente reconfortantes para recuperar un sentido de seguridad y control (Halldorsson & Salkovskis, 2017); (Norr et al., 2015); (Fergus & Russell, 2016).

Tanto la ansiedad por la salud como los síntomas obsesivos-compulsivos a veces se denominan «trastornos crónicos de control» (Starčević, 1990) p. 346), lo que denota principalmente la dificultad de lidiar con la ambigüedad y la incertidumbre (Deacon & Abramowitz, 2008). Algunos autores afirman que la ansiedad por la salud y los síntomas obsesivo-compulsivos se derivan del patrón compartido de pensamientos intrusivos y conductas repetitivas y con propósito, y pertenecen a un amplio espectro de trastornos obsesivo-compulsivos (J. Abramowitz, 2005); (J. S. Abramowitz & Braddock, 2006); (Solem et al., 2015).

Otros, sin embargo, indican que los dos constructos son distintos debido a las diferencias en la evaluación de los pensamientos obsesivos y las reacciones de comportamiento ante su aparición (Starcevic, 2014); (Hedman et al., 2017). Las personas ansiosas por la salud tienden a tratar sus síntomas como auténticamente amenazantes y aceptan como relevantes sus pensamientos sobre la enfermedad. A menudo experimentan la urgencia de buscar una consulta médica para tranquilizarse sobre su buena salud o para curar la presunta enfermedad. En contraste, los síntomas obsesivo-compulsivos a menudo se perciben como infundados y sin sentido y, a veces, son resistidos por el individuo ((Starcevic, 2014), para revisión).

Investigaciones recientes sobre la cibercondría indicaron correlaciones desde moderadas a relativamente altas entre la ansiedad por la salud, los síntomas obsesivo-compulsivos y la cibercondría, sin embargo, todavía existe una cantidad significativa de diferencias no superpuestas entre estas construcciones (Fergus & Russell, 2016); (Norr et al., 2015); (Mathes, Norr, Allan, Albanese, & Schmidt, 2018).

Riesgos de la cibercondría

Los motores de búsqueda web tienen el potencial de aumentar las preocupaciones médicas. Un estudio mostró que la escalada está asociada con la cantidad y distribución de contenido médico visto por los usuarios, la presencia de terminología en las páginas visitadas y la predisposición de los usuarios a aumentar sus preocupaciones en lugar de buscar explicaciones más razonables para las dolencias. También demostró la persistencia de la ansiedad posterior a la sesión después de las conductas en cuestión (White & Horvitz, 2009).

Además de inducir a la ansiedad, la cibercondría puede resultar realmente onerosa si quien la presenta exige que se le realicen pruebas médicas costosas, como resonancias magnéticas y tomografías computarizadas, u otras que también las ponen en riesgo de otras afecciones. A su vez, los cibercondríacos podrían estar más inclinados a comprar tratamientos falsos online, agrega Harding. «Es molesta la cantidad de sitios web que ofrecen datos y terminan vendiendo cosas. Quieren que tengas miedo. No existe una regulación al respecto.”

Por otro lado, estudios han señalado que herramientas como las aplicaciones de smartphones utilizadas para evaluar el perfil de riesgo de los lunares mostraron una gran variabilidad en su capacidad para diagnosticar con precisión el melanoma (Rat et al., 2018). El hecho de que tales aplicaciones sean a menudo gratuitas hace que las personas de bajos ingresos se encuentren en una desventaja particular, ya que probablemente sustituyan la visita a un médico por una aplicación que brinda información incorrecta.

Cómo evitar la cibercondría

Si sos propenso a la ansiedad por la salud, hay ciertas cosas que podés hacer para evitar la cibercondría.

  • Solicitá un turno con tu médico. Si estás algo obsesionado durante más de un par de días, hacé una cita con el médico. «Los médicos son muy buenos para saber cuándo algo es muy serio», dice Harding. «Hay una gran área gris de dolores y molestias de los que nunca conoceremos realmente la causa», y ahí es donde los ciberdondríacos se meten en problemas. Tené presente que los síntomas comunes son comunes, que no todos los dolores de cabeza son tumores cerebrales.
  • Agendá citas regulares para visitar a los médicos en intervalos frecuentes. Llevale todas tus inquietudes al médico. Y si decidís hacer algún tipo de prueba genética para enfermedades, hacelo con un médico, agrega Harding. De lo contrario, la incertidumbre generada por la información recolectada en internet sólo alimentará la ansiedad por la salud.
  • Silenciá todos los comerciales sobre medicamentos. Las compañías farmacéuticas están legalmente obligadas a enumerar todos los posibles efectos secundarios de los medicamentos, pero cuando se transmiten por televisión, o como propaganda en videos de Youtube, pueden producir ansiedad, dice Harding, y agrega que tomar conciencia de lo que te pone ansioso es la mitad de la batalla para superar la cibercondría.
  • Desvinculate del mundo virtual. La salud comprende una cadena continua de conductas que llevan a un estilo de vida saludable, y por eso es importante mantenerse al tanto de la información sobre el asunto, pero con tanta información proveniente de fuentes tan diversas podemos frustrarnos u obsesionarnos. La preocupación constante por la salud es agotadora, y nada de esto es de ayuda pues el valor de la información que recabemos dependerá de la seriedad de la fuente de la cual la obtengamos. Harding nos anima a dejar celulares y computadoras de lado y a que salgamos a vivir la vida. “La distracción es a menudo algo maravilloso cuando se trata de evitar problemas de salud».
  • Quédate con sitios web creíbles. Evita los blogs y los grupos de apoyo online, dice Harding, que son excelentes para las personas recién diagnosticadas, pero terribles para los demás. En su lugar, consultá sitios web confiables, como los que terminan en .gov y .edu. Lo primero que deberías mirar son los desarrollos en investigación científica, ya sea que tengas un diagnóstico médico o que necesites consejos para la salud diaria. Pero tené en cuenta que la ciencia no es perfecta, y preparate para encontrar hallazgos revisados, contradictorios e incluso retractados. Un ejemplo icónico de esto es el de aquel estudio que supuestamente encontró un vínculo entre el autismo y las vacunas, y que luego de ser investigado se encontró que sus resultados fueron fraudulentos, que hubieron transgresiones éticas, falsificación de datos e intereses ocultos. Esto fue seguido de las pertinentes acciones legales y la retractación de quienes habían apoyodo los resultados fraudulentos. Sin embargo, aquella información sin sustento científico, aún hoy repercute nocivamente con los movimientos antivacunas a nivel mundial.
  • Volvé a las bases. Los pilares de la salud son comer saludablemente y mantenerse activo. En general, podemos mantenernos saludables incorporando estos hábitos. Si estás lidiando con alguna enfermedad crónica es particularmente importante que, más allá de las investigaciones que decidas hacer por tu cuenta, evalúes y tomes cualquier decisión sobre tratamientos con tu médico.
  • Si realmente tenés cibercondría, considerá la terapia cognitiva conductual y la interconsulta con un psiquiatra para evaluar si resulta apropiado incorporar medicación que ayude a superar la ansiedad y las tendencias obsesivas compulsivas, sugiere Harding.

Tratamiento de la cibercondría

En la actualidad no existen terapias específicas para la cibercondría. En el contexto de un modelo cognitivo-conductual, los hallazgos del estudio citado en este título sobre relaciones entre la autoestima, la ansiedad por la salud, los síntomas obsesivo-compulsivos y la cibercondría dan luz sobre un curso para posibles intervenciones. La cibercondría abarca procesos cognitivos, como los pensamientos obsesivos sobre la salud y las conductas disfuncionales, como el uso perjudicial de internet relacionado con la salud, pueden tener consecuencias negativas en diferentes áreas de la vida de un individuo (Davis, 2001). Dado que la terapia cognitivo-conductual (TCC) es una intervención óptima para los correlatos de la cibercondría, es decir, baja autoestima (Fennell, 1997); (Waite, McManus, & Shafran, 2012), ansiedad por la salud (Olatunji et al., 2014); (Cooper et al., 2017), problemas obsesivo-compulsivos (Olatunji, Davis, Powers, & Smits, 2013), y el uso patológico de Internet (Davis, 2001); (Spada, 2014), es posible que las intervenciones de TCC adecuadas para estos trastornos también puedan generar resultados positivos para la cibercondría. Es probable que, mientras se trabaja para mejorar la autoestima, el riesgo de otros trastornos psiquiátricos se reduzca. En consecuencia, una mayor autoestima podría estar relacionada con una menor cibercondría, tanto directa como indirectamente, mediante la reducción de la ansiedad general por la salud y los problemas obsesivo-compulsivos.

Al igual que en los hallazgos anteriores, los resultados actuales implican una comorbilidad de disfunciones asociadas con la cibercondria. Posiblemente, la cibercondría junto con otros trastornos podrían formar un síndrome psicopatológico más amplio. El tratamiento de estas disfunciones potencialmente evitará la aparición de la cibercondría. El tratamiento individualizado de TCC podría facilitar una recuperación más rápida.

Con base en la relación inversa entre la cibercondría y la autoestima, es posible que las intervenciones de TCC dirigidas a los problemas relacionados con Internet puedan aportar resultados deseados en el tratamiento de la cibercondría como un tipo de uso excesivo de Internet (Fergus & Dolan, 2014). Hacer frente a las búsquedas excesivas en Internet de información relacionada con la salud puede ser beneficioso para mejorar la autoestima y podría reducir posibles implicaciones clínicas de la cibercondría (es decir, la ansiedad por la salud y los síntomas obsesivo-compulsivos).

La relación inversa entre la cibercondría y la autoestima también implica que tomar medidas preventivas contra la primera puede ayudar a reducir el riesgo de diversos trastornos mentales. Desde la perspectiva individual, mejorar la alfabetización en salud electrónica de los usuarios sería práctico y ventajoso para todos y cada uno de los usuarios de Internet (Norman & Skinner, 2006). Los proveedores de servicios de salud online podrían desempeñar un papel especial en la prevención de la cibercondría al facilitar la comprensión de los usuarios sobre el contenido, avisar sobre fuentes no confiables y regular la provisión de información de salud en internet. En una escala que abarque todo el sistema, la creación de servicios profesionales de salud online administrados por profesionales médicos, miembros del sistema de atención médica y agencias gubernamentales también podría prevenir la aparición de la cibercondría (Robertson, Polonsky, & McQuilken, 2014).

Se necesita más investigación para aclarar qué trastornos psicológicos contribuyen a la aparición y el mantenimiento de la cibercondría. Antes de determinar la dirección de la terapia para la cibercondría, es necesario determinar la gravedad de sus síntomas. También se debe controlar el diagnóstico de variables no psicológicas, como la edad, el sexo, la accesibilidad a Internet y el tiempo dedicado a las actividades en línea. Finalmente, se deben monitorear los cambios tanto en el contenido de Internet como en la alfabetización de Internet, ya que estos pueden exacerbar los comportamientos cibercondríacos.

Fuentes: Greatist; USNews

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  • Salud Mental y Tratamientos

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Fuente: Psicología Científica



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  • Análisis
  • Ciencia y Evidencia en Psicología

Leonardo da Vinci: ¿un genio con TDAH?

  • 27/05/2019
  • Equipo de Redacción

Han pasado quinientos años desde la muerte de Leonardo da Vinci, y se ha escrito mucho sobre él. Leonardo, el artista, el científico, el arquitecto, el inventor, cuyo genio ha sido percibido como el encanto de un enigma insondable. Pero algunas de las palabras escritas sobre Leonardo después de su muerte en Clos-Lucé en Francia el 2 de mayo de 1519, apuntan a un hombre muy diferente al que muchos de nosotros sabemos. Según su primer biógrafo Giorgio Vasari, Leonardo murió lamentándose «de haber ofendido a Dios y a la humanidad por no haber trabajado en su arte como debería haberlo hecho» (Vasari, 1996; Nicholl, 2004; Vecce, 2006).

La historia de da Vinci es una de una paradoja: una gran mente que ha recorrido las maravillas de la anatomía, la filosofía natural y el arte, pero que tampoco logró completar tantos proyectos (Freud, 1922; Kemp, 2006). El excesivo tiempo dedicado a la planificación de ideas y la falta de perseverancia parecen haber sido particularmente perjudiciales para finalizar las tareas que al principio habían atraído su entusiasmo. La lucha crónica de Leonardo para convertir su extraordinaria creatividad en resultados concretos y cumplir compromisos fue proverbial en su vida y presente desde la primera infancia:

“… en el aprendizaje y en los rudimentos de las cartas, habría tenido una gran competencia si no hubiera sido tan variable e inestable, porque se dispuso a aprender muchas cosas y luego, después de haberlas comenzado, las abandonó” (Vasari, 1996)



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Leonardo murió lamentándose «de haber ofendido a Dios y a la humanidad por no haber trabajado en su arte como debería haberlo hecho»

Sus dificultades para concentrarse se hicieron aún más evidentes más tarde en la adolescencia, cuando se mudó de la pequeña aldea de Vinci a Florencia en el taller de Andrea Verrocchio. Verrocchio, un verdadero hombre del Renacimiento, compartió la amplia gama de intereses y el talento ecléctico de Leonardo. Pero Leonardo carecía del rápido poder de ejecución de su maestro y sus habilidades organizativas. Las primeras obras encargadas importantes de Leonardo, algunas obtenidas a través de las conexiones de su padre, se prepararon extensamente pero se abandonaron rápidamente. Otras obras programadas nunca fueron iniciadas. La lucha de Leonardo para trabajar de forma independiente como artista también podría explicar su prolongada estadía en el taller de Verrocchio, que duró hasta los 26 años, cuando probablemente logró establecer su propio estudio independiente en Florencia. El 10 de enero de 1478 recibió su primer encargo registrado como pintor independiente, un gran retablo para colgar en la Capilla de San Bernardo. Para esta prestigiosa comisión obtuvo un anticipo en efectivo de 25 florines, pero nunca entregó el trabajo (Nicholl, 2004). Probablemente, dada su poca fiabilidad para terminar los proyectos encargados, no obtuvo mucho éxito como pintor independiente y, a diferencia de otros artistas del taller de Verrocchio que fueron trasladados a trabajar en la Roma papal, fue enviado por Lorenzo de ‘Medici a Milán como Un músico (Kemp, 2006). No sabemos en qué estado de ánimo Leonardo se fue de Florencia, pero es posible que sintiera «una sensación de fracaso y frustración: sus pinturas sin terminar, su estilo de vida controvertido, su reputación una mezcla de brillantez y dificultad» (Nicholl, 2004). A modo de comparación, a la misma edad, Rafael ya había realizado más de 80 pinturas, incluidos grandes frescos en el Vaticano.

Feto en el útero. Cortesía de Apic / Contributor / Hulton Archive / Getty Images.

En la corte de Ludovico il Moro, el futuro duque de Milán, asombró a sus clientes con las ideas y proyectos más ambiciosos, pero no logró ganar su confianza en su capacidad para cumplir a tiempo. Incluso cuando a Leonardo finalmente se le encargó el importante proyecto de construir una estatua de bronce del padre de Ludovico, el futuro Duque le preguntó a su aliado Lorenzo il Magnifico si podía indicar un artista florentino más apto para el proyecto porque dudaba de la capacidad de Leonardo para llevarlo a cabo. finalización ‘(Vecce, 2006).

El novelista Matteo Bandello, un contemporáneo que observó a Leonardo trabajando en la Última Cena (Fig. 1), identificó claramente su inestabilidad de temperamento y sus caóticas habilidades organizativas:

«También lo he visto, mientras se lo llevaba el capricho o el capricho, partió al mediodía, … desde el Corte Vecchio, donde estaba trabajando en el modelo de arcilla del gran caballo, y fue directo al Grazie y allí monte en el andamio y levante su pincel y dé uno o dos toques a una de las figuras y de pronto se rinda y se vaya otra vez «(Nicholl, 2004; Vecce, 2006).

Tres de las obras maestras de Leonardo.Top: La última cena fue completada por Leonardo en 3 años, pero el uso de una técnica de frescos incorrecta llevó al rápido deterioro de la obra. Abajo a la izquierda: Leonardo trabajó intermitentemente en Mona Lisa durante casi 16 años. Abajo a la derecha: la pintura inacabada de San Jerónimo en el desierto.
Tres de las obras maestras de Leonardo.Top: La última cena fue completada por Leonardo en 3 años, pero el uso de una técnica de frescos incorrecta llevó al rápido deterioro de la obra. Abajo a la izquierda: Leonardo trabajó intermitentemente en Mona Lisa durante casi 16 años. Abajo a la derecha: la pintura inacabada de San Jerónimo en el desierto.

 

Leonardo fue capaz de contemplar o estudiar de forma sostenida, pero esto a menudo lo hizo a costa de perder la pista de la progresión general del proyecto, una implacable postergación. Su falta de fiabilidad era tan conocida que el duque de Milán deseaba que Leonardo firmara un contrato que lo obligara a terminar una obra «dentro del período estipulado» (Kemp, 2006). Cuando el duque capituló en 1499 y se separó de Da Vinci después de casi 20 años de servicio, Leonardo admitió en su diario que “para él ninguno de sus proyectos se había terminado» (Vecce, 2006).

Quizás el lado más perturbador de su mente fue una curiosidad voraz, que impulsó su creatividad y lo distrajo de mantener un camino firme hasta el final. Consciente de sus límites, Leonardo trató de trabajar alrededor de ellos, a menudo con consecuencias desafortunadas. Su renuencia a trabajar en pintura al fresco, por ejemplo, que requiere una ejecución rápida antes de que se seque el yeso, lo llevó a experimentos arriesgados en la búsqueda de nuevos pigmentos de aceite y técnicas de barniz que pusieron en peligro la Última Cena y finalmente destruyeron la Battaglia de Anghiari en Florencia. Tal era el capricho de Leonardo que a menudo se pedía a otros artistas que trabajaran en pinturas que se le encargaron por primera vez.

Quizás el lado más perturbador de su mente fue una curiosidad voraz, que impulsó su creatividad y lo distrajo de mantener un camino firme hasta el final

Dejando de lado su propia inventiva, Leonardo trató de asociarse con otros que podrían ayudarlo. En el invierno de 1510–11, trabajó con Marcantonio Della Torre, profesor de la Universidad de Pavía, para crear un tratado sobre anatomía. Juntos estudiaron el cuerpo humano y realizaron disecciones que Leonardo describió bellamente. Este fue el único período en su carrera anatómica durante el cual Leonardo «logró un equilibrio entre el detalle y la cobertura». Fue como «si el anatomista profesional que estaba parado en su hombro pudiera salvar a Leonardo de su costumbre de profundizar aún más en los detalles de un escenario físico» (Clayton y Philo, 2012). Pero en cuestión de meses, Della Torre murió de peste. Solo, Leonardo nunca logró organizar su gran número de dibujos anatómicos en material coherente para su publicación. En sus cuadernos, anotó de manera desalentadora: «Es más fácil resistirse al principio que al final».

El hombre de vitruvio. Cortesía de Universal History Archive / Contributor / Universal Images Group / Getty Images.

 

Leonardo usó su ingenio para enmascarar sus defectos y hablar para salir de los problemas o la vergüenza causados ​​por su comportamiento. Mientras trabajaba en la Última Cena, por ejemplo, fue sometido a las continuas molestias del superintendente anterior a Santa Maria delle Grazie, quien finalmente solicitó la intervención del duque de Milán. Invocado por el duque, Leonardo rápidamente justificó su retraso con la dificultad de encontrar los modelos de los dos últimos personajes, Jesús y Judas. Para Judas, explicó, había buscado en vano las cárceles de Milán en busca del sinvergüenza perfecto. No se pudo encontrar nada y admitió que, al final, si no podía encontrar un modelo mejor para el apóstol cruel que traicionó a nuestro Señor, tendría que usar la cara del anterior importunado y sin tacto. El duque se echó a reír y Leonardo volvió a trabajar en su tiempo libre.

Otros perdonaban menos su comportamiento. El Papa Leone X empleó a Leonardo en 1514, pero la frustración se apoderó del corazón del Papa cuando notó la incapacidad de Leonardo para cumplir con sus deberes. En su desesperación, Leone X exclamó: «¡Ay! este hombre nunca hará nada, porque comienza pensando en el final del trabajo, antes del comienzo «(Vasari, 1996). La presencia de Leonardo en el Vaticano duró menos de 3 años. A diferencia de Miguel Ángel y Rafael, no dejó rastro de su pasaje en Roma. Con 64 años y sin lugar a donde ir, Leonardo debe haberse sentido aliviado al recibir una oferta del rey de Francia. Se llevó consigo todos sus dibujos y una pintura inacabada, Mona Lisa (Fig. 1), que continuó ajustando hasta que la muerte finalmente separó al maestro de su obra maestra.

¿Falta de disciplina, temperamento artístico o trastorno por déficit de atención?

Las excepcionales habilidades artísticas de Leonardo da Vinci fueron indiscutibles incluso por sus detractores. Sin embargo, sería históricamente incorrecto aceptar el relato biográfico elaborado por los autores románticos de Leonardo como un genio solitario que no fue apreciado por sus contemporáneos debido a que sus ideas estaban demasiado avanzadas para su época. Sus biógrafos más atentos siempre habían indicado que Leonardo se esforzaba por complacer a los clientes que inevitablemente se quedaban con la decepción de que se les negara la posesión de una expresión concreta de su talento. Sus contemporáneos nunca podrían entender o perdonar su falta de disciplina, no su mente visionaria. En su ensayo psicoanalítico sobre Leonardo, Freud vio lo que definió como la «esterilidad artística» de Leonardo como una represión sexual infantil causada por «su nacimiento ilegítimo y el mimo de su madre» (Freud, 1922). Pero la neuropsiquiatría moderna podría tener una explicación diferente.

Disecciones de brazos y cara. Cortesía de Print Collector / Contributor / Hulton Fine Art Collection / Getty Images.

 

¿Pudo Leonardo haber tenido un trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH)? El TDAH es un trastorno del comportamiento de la infancia altamente hereditario caracterizado por la procrastinación continua, la incapacidad para completar las tareas, la confusión mental y la inquietud del cuerpo y la mente (Demontis et al., 2018). En los tiempos modernos, un diagnóstico de ADHD prescribe el nivel de habilidad intelectual y es cada vez más reconocido entre los estudiantes universitarios y adultos con carreras exitosas (Palmini, 2008). Podría decirse que, si se canalizan positivamente, algunas características del TDAH pueden tener una ventaja: vagar por la mente puede alimentar la creatividad y la originalidad; La inquietud puede pasar a buscar la novedad y la acción por el cambio.

Sugerimos que la documentación histórica respalda las dificultades de Leonardo con la dilación y el manejo del tiempo como características del TDAH, una condición que podría explicar los aspectos de su temperamento y la extraña forma de su genio disipativo. Las dificultades de Leonardo fueron generalizadas desde la infancia, lo cual es una característica fundamental de la condición. También hay evidencia incuestionable de que Leonardo estaba constantemente en movimiento, manteniéndose ocupado con hacer algo pero a menudo saltando de tarea en tarea. Como muchos de los que sufren de TDAH, dormía muy poco y trabajaba continuamente día y noche alternando ciclos rápidos de siestas cortas y despertando.

La documentación histórica respalda las dificultades de Leonardo con la dilación y el manejo del tiempo como características del TDAH, una condición que podría explicar los aspectos de su temperamento y la extraña forma de su genio disipativo

A perpetual motion machine using a water screw. Courtesy of DEA/VENERANDA BIBLIOTECA AMBROSIANA/Da Vinci Codex Atlanticus/Getty Images.
Una máquina voladora, probable para el teatro. Cortesía de Claudio Divizia / Hemera / Getty Images Plus.

 

En la neurociencia moderna, se piensa que los problemas con las funciones ejecutivas subyacen la postergación y la concentración disminuida. Los estudios de neuroimagen en niños y adolescentes con TDAH indican diferencias en las regiones del lóbulo frontal y los ganglios basales responsables de las funciones ejecutivas y el control de los impulsos. Aproximadamente dos tercios de los niños con TDAH continúan teniendo dificultades de comportamiento en la edad adulta, que pueden mejorarse con la terapia (Palmini, 2008). Hay suficiente evidencia indirecta para argumentar que el cerebro y las funciones cognitivas de Leonardo se organizaron de manera diferente en comparación con la mayoría de la población. Era zurdo y tenía 65 años, sufrió un grave derrame cerebral en el hemisferio izquierdo, que dejó intactas sus habilidades lingüísticas. Estas observaciones clínicas indican claramente un predominio inverso del hemisferio derecho para el lenguaje en el cerebro de Leonardo, que se encuentra en \<5% de la población general. Además, sus cuadernos muestran errores de escritura y escritura ortográfica que se han considerado sugerentes de dislexia. El predominio hemisférico atípico, el zurdo y la dislexia son más frecuentes en niños con afecciones del desarrollo neurológico, incluido el TDAH. > Sus cuadernos muestran errores de escritura y escritura ortográfica que se han considerado sugerentes de dislexia

¿Y cuál es el posible vínculo entre zurdos, dislexia, TDAH y habilidades artísticas? Algunos estudios epidemiológicos indican que los estudiantes zurdos son más propensos a estudiar música y artes visuales, mientras que los disléxicos a menudo tienen un desempeño superior en tareas de discriminación visuoespacial y memoria visual (Swanson, 1984). Además, no solo la dislexia es más frecuente entre los estudiantes de arte que en otras áreas, sino que los estudiantes de arte con dislexia tienen imágenes mentales superiores y visualización mental en 3D de objetos que los estudiantes de arte sin dislexia (Winner y Casey, 1993). Las habilidades en la rotación mental en 3D son una habilidad importante en aquellos con pareidolia, una capacidad para reconocer figuras en el entorno circundante, un método que Leonardo utilizó para aumentar su inspiración visual: contemplaría durante horas la forma cambiante de las nubes. En las etapas iniciales del proceso creativo, las personas con TDAH pueden verse facilitadas por la perturbación de la mente y la impulsividad. Sin embargo, los mismos rasgos pueden dificultar la progresión una vez que la novedad del proyecto se desvanece y el interés cambia a otra cosa. La mayoría de los adultos con TDAH se ven afectados negativamente por sus síntomas, incluso si están dotados de gran talento.

Su comportamiento afectó negativamente su carrera y sus relaciones hasta el punto de que es difícil encontrar entre sus contemporáneos a alguien que no haya comentado sobre su falta de fiabilidad

Un gran metanálisis reciente muestra que el TDAH tiene una fuerte base hereditaria (Demontis et al., 2018). El hallazgo de la misma asociación genética en quienes en la población general muestran rasgos de TDAH y comportamiento de riesgo sin un diagnóstico sugiere que el TDAH se encuentra en el extremo de una serie de síntomas. Dentro de este continuo, la línea entre aquellos con y sin diagnóstico clínico a menudo se marca de acuerdo con el impacto de los síntomas en la calidad de vida y el bienestar mental de los afectados. La falta de indicadores biológicos objetivos del TDAH a menudo dificulta el trazado de esa línea, ya que su impacto negativo depende también de una serie de circunstancias personales, familiares, profesionales y sociales, que a menudo tienen un efecto protector o perjudicial. Hay evidencia de que Leonardo a menudo carecía de dinero y pagaba mucho menos que otros artistas de su calibre. Su comportamiento afectó negativamente su carrera y sus relaciones hasta el punto de que es difícil encontrar entre sus contemporáneos a alguien que no haya comentado sobre su falta de fiabilidad. Fue empleado a menudo en roles modestos, como el organizador del partido, y muchas de sus ideas de arquitectura e ingeniería fueron desestimadas por ser demasiado poco realistas y poco prácticas.

Sin lugar a dudas, Leonardo logró más de lo que cualquier otro ser humano podría soñar en una vida, pero uno se pregunta cuál habría sido el impacto de su trabajo en la historia si hubiera logrado aplicarse más consistentemente a su arte y diseminar efectivamente sus intuiciones y descubrimientos.

Además de la belleza de su arte y el poder fascinante de sus observaciones, en el 500 aniversario de su muerte, Leonardo da Vinci también debe ser recordado por su capacidad de recuperación. Las dificultades relacionadas con su extraordinaria mente errante le causaron un profundo pesar, pero no le impidieron aprender y explorar las maravillas de la vida y la naturaleza humanas.

Artículo publicado en Brain, Journal of Neurology por Marco Catani y Paolo Mazzarello y cedido para su publicación en Psyciencia.com

Referencia del artículo completo: Marco Catani, Paolo Mazzarello, Leonardo da Vinci: a genius driven to distraction, Brain, , awz131, https://doi.org/10.1093/brain/awz131

  • Ciencia y Evidencia en Psicología

¿Cómo afectan a la cognición la obesidad y la resistencia a la insulina? Nuevos hallazgos

  • 27/05/2019
  • Maria Fernanda Alonso

Científicos informan que la obesidad puede romper nuestra barrera protectora hematoencefálica y causar problemas con el aprendizaje y la memoria (Yamamoto, Guo, Hernandez, & Stranahan, 2019).

Las personas que tienen obesidad y diabetes tienen tasas más altas de deterioro cognitivo a medida que envejecen y la mayoría de los cambios estructurales relacionados se encuentran en el hipocampo, un centro de aprendizaje y memoria. La grasa es una fuente de inflamación y existe evidencia de que reducir la inflamación crónica en el cerebro ayuda a prevenir la pérdida de memoria relacionada con la obesidad.

«Sabemos que la obesidad y la resistencia a la insulina rompen la barrera hematoencefálica en modelos humanos y animales, pero exactamente cómo sigue siendo un misterio», dice la Dra. Alexis M. Stranahan, neurocientífica del Departamento de Neurociencia y Medicina Regenerativa de la Facultad de Medicina de Georgia en la Universidad de Augusta, y autora del estudio.



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¿Qué se sabía?

En el cerebro, la adenosina es un neurotransmisor que nos ayuda a dormir y a regular nuestra presión arterial; en el cuerpo también es un componente del combustible celular trifosfato de adenosina, o ATP. La adenosina también activa los receptores Adora1a y Adora2a en las células endoteliales, que normalmente apoyan relaciones saludables entre la actividad cerebral y el flujo sanguíneo.

Los problemas surgen con la activación crónica, particularmente en el cerebro, que es lo que sucede con la obesidad, dice Stranahan. Sabían que la activación crónica del receptor Adora2a en las células endoteliales que bordean esta importante barrera en nuestro cerebro puede permitir que distintos agentes de la sangre ingresen al cerebro y afecten la función de las neuronas.

El concepto de que la obesidad podría afectar la barrera hematoencefálica se detectó en las personas hace una docena de años, cuando investigadores suecos encontraron que los individuos obesos tenían niveles más altos del gran anticuerpo inmunoglobulina G en su líquido cefalorraquídeo, cuando debería haber estado en su sangre. Fue un hallazgo importante que sugirió que la obesidad y la diabetes podrían permitir que pasen de la sangre al cerebro cosas que no deberían, dice Stranahan. Los estudios en animales confirmaron que estaba sucediendo, pero, nuevamente, pocos estudios han analizado por qué, dice Stranahan.

Los vasos sanguíneos salen del cuerpo y se vuelven extremadamente pequeños y frágiles a medida que se sumergen en el cerebro. Mientras que los vasos sanguíneos que suministran áreas como nuestros brazos y corazón están destinados a ser más porosos para que puedan compartir mucha glucosa, oxígeno y células inmunitarias y otras cosas que el cuerpo necesita, se supone que la vasculatura en el cerebro es mucho más restrictiva, dejando que pocas cosas pasen comparativamente.

La autora señala que el cerebro es un gran consumidor, que absorbe entre el 70 y el 80 por ciento de nuestro oxígeno y glucosa, pero también es más frágil que otros tejidos, muy sensible incluso a nuestras propias células inmunitarias.

Nueva perspectiva

Este equipo de investigación ha demostrado que cuando bloquean Adora2a en un modelo de obesidad inducida por la dieta, se mantiene esta importante función de barrera.

En un modelo que imita lo que nos sucede a algunos de nosotros, ratones jóvenes alimentados con una dieta alta en grasas engordaron en dos semanas, y a las 16 semanas aumentaron la concentración de glucosa en ayunas e insulina, todo lo cual indica que la diabetes está en su futuro.

En la vasculatura del hipocampo, los investigadores vieron que la obesidad aumentaba primero la permeabilidad de la barrera hematoencefálica a moléculas pequeñas como el fluoróforo, la fluoresceína sódica o el NaF1. La resistencia a la insulina inducida por la dieta aumentó esa permeabilidad de modo que una molécula más grande, Evans Blue, que tiene una alta afinidad por la albúmina sérica, la proteína más abundante en la sangre, también pudo pasar.

Cuando miraron con microscopía electrónica, vieron un paisaje cambiado. La diabetes resultante promovió el encogimiento de las uniones generalmente apretadas entre las células endoteliales y los agujeros reales en esas células. También vieron células musculares llamadas pericitos que se envuelven alrededor del exterior de los vasos sanguíneos microscópicos en el cerebro para darles más fuerza y ​​ayudar a mover la sangre, comienzan a perder su agarre, por lo que los vasos sanguíneos comienzan a perder su tono y se vuelven disfuncionales e inflamados. Se sabe que los pericitos expresan niveles más altos de Adora2a que las células endoteliales, señala Stranahan. La dieta alta en grasas también promovió la hinchazón de las protuberancias en los astrocitos llamados pies terminales, que también forman parte de la barrera hematoencefálica. Los astrocitos son células del cerebro que normalmente nutren las neuronas, pero el estado patológico de la obesidad también alteró su forma y apoyo.

La angiogénesis, el intento natural del cuerpo de producir más vasos sanguíneos (aunque por lo general son disfuncionales y con fugas), se dio en respuesta al deterioro del flujo de sangre y oxígeno en el hipocampo a las 12 semanas, y luego de una inspección minuciosa, se detectó que los vasos sanguíneos estaban inflamados.

Cuando dieron un medicamento para bloquear temporalmente Adora2a, también se bloquearon los problemas con la permeabilidad de la barrera. Queda por verse si eso podría funcionar en humanos y a largo plazo como una forma de evitar el deterioro cognitivo en personas obesas, dice Stranahan.

Luego, desarrollaron un ratón al que podían eliminarle selectivamente Adora2a de las células endoteliales.

En este ratón transgénico, desactivaron Adora2a en las células endoteliales a las 12 semanas, y a las 16 semanas, cuando los ratones debían exhibir un deterioro cognitivo y una barrera hematoencefálica en la que se filtrara sangre, pero en cambio tenían funciones de cognición y barrera normales y no tenían inflamación.

Cuando compararon los ratones transgénicos que estaban en una dieta alta o baja en grasa, encontraron evidencia de que el aumento de la permeabilidad de los vasos sanguíneos en el cerebro inicia el ciclo de inflamación y deterioro cognitivo.

Las pruebas cognitivas en ratones en el estudio incluyeron el reconocimiento de objetos y maniobrar en un laberinto de agua. Los científicos observaron otras funciones normales, como las funciones motoras simples, para ver si había otros efectos y, al menos en esos primeros momentos, no identificaron otros.

Hallazgos en humanos

Si bien es generalmente difícil pasar de los ratones a las personas, el hecho de que este tipo de trabajo en realidad haya comenzado con hallazgos humanos probablemente signifique que evitar la resistencia a la insulina podría potencialmente detener el aumento de la permeabilidad de la barrera hematoencefálica y la disminución en la función cognitiva, dice Stranahan.

«Si un individuo ya ha progresado a resistencia a la insulina, estos estudios subrayan la importancia de controlar los niveles de azúcar en la sangre y evitar el progreso hacia la deficiencia de insulina (diabetes), lo que abre aún más la barrera hematoencefálica.»

Los científicos informan que la accesibilidad relativa de los vasos sanguíneos en el cerebro también puede convertirlos en una buena opción para prevenir los efectos de la obesidad en el cerebro.

También apunta a la realidad de que una variedad de medicamentos administrados a pacientes obesos pueden impactar sus cerebros en un grado más alto, lo que podría ser algo que los pacientes y sus médicos deban considerar. Stranahan señala que, para los medicamentos destinados a actuar en el cerebro, como los de la enfermedad de Alzheimer, eso podría ser algo bueno, pero aún debe ser considerado. Algunas drogas recetadas comúnmente como la prednisona, por otro lado, ya son realmente buenas para el paso y potencialmente pueden ser malas para el cerebro, dice ella.

Los próximos pasos en su laboratorio incluyen descubrir dónde surge la señal que activa de forma crónica Adora2a en ratones gordos. Ella sospecha que en realidad es una cascada que incluye a las células endoteliales que se estresan, lo que aumenta su metabolismo, lo que significa que usan más ATP, que puede activar Adora2a y poner en marcha un círculo vicioso que eventualmente afecta la barrera hematoencefálica.

Referencia del estudio: Yamamoto, M., Guo, D.-H., Hernandez, C. M., & Stranahan, A. M. (2019). Endothelial Adora2a Activation Promotes Blood-Brain Barrier Breakdown and Cognitive Impairment in Mice with Diet-Induced Insulin Resistance. The Journal of Neuroscience: The Official Journal of the Society for Neuroscience, 39(21), 4179-4192. https://doi.org/10.1523/JNEUROSCI.2506-18.2019

Fuente: Science Daily

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8 Formas en las que la Realidad Virtual ayuda a tratar el miedo a volar

  • 27/05/2019
  • Equipo de Redacción

El 25% de la población sufre de aerofobia, lo que conocemos como miedo a volar. Las razones que provocan este miedo a volar puede ser una fobia en sí misma, sustentada generalmente por la posibilidad de sufrir un accidente en el aire; un riesgo que, sin embargo, es menor que en cualquier otro medio de transporte público o privado. Sin embargo, en ocasiones, la aerofobia tiene otros componentes que pueden agravarla, como es la claustrofobia o la acrofobia.

La tecnología avanza a pasos agigantados, y el sector de la salud mental tiene la necesidad de ir siempre un paso por delante en su desarrollo. De ahí que la Realidad Virtual se este implementando como apoyo en las consultas psicológicas nacionales e internacionales.

8 formas en las que la Realidad Virtual te puede ayudar en tu práctica clínica:

1. Evitas el proceso de exposición física

Se considera más efectiva que la exposición in vivo, ahorrando tiempo y costes. El paciente no tendrá que viajar físicamente en avión para conocer la validez del tratamiento ni para exponerse a las situaciones que le crean ansiedad.



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2. No dependemos de las capacidades imaginativas del paciente

Cada paciente es un mundo, y depender de la exposición a la imaginación para la efectividad del tratamiento sobre aerofobia sería una decisión arriesgada.

3. El psicólogo tiene el control total sobre los parámetros

Puedes controlar cada circunstancia que envuelve el entorno, haciendo que el paciente experimente específicamente las situaciones que teme: intensidad de las turbulencias, condiciones climáticas, exposición a la luz, cantidad de personas, posición del asiento o el proceso de camino al aeropuerto (en casa, en coche, en la puerta de embarque…)

4. Facilita el autoentrenamiento y el sobreaprendizaje

Con la realidad virtual no tendremos que esperar a que los sucesos tengan lugar en la vida real. Con la ayuda de los entornos podemos reproducir las veces que sean necesarias estas situaciones, fomentando el autoentrenamiento y el sobreaprendizaje.

5. Podrás repetir cualquier paso del proceso

En el caso del miedo a volar, desde estar en casa haciendo las maletas, hasta coger el taxi para ir al aeropuerto, estar en la fila para montar al avión, incluso repetir el despegue o aterrizaje.

6. Monitorizar la sesión e informes automáticos

Las sesiones están motorizadas a través de un sensor biofeedback y concluyen con un informe preciso sobre las respuestas fisiológicas del paciente. Los informes se pueden almacenar y ver la evolución gráfica del paciente ante el tratamiento.

7. Seguridad y privacidad del paciente

Podemos hacer que el paciente vuelva a un lugar seguro en cualquier momento, tan solo habría que desconectar la plataforma y quitarle las gafas de realidad virtual. La plataforma también incluye entornos de Mindfulness y relajación donde el paciente podrá volver a la tranquilidad.

8. Ayuda en el diagnóstico

¿Qué es lo que causa la fobia? Usando los parámetros personalizados y el sensor biofeedback sabremos si lo que causa ansiedad es el despegue, el aterrizaje, las turbulencias… También se pueden utilizar otros entornos de Realidad Virtual, como el de claustrofobia o miedo a las alturas, para detectar otras causas.

Trastornos y técnicas que puedes trabajar en tu práctica clínica con la Realidad Virtual

Representación visual de la terapia de exposición con Realidad Virtual de Psious
Representación visual de la terapia de exposición con Realidad Virtual de Psious

Para implementar la Realidad Virtual como herramienta en el campo sanitario, encontramos a la empresa Psious, diseñada por y para psicólogos y está basada en más de veinte años de estudios científicos.

La Realidad Virtual permite incrementar la inmersión, el compromiso y la satisfacción de tus pacientes**, además de ofrecer una terapia más rápida y efectiva. Es una herramienta con la que podrás tratar aparte de la aerofobia, el TEPT, TOC, TDAH, ansiedad, otras fobias, desórdenes alimenticios, etc.

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  • Qué responder al paciente cuando pregunta…
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