Psyciencia
  • SECCIONES
  • PSYCIENCIA PRO
    • ÚNETE A LA MEMBRESÍA
    • INICIA SESIÓN
    • CONTENIDO PARA MIEMBROS
    • RECURSOS PARA MIEMBROS
    • TIPS PARA TERAPEUTAS
    • PODCAST
    • WEBINARS
  • NORMAS APA
  • SPONSORS
  • NOSOTROS
Psyciencia
  • Inicia sesión
  • Membresía
  • Secciones
    • Psicología clínica
    • Psicología aplicada
    • Neurociencias
    • Biografías
    • Definiciones
    • Entrevistas
  • Guías y recursos
    • Videos, Recursos
    • Guías y manuales
    • Prevención de suicidio
    • Normas APA
    • Apps para psicólogos
  • Recomendados
  • Nosotros
Sin categoría

El Alzheimer se manifestaría de manera diferente en la población hispana

  • Alejandra Alonso
  • 26/09/2016
Alzheimer

El pasado 21 de Septiembre se recordó el día Internacional del Alzheimer. En Psyciencia aprovechamos la ocasión para publicar varios artículos (1, 2, 3) con el objetivo de ofrecer más información sobre las características de esta enfermedad y la necesidad de seguir apoyando la investigación del tema. Recientemente, nos encontramos con un estudio, publicado en el Journal of Neuropsychiatry and Clinical Neuroscience (JNCN), que, para nuestra sorpresa, se enfocó en la población hispana.

En el paper se encontró que ciertos síntomas asociados con el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer (como la depresión) afectan a la población hispana de manera más frecuente y severa.  Los descubrimientos sugieren que la enfermedad se manifiesta de manera diferente en la población hispana.

“Nuestro estudio muestra que la severidad y proporción de síntomas neuropsiquiátricos es significativamente mayor en un grupo hispano comparado con blancos no-hispanos. Esto podría tener un impacto significativo en el tratamiento y comprensión sobre cómo la enfermedad de Alzheimer progresa en hispanos”, comenta el autor principal, Dr. Ricardo Salazar.

En el Alzheimer puede haber tanto deterioro cognitivo como conductual. Las señales de deterioro cognitivo incluyen pérdida de memoria y problemas de orientación y funcionamiento físico. Por otro lado, los signos comportamentales o neuropsiquiátricos incluyen: depresión, ansiedad, delirios, apatía, alucinaciones y elación. Estos últimos han sido relacionados con mayores tasas de institucionalización y un progreso más veloz de la enfermedad.

Para conocer cómo se manifiestan los síntomas en la población hispana, el Dr. Salazar y su equipo reclutaron a 2189 individuos de la base de datos Texas Alzheimer’s Research and Care Consortium (TARCC). Los pacientes de dicha base de datos son mayormente personas blancas no-hispanas y méxico-americanos que han sido diagnosticados con Alzheimer, con discapacidades cognitivas moderadas (MCI) o que están saludables (grupo control). El equipo de investigadores se centró en el análisis del Neuropsychiatric Inventory Questionnaire (NPI-Q), un examen utilizado para evaluar la extensión de 12 síntomas neuropsiquiátricos.

La revisión de datos mostró que, durante la etapa de MCI, todas las etnias se veían afectadas de manera similar con respecto a los síntomas neuropsiquiátricos. Sin embargo, al desarrollarse la enfermedad de Alzheimer, la severidad de los síntomas antes mencionados en la población hispana aumentó significativamente.

Es esto lo que hace creer al Dr. Salazar que hay un proceso de enfermedad diferente en los hispanos:

“Cuando los pacientes tienen síntomas neuropsiquiátricos, eso significa un deterioro en diferentes áreas del cerebro. Yo creo que estudios con imágenes funcionales podrían mostrar diferencias en la ubicación del amiloide o la acumulación de placas en los cerebros de hispanos con la enfermedad de Alzheimer.”

El estudio también mostró que la depresión y la ansiedad eran más frecuentes en hispanos de 50 años o más. Lo que corroboraría hallazgos de estudios pasados que sugieren que la depresión podría ser uno de los primeros signos de Alzheimer y que además serían un signo temprano de la enfermedad en esta población. Los autores creen que el tratamiento de estos primeros síntomas podría retrasar la enfermedad.

El Dr. Salazar aclara también que el estudio tuvo limitaciones: la etnia fue autoreportada y hubo una menor cantidad de participantes hispanos con Alzheimer.

Claramente esto nos indica una necesidad de profundizar la investigación del tema, especialmente para nosotros los hispanos, ya que ayudaría a mejorar no solo el tratamiento si no también la prevención de esta agotadora enfermedad en nuestra población.

Fuente: Psypost

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

  • Psicología aplicada

La diferencia entre una vida basada en objetivos y una vida basada en valores, por Russ Harris (Vídeo)

  • David Aparicio
  • 26/09/2016
Con su libro, The Happiness Trap, Russ Harris se convirtió en uno de los autores y psicoterapeutas más importantes  de la Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT). Harris se ha dedicado a estudiar a lo que llámanos felicidad y porque muchas personas no logran ser felices a pesar de lograr las metas que se proponen. En este vídeo, Harris nos explica que la sociedad nos ha vendido la idea de que para ser felices debemos de ponernos metas y cumplirlas: una casa nueva, un carro nuevo, tener un mejor cuerpo para el verano. Según él, es cierto que si obtenemos esos objetos y metas, nos sentiremos felices por un breve periodo de tiempo hasta que ya ese objetivo no nos satisface y salimos en la búsqueda de otro dejándonos con un sentido de vacío y de agotamiento. En cambio, una vida enfocada en valores nos ofrece una mirada más amplia de la realidad y de la vida en general porque las personas que se enfocan en sus valores tienen la gratificación de los objetivos pero también de vivir de los valores. Harris utiliza un ejemplo muy bueno que consiste en dos niños que viajan en un auto hacia Disney World. Uno de ellos está enfocado en objetivos: llegar a Disney y disfrutar; el otro también quiere ir a Disney pero vive en una vida basada en valores como: aventura, diversión y curiosidad, lo que le permite tener una experiencia muy diferente y más gratificante del viaje, a pesar de las adversidades que atraviesan.  

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

  • Psicología clínica

Cursos online: Inclusión de personas con autismo (20% de descuento exclusivo)

  • David Aparicio
  • 25/09/2016
Actualmente  “autismo” es  un término que fue sufriendo a lo largo del tiempo profundas transformaciones. Es objeto de estudio de muchas disciplinas y a pesar de las diferencias sustanciales que existen entre ellas todas mencionan como rasgos centrales el extremo asilamiento que sumerge a los niños en una profunda soledad. El trabajo con niños con problemas vinculados al autismo nos enfrenta a situaciones que ponen  en juego diferentes saberes. Básicamente se trata de articular en el campo de la constitución del sujeto lo genético constitucional con los aspectos psíquicos y socio ambientales. En este sentido, son esenciales los aportes de las neurociencias  en relación a la idea que demuestra que  la experiencia deja una huella en la red neuronal. Se abren así caminos para considerar qué tipo de experiencias infantiles le posibilitan al niño salir del estigma social de su patología, producto del determinismo genético. Entre estos dos paradigmas surgen preguntas ¿cómo constituyen  la subjetividad? ¿cómo construyen los lazos sociales? ¿cómo aprenden?. Por otra parte, la problemática de la inclusión se encuentra en boga hoy en día. Estudios, instituciones y medios de comunicación hablan de la necesidad de una educación inclusiva e igualitaria, pero la realidad es que los establecimientos educativos no están preparados para eso. Y tampoco lo está la sociedad. Partiendo de aquí, hace más de 20 años  que fue creada R.Ed. ES. una institución argentina que ofrece una amplia gama de herramientas (presenciales y online)  orientadas la atención interdisciplinaria, a la vez que ofrece  orientación a padres, asesoramiento escolar, coordinación de equipos y supervisión para profesionales. Como parte de su compromiso con la enseñanza especializada sobre las temáticas vinculadas al autismo brinda diversos cursos online. Esta modalidad cuenta con las ventajas del Aula Virtual, donde alumnos y docentes pueden intercambiar información y opiniones las 24 horas.

Cursos online de R.Ed.Es sobre la inclusión e integración de personas con autismo

  • Diagnóstico Diferencial en Trastornos del Espectro Autista, por Dr. Jaime Tallis. Inicio: 19 de octubre de 2016.
  • Inclusión. Niños con autismo en la escuela común. ¿Qué precisan conocer los terapeutas, educadores y padres? Por Dra. Liliana Kaufmann. Inicio: 12 de octubre de 2016.
  • La sexualidad en los Trastornos del Espectro Autista. Estrategias de intervención para niños y jóvenes, por M. Sc. Elaime Maciques Rodríguez y Dr. Ronald Soto Calderón. Inicio: 12 de octubre de 2016.
  • Autismo, integración sensorial y desarrollo psíquico. Estrategias de intervención, por M. Sc. Elaime Maciques Rodríguez. Inicio: 12 de octubre de 2016.
Detalles de los cursos: Residentes en Argentina: $2.100 o 2 cuotas de $1.150 (Los precios no muestran el descuento exclusivo) Residentes en otros países: US$180 (Los precios no muestran el descuento exclusivo) Para obtener el 20% de descuento exclusivo debes enviarle un email a los administradores del curso para que hagan efectivo el descuento. La iniciativa R.Ed.Es se desarrolla bajo la dirección de Liliana Kaufmann (Doctora en Psicología. Lic. en Psicopedagogía. Fonoaudióloga. Profesora de pos grado. Investigadora. Autora del libro “Soledades. Las raíces intersubjetivas del autismo”. Ed Paidós y de otros libros en colaboración) Puedes contactarte con R.Ed.Es a través del email: [email protected] o por teléfono al (54 11) 4823-3938. También puedes seguirlos en Facebook: /AutismoInclusionRedes.

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

  • Psicología aplicada

Freud atiende a los personajes de la cultura popular (cómic)

  • David Aparicio
  • 25/09/2016
Es fin de semana, así que hoy no vamos a concentrarnos investigaciones y vamos a tomarnos un momento para relajarnos y reírnos con los cómics que publicó la talentosa artista Lee Gatlin en su cuenta de Tumblr y que exponen a diferentes personajes de la cultura popular en una divertida y rara sesión terapéutica con el icónico Sigmund Freud.

Hasta Tarzan tiene crisis existencial

https://neilaglet.tumblr.com/post/139486589231

Hulk afronta sus emociones

https://neilaglet.tumblr.com/post/136826647131

Súperman en pleno insight

https://neilaglet.tumblr.com/post/127075578126/superego

La vida no es fácil

https://neilaglet.tumblr.com/post/100668352076

Todos luchamos contra nuestros demonios

https://neilaglet.tumblr.com/post/99484289221/adventures-in-being-wishy-washy

Frankenstein afronta su identidad

https://neilaglet.tumblr.com/post/98307238476

Es difícil aceptar el cambio

https://neilaglet.tumblr.com/post/98307238476
Fuente: io9 Gizmodo

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

  • Recomendados

Obligar a que la gente entre a trabajar antes de las 9 a.m. es «torturar» – ABC

  • David Aparicio
  • 23/09/2016
Exhaustos, malhumorados, estresados y hasta agresivos. Así estamos cuando no dormimos los suficiente. Nos levantamos excesivamente temprano para ir a trabajar o estudiar y nos acostamos demasiado tarde, dando como resultado, si acaso, unas 5 horas de sueño. Según las estadísticas internacionales, la falta de sueño no es cosa de unos pocos cuantos, sino que ya se considera un problema de toda la sociedad y que debe ser tratado con urgencia y seriedad por los gobiernos e instituciones de salud. Una de las posturas más tajantes es la que ofreció el investigador de la Universidad de Oxford Paul Kelly, para el diario Daily Mail, y traducido al español por el diario ABC:

Hacer que la gente por debajo de los 55 años empiece a trabajar antes de las 9 de la mañana es «torturar», según acaba de afirmar uno de los mayores expertos en sueño del Reino Unido en el Daily Mail. «Obligar a los empleados a trabajar de nueve a cinco deja sus cuerpos exhaustos y con un alto nivel de estrés, derivado de la privación del sueño», asegura el doctor Paul Kelley. El experto, a la sazón académico de la Universidad de Oxford, asegura que esa circunstancia solo sería aceptable después de los 55 años, cuando el cuerpo humano empieza a necesitar dormir menos.

No podemos cambiar nuestro ciclo circadiano:

El doctor Kelley afirma que no podemos cambiar nuestros ritmos circadianos de 24 horas. «No podemos aprender a levantarse en un determinado momento. El cuerpo va en sintonía con el sol, algo de lo que no somos conscientes, porque la información va directa al hipotálamo sin que nos enteremos», explica. Este investigador clínico del Instituto de Neurociencias de la Universidad de Oxford, asegura que existe una necesidad de cambiar el momento de entrada en empresas y escuelas, para alinearlas con el reloj biológico humano. «Las empresas que obligan a sus empleados a entrar demasiado pronto a trabajar están poniendo en peligro la salud de estos», afirma.

Kelly dice que los adultos deberíamos empezar a trabajar a las 10 de la mañana:

«La falta de sueño es un problema que afecta a toda la sociedad», dice este experto. «Los trabajadores deberían empezar a trabajar a las 10:00 de la mañana». «Los empleados suelen estar dormidos. La sociedad entera está privada de sueño. Y esto es algo muy dañino para el hombre, porque afecta directamente a los sistemas emocionales y físicos del cuerpo». «El hígado y el corazóntienen distintos ritmos y lo que les estamos pidiendo es que se ajusten en dos o tres horas. Esto es un asunto internacional. Afecta a todo el planeta», advierte.

Apoyo completamente aplaudo su idea y creo que ustedes también. Lee el artículo completo en ABC.

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

Sin categoría

La medicación antidepresiva sería menos efectiva para personas con ciertas categorías laborales

  • Alejandra Alonso
  • 22/09/2016
Depresión
Conocer qué tratamientos son eficaces para cada persona es nuestro deber como profesionales. En este sentido, un nuevo estudio internacional encontró que tener un trabajo de alto estatus podría significar que no respondas a tratamientos estándar con fármacos para la depresión. Los científicos presentaron sus resultados en la conferencia anual del European College of Neuropsychopharmacology (ECNP) en Viena, y sus resultados también podrán encontrarse en el journal European Neuropsychopharmacology. Es importante conocer que hasta un tercio de los pacientes que reciben terapia con medicamentos para la depresión no responden al mismo. Saber qué grupos son menos propensos a responder a la medicación podría ayudar a los clínicos a entender qué tratamientos son más apropiados para cada individuo. En el caso de los trabajadores, también puede ayudar a los empleadores a tomar decisiones para mejorar las condiciones laborales estresantes. Aunque hay muchos estudios que vinculan a los estatus económicos y sociales bajos con mayor propensión al desarrollo del trastorno (1, 2, 3, 4), no se ha investigado mucho sobre cómo los niveles ocupacionales responden al tratamiento.
Podría ayudar a los clínicos a entender qué tratamientos son más apropiados para cada individuo
Conociendo esta brecha en la información, un grupo internacional de investigadores pertenecientes a Bélgica, Italia, Israel y Austria reclutaron a 654 trabajadores que se presentaron a la clínica por síntomas depresivos. Se clasificaron sus trabajos de acuerdo a niveles ocupaciones: 336 (51.4%) mantenían trabajos de alto nivel, 161 (24.6%) de nivel medio y 157 (24%) de nivel bajo. El 65.6% de los pacientes eran mujeres, lo que refleja la diferencia de género normal en el reporte de depresión. La mayoría de los pacientes eran tratados con ISRS, aunque también se utilizaban otros agentes farmacéuticos además de la terapia. Se observó que aquellas personas con trabajos de alto nivel recibían menos ISRS y más psicoterapia. Los científicos analizaron los resultados del tratamiento para cada sector y encontraron que el 55.9% de las personas en el grupo de alto nivel eran resistentes al tratamiento. En contraste, solo el 40.2% de los trabajadores de nivel medio presentaban dicha resistencia y un 44.3% de los trabajadores de bajo nivel. Esta diferencia también se refleja en el grado de remisión, con sólo alrededor de uno de cada seis en remisión en el grupo de nivel superior, en comparación con alrededor de uno de cada cuatro de los otros grupos. El Dr. Siegfried Kasper comenta: “Aunque estos hallazgos deberían ser considerados preliminares, indican que las ocupaciones de alto nivel pueden ser un factor de riesgo para la pobre respuesta al tratamiento.” Los autores creen que hay muchas variables que expliquen los descubrimientos, por ejemplo, puede que hayan estresores y demandas laborales específicas; las personas pueden encontrar difícil la aceptación o afrontamiento de la enfermedad o continuar con la medicación. También pueden haber factores de naturaleza cognitiva, conductual o de personalidad. El Dr. Joseph Zohar enfatiza que, tomando en cuenta lo observado en el estudio, las prescripciones deben considerar no solo los síntomas y la genética, sino también el trabajo. Fuente: PsychCentral

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

  • Artículos de opinión (Op-ed)

¿Integrar o «subrayar la falla»? Sobre los riesgos de la etiqueta previa

  • Jorge Garaventa
  • 22/09/2016
 Dicen que Freud solía decir que hay tres actividades que todo el mundo se cree en condiciones de hacer, sin tener una preparación previa: periodismo, psicoanálisis y andar a caballo. A los fines de nuestras reflexiones de este día, me atrevería respetuosamente a incluir una cuarta actividad: la de maestra o maestro integrador. También dicen que, con su sabiduría superlativa, el gran maestro alemán sostenía que el único que se resistía era el caballo. Lejos está este trabajo de desmerecer la tarea de la docencia de integración, tan vecino muchas veces a lo sacrificial, sino más bien señalar que estamos ante una de las funciones más complejas y necesarias de la docencia, pero también, probablemente de las más descuidadas. Las dificultades de su ejercicio ponen en jaque la falta de formación específica por un lado y el reino de lo artesanal por el otro. Y lo artesanal puede llegar a ser la más adecuada de las respuestas ante lo imprevisto o lo ineficaz, cuando hay un sustento sólido teórico-práctico que lo respalde, pero se puede tornar improvisación en acto cuando solo se trata de ensayo o error que enmascara la carencia de formación. Formación que habilite también a tener en claro los más y los menos que porta el diagnóstico de quien reclama un lazo para integrarse. Estamos ante los riesgos de la etiqueta previa, la duda de si integramos o subrayamos la falla y el interrogante de si cuando integramos, incluimos.
lo artesanal puede llegar a ser la más adecuada de las respuestas ante lo imprevisto o lo ineficaz, cuando hay un sustento sólido teórico-práctico que lo respalde
¿Es posible integrar en una sociedad que excluye “lo fallado”? Imposible dejar de lado la cuestión de que esta temática se relaciona directamente con otras muy en boga y que no necesariamente responden a concepciones educativas o de salud mental sino a cuestiones de mercado por un lado y a creencias y prejuicios por el otro. Lo cierto es que se nos presenta el reinado de la patologización cuya expresión más acabada es la última versión del DSM, que establece como conductas enfermas, y por ende medicables, lo que suelen ser comportamientos normales o esperables en determinadas etapa de la evolución psico social, o expresiones de las inevitables crisis vitales que marcan momentos nodales en el desarrollo humano. Vamos a aclarar de qué se trata el libro al cual hacemos referencia. Hablamos del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales que publica la Asociación Americana de Psiquiatría, American Psychiatric Association (APA), cuya quinta versión se ha popularizado como DSM-5. Tal vez se estén preguntando ¿y a qué viene eso? ¿Qué y cuánto nos importa un manual de disturbios mentales editado por un grupo de psiquiatras estadounidenses? Cosas que pasan cuando se renuncia a la Salud Mental soberana y se adoptan métodos importados y encima hegemónicos. El DSM-5 se ha impuesto y en general, es obligatorio, como herramienta de diagnostico y comunicación interprofesional, en espacios de salud mental, en las tramitaciones judiciales y en las instituciones educativas. Es muy difícil saber cómo se ha llegado a ello, pero sin dudas, parte de la colonización es la trasmisión de una ilusión de poder ya que los diagnósticos y comunicaciones se centran en un código que solo manejan los expertos que son quienes tienen el manual. El criterio con el que se maneja, y por lo tanto el que se aplica en nuestra región, no es científico sino que responde a variables económico-farmacológica. Los diagnósticos son por aproximación a partir de la presencia de algunos criterios; no es una cuestión dinámica sino que responde a etiquetas que se establecen de una vez y para siempre, y sin ningún tipo de inocencia se producen subjetividades farmacológicamente disciplinantes. La versión 5 del DSM ha producido fuertes rechazos de muchos grupos abocados a la atención de la salud mental ya que en el extremo del control ha patologizado gran parte de la vida cotidiana, además de tener una modalidad caprichosa. Por ejemplo, sin que tengamos noticias del porqué, los cuadros de histeria tan comunes en nuestras geografías han quedado fuera de lista, mientras que situaciones de ocurrencia normal como los berrinches de la niñez o el oposicionismo u otras formas de las contradicciones adolescentes de desapego, forman parte de los trastornos, que así llaman a sus cuadros. Tengamos en cuenta, y más allá de que todo nos roza o nos pega de lleno, lo que nos convoca a nuestra charla de hoy. Coincidimos con la Lic. Gisela Untoiglich en que en la niñez los diagnósticos se escriben con lápiz. Esto, que parece una verdad de Perogrullo ya que estamos hablando de psiquis en constante formación y transformación, no parece estar tan claro en otros momentos, y sobre todos en los de la intervención. La integración que se nos solicita implica comprender que ese diagnóstico que se nos comunica es una foto de ese momento, no necesariamente nítida, y que seguramente será diferente en la próxima captura. Aquí se reafirma la necesidad de trabajo en equipo. De la mano de la psiquiatría manicomial heredamos la creencia en la inmutabilidad de los diagnósticos. Y fue transitando con la neurología organicista que adoptamos el prejuicio de la inmovilidad de las llamadas discapacidades, aunque admitíamos que podrían agravarse. Que hoy los certificados de discapacidad sean temporales es un adelanto en relación a como estábamos, pero no elimina los efectos subjetivos del encorsetamiento patológico. No debería ser un requisito una certificación invalidante para recibir un subsidio que el Estado o las obras sociales deberían otorgar sin poner en riesgo el futuro de la salud mental de un niño. Casi lo contrario de lo que se pregona. Por eso, para no agravar “la falla” es fundamental entender, pero desde las tripas y desde la comprensión más lúcida, que estamos acompañando a un niño o a una niña, no a un diagnóstico, y que una de las tareas esenciales es la de descubrir no solamente las dificultades en el acceso propio al aprendizaje sino cuales son las características facilitadoras en ese sujeto en particular.

La integración que se nos solicita implica comprender que ese diagnóstico que se nos comunica es una foto de ese momento, no necesariamente nítida

Cuando nos encontramos con cada integración se terminan las palabras, las experiencias y las teorías aunque, vaya paradoja, es fundamental que todo eso esté en la base de nuestras intervenciones para tornarlas idóneas. ¿Entonces? De lo que hablamos es que nuestro bagaje nos permitió llegar hasta allí, pero una vez en ese espacio comienza el reino de la singularidad. Singularidad que refiere al respeto estricto de la subjetividad de aquel o aquella a quien vamos a acompañar en un tramo de su formación. Si no logramos poner entre paréntesis nuestro recorrido, corremos el riesgo de perder de vista a quien tenemos enfrente, ya que estaríamos respondiendo a nuestros preconceptos, y es necesario saber que estamos ante lo novedoso y dejarnos sorprender con eso. Si llegamos hasta allí con una buena formación, el resto se irá acomodando por añadidura. Freud insistía en dos cuestiones, entre tantas, que parecen contradictorias y sin embargo son complementarias. En primer lugar que en las intervenciones clínicas, salvando las distancias, había que olvidarse de la teoría para poder internarse en el entramado del paciente. De hecho aconsejaba hacer el análisis final de la historia del paciente, cuando este no estuviera. Seguramente no era tan así ya que es necesario ir repensando lo que va ocurriendo, pero es fundamental tomar el modelo que propone y que ensambla perfectamente con la actividad que hoy nos convoca. La otra apreciación freudiana es una comparación con el trabajo de un químico en un laboratorio. Decía que si tomamos un microscopio y miramos, no veremos nada, apenas formas difusas sin sentido. Es necesario, agregaba, saber lo que tenemos que ver. Y, redundando, no aludía a la premisa previa sino a saber que se puede encontrar. Puede ser que nos encontremos con el bacilo de Koch, pero no ir necesariamente a buscarlo, y además cuando lo encontremos, no certificar la tuberculosis si no sabemos si está activo e infectando. Aquí terminan las comparaciones, pero lo que no termina es la convicción, que quiero trasmitir, que convertirse en maestro o maestra integradora, e independientemente de las condiciones que pida la institución empleadora, no es un trabajo para el mientras tanto. No es un pasatiempo en la espera del escenario mayor, o no debería serlo. No es bueno para quien se lo plantee que la integración sea la actividad que solventa la espera de que se consolide su espacio profesional personal. No es bueno para quien lo ejerce y es nocivo para quien recibe la intervención. Ejercer esta especialidad, aunque no esté definida como tal, implica primero vocación sólida y luego formación integral y pasión por la interdisciplina. Hablamos de conocimientos profundos en educación y elementos de psicoanálisis, psicología, psicopatología y neurología que permitan el diálogo con el profesional pertinente. La integración se trabaja en equipo porque ninguna disciplina posee el saber pleno como para resolver el desafío. Un docente integrador es también un cuidador, un facilitador de herramientas para aquellos que tienen dificultado su acceso o utilización. La tarea de cuidar al otro difícilmente sea sin consecuencias. En principio por un ejercicio sobre expuesto o inadecuado de la función, pero también porque la tarea en si es especialmente absorbente. La Lic. Vita Escardó acaba de publicar un libro, el primero del que al menos hasta hoy tengamos conocimiento, que abarca integralmente la materia. Me refiero a «Síndrome de Burnout – Cuidado de Cuidadores». Cuando se desconoce esta afección se suelen tomar decisiones apresuradas y drásticas, generalmente erróneas, habida cuenta de que sin tener conciencia de los orígenes es muy difícil de sobrellevar.

lo único fallado que advertimos es la presencia en lo social de un pensamiento, no necesariamente minoritario ni sensorial que discrimina y excluye lo diferente, lo sintomático, lo problemático

Un síndrome es un conjunto de signos y síntomas que requieren atención prioritaria, y el síndrome de Burnout especialmente. Prioritaria y específica. Señalemos entonces, como advertencia, no como regla, que difícilmente en una escuela, un caso sea un hecho aislado. A la impronta personal que facilita la afección, suelen sumarse características institucionales. Son tiempos de pensar en talleres que también actúan como puntal de prevención. Y en realidad todas las instituciones educativas y de salud, detecten o no personas afectadas entre sus operadores, se verían muy beneficiadas regularizando este tipo de actividades. El Burnout fue, durante años, confundido con el estrés, no menos preocupante pero distinto. Lo que caracteriza el cuadro que nos ocupa es que da de lleno en lo vocacional, estallando lo que durante tanto tiempo hemos construido con entusiasmo. Son esos momentos fáciles de detectar porque lo que sentimos es lo maravilloso y aliviante que hubiera sido ejercer otra actividad sin ningún tipo de compromiso e implicación. Una alienación de la subjetividad que nos regía, disfrazada de desánimo y desilusión definitiva. Más que de preocuparnos, es tiempo de ocuparnos. Volvamos al comienzo y a una pregunta crucial: ¿Es posible integrar en una sociedad que excluye “lo fallado”? En principio, lo único fallado que advertimos es la presencia en lo social de un pensamiento, no necesariamente minoritario ni sensorial que discrimina y excluye lo diferente, lo sintomático, lo problemático. Una sociedad, en definitiva, que se deslinda, se desentiende, se presume inocente de sus propios productos. Claro que hay que trabajar en la integración. ¿Qué duda cabe? Que problematicemos la definición, que la redefinamos no implica renunciar a la imprescindible presencia del maestro o la maestra integradora. Que trabajemos con integración en la niñez es el paso imprescindible para garantizar la inclusión en el futuro. Con nuestro trabajo se está integrando a un niño o una niña desde los primeros estamentos de la educación, pero fundamentalmente se van desarticulando los mecanismos sociales de la exclusión, la discriminación y el prejuicio. Muchas son las ocasiones en que con asombro y satisfacción recibimos de los adultos la alegre noticia de que sus hijos e hijas se han convertido en portadores de un pensamiento respetuoso por la diferencia. Creo que queda claro entonces el mensaje fundamental que quería trasmitir: la tarea de los docentes que trabajan en integración es trascendente en lo individual, y en lo institucional-escolar, pero fundamentalmente en lo social, ya que es capaz de vehiculizar un pensamiento transformador. No es necesario jerarquizar el rol sino ejercerlo en su jerarquía y con jerarquía.

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

  • Psicología aplicada

Música, tristeza y empatía: cuando el dolor y el placer vienen juntos

  • Rita Arosemena P.
  • 22/09/2016
No es ningún secreto que muchas personas manifiestan sentirse más tristes o melancólicas luego de escuchar cierto tipo de música, por lo general, melodías de compás lento o mensaje desesperanzador. De hecho, lo que podría parecer una técnica de autoflagelación psicológica es el recurso idóneo que algunos emplean para desahogarse en momentos difíciles. La música se convierte, entonces, en un agente propicio para la catarsis y el recuerdo de episodios de vida importantes, principalmente si la pieza musical nos es familiar. La mayoría de estudios realizados hasta ahora había hecho énfasis, precisamente, en esto: cómo afecta nuestro estado de ánimo la música que ya conocíamos, nuestro “repertorio nostálgico” personal. Se ha dado por hecho que experimentar tristeza luego de escuchar cierto tipo de música se debe a la asociación que establecemos de forma inmediata con nuestras memorias, o bien a la similitud entre el contenido lírico y nuestra situación actual. Sin embargo, este sesgo excluye la posibilidad de sentir tristeza o verse emocionalmente afectado al escuchar música desconocida, ritmos o instrumentos con los que no estamos familiarizados, algo que — curiosamente — sí ocurre. Tuomas Eerola, Jonna K. Vuokoski y Hannu Kautianein conforman un grupo de investigadores de la Facultad de Música y el Departamento de Práctica General y Cuidado Primario de la Salud de distintas universidades del Reino Unido y Finlandia. En un estudio publicado en la revista científica Frontiers in Psychology, Eerola, Vuokoski y Kautianein exponen los resultados de una investigación llevada a cabo para determinar los efectos que produce en nuestro estado anímico la música con la que no estamos familiarizados, una iniciativa que ha guiado a conclusiones interesantes y que ha rescatado, por otro lado, la vieja paradoja del “placer en el dolor y el dolor en el placer”. Los resultados del estudio, que consistió en monitorear mediante sensores fisiológicos la experiencia emocional de un grupo de participantes al escuchar una pieza instrumental de 8.5 minutos, permiten resaltar algunos puntos importantes. Primero, se ha demostrado que “factores externos como la letra (de la música), las memorias o la familiaridad no son cruciales para el disfrute de la música triste”, sino que somos capaces de experimentar conmoción indistintamente de si conocemos o no una pieza musical. En segundo lugar, el proceso de experimentar tristeza a raíz de la música es, en realidad, más complejo de lo pensado, ya que no existe una sola dimensión de tristeza sino tres.
  • La tristeza relajante se caracteriza por una sensación de paz y valencia positiva.
  • La tristeza nerviosa se relaciona con la ansiedad, el temor y una valencia negativa.
  • Por último, la tristeza conmovedora consiste en una experiencia intensa que envuelve a las personas en una sensación general de estar conmovidas, emocionadas o afectadas.
El tercer aspecto relevante del estudio es el factor negativo-positivo de la tristeza percibida por los participantes y la relación de este con la empatía. En primera instancia, los índices de tristeza nerviosa registrados fueron menores a los índices de tristeza relajante y tristeza conmovedora. Según los investigadores, la diferencia esencial entre las dimensiones mencionadas es que la tristeza conmovedora no implica un estado emocional negativo como la nerviosa, sino que se relaciona con un rasgo de empatía y una sensibilidad hacia el contagio emocional. “La música expresa todo aquello que no puede ser dicho y que tampoco puede ser silenciado”, decía Víctor Hugo, una postura similar a la del neurólogo Oliver Sacks, quien decía que la música “llega directo al corazón, no necesita intermediarios”. Para los autores del estudio, los datos concluyentes permiten avanzar hacia la comprensión del paradójico disfrute de la tristeza inducida por la música, ya que se torna sustentable la idea de que existe más de una experiencia emocional y que esta no guarda relación necesariamente con factores como el recuerdo de episodios de vida importantes, sino también con el desarrollo de la empatía y el placer que este rasgo puede producir. No obstante, algunos aspectos restan para “completar el acertijo” y es entender y monitorear la evolución progresiva de la experiencia emocional, desde el momento en que surge hasta que se transforma, ya sea hacia una emoción simulada de carácter negativo o hacia una experiencia más positiva. Referencias: Nichols, H. & Nichols, H. (2016). Being moved by sadness-evoking music linked to high empathy. Medical News Today. Disponible en https://www.medicalnewstoday.com/articles/312937.php Eerola, T., Vuoskoski, J., & Kautiainen, H. (2016). Being Moved by Unfamiliar Sad Music Is Associated with High Empathy. Frontiers In Psychology, 7. doi:10.3389/fpsyg.2016.01176 (Disponible en https://journal.frontiersin.org/article/10.3389/fpsyg.2016.01176/full#B85) Eerola, T., and Peltola, H.-R. (2016). Memorable experiences with sad music – reasons, reactions and mechanisms of three types of experiences. PLoS ONE 11:e0157444. doi: 10.1371/journal.pone.0157444

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

Sin categoría

(Vídeos) 3 conferencias sobre el Alzheimer

  • Alejandra Alonso
  • 21/09/2016
Hoy se conmemora el día mundial del Alzheimer, una enfermedad que cada vez es más común en los adultos mayores y sobre la que todavía sabemos muy poco. Los tres videos que dejamos a continuación nos recuerdan sobre la importancia de seguir investigando y también nos muestran cosas positivas que surgieron de personas que tienen familiares con esta enfermedad (en todos podés activar los subtítulos en español).

Samuel Cohen: El Alzheimer no es parte del envejecimiento normal — y podemos curarlo

Samuel Cohen presenta en su TED Talk, impactantes estadísticas en relación al Alzheimer, donde destaca lo poco que sabemos sobre esta enfermedad. Además habla sobre su investigación con gusanos, que arroja algo de esperanza en la investigación sobre el Alzheimer y, al final, nos insta a apoyar a las personas con esta enfermedad y a sus familiares, quienes suelen estar demasiado agotados para luchar por la causa.

Alanna Shaikh: Cómo me estoy preparando para tener Alzheimer

En la siguiente conferencia, Alanna Shaikh nos habla de su padre, quien desarrolló la enfermedad de Alzheimer y la hizo reflexionar sobre las reacciones de la gente: negación u obsesivos intentos de prevención. Finalmente nos habla de la interesante conclusión a la que ella llegó: tengo que prepararme por si sufro de Alzheimer. Ella menciona tres cosas que está haciendo como preparación.

Kenneth Shinozuka: Mi simple invento, diseñado para mantener a mi abuelo a salvo

Muchas personas con demencia deambulan, lo cual puede ser muy estresante para los cuidadores y familiares. El abuelo de Kenneth Shinozuka también deambula de noche, y Kenneth se preocupaba tanto por su bienestar como el de si tía que lo cuida y trataba de estar despierta por si esto sucedía. Entonces a él se le ocurrió una gran idea para solucionar el problema, que puedes ver en el siguiente video: Fuente: TED

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

  • Psicología aplicada

10 datos científicos para reconocer y prevenir el Alzheimer

  • Rita Arosemena P.
  • 21/09/2016

El reporte global del año 2015 sobre el impacto, prevalencia e incidencia del alzheimer publicado por Alzheimer’s Disease International (ADI) revela que un aproximado de 46.8 millones de personas a nivel mundial conviven actualmente con esta u otra neuropatología catalogada como demencia.

Según los datos recopilados, se estima que este número ascienda a los 74.7 millones en 2030, y más de 131 millones en 2050.

Hoy por hoy, no es mucho lo que ha podido desentrañarse en torno a los orígenes del Alzheimer, pero sí existen datos científicamente comprobados en relación con el desarrollo de la enfermedad que el público en general debe conocer y manejar como parte de un proceso necesario de concientización y tratamiento preventivo.

1: En 2014, se estimó que sólo 1 de cada 4 personas con Alzheimer había sido diagnosticada, esto se debe en gran medida a que los síntomas de la enfermedad pueden no manifestarse aún cuando existe un daño cerebral observable mediante resonancia magnética.

2: La degeneración del locus coeruleus (región del cerebro que los investigadores identifican como la primera “víctima” del Alzheimer) puede iniciar incluso décadas antes de mostrarse alguna sintomatología, a una edad tan temprana como los 25 años.

3: La norepinefrina es la hormona encargada de regular la atención, la cognición y la memoria. Estudios han comprobado que la afectación del locus coeruleus, región cercana a la base del tallo cerebral — donde se libera la norepinefrina — es la causa del deterioro de estas facultades cognitivas, y también de la disminución en la capacidad de protección de las células cerebrales contra la inflamación.

4: Estudios sugieren que el ejercicio moderado y regular (como la jardinería, la natación o las caminatas) puede ayudar a prevenir el Alzheimer incluso si empieza a realizarse a una edad avanzada.

5: La incapacidad de las personas con Alzheimer para reconocer a sus seres queridos se debe a un deterioro en la capacidad de análisis visual holístico (interpretación de una imagen de arriba hacia abajo). Es por esto que el reconocimiento de las caras se torna difícil para ellas, mientras que el reconocimiento de otros elementos (como los objetos horizontales) sigue siendo normal.

6: El aprendizaje por imitación — la forma básica de aprendizaje para los bebés y niños pequeños — es un método eficaz para ayudar a las personas con Alzheimer a reaprender habilidades que suelen olvidarse durante el desarrollo de la enfermedad La imitación es efectiva debido a que el Alzheimer afecta funciones cognitivas muy concretas, pero las capacidades sensoriales, como la visión y el desempeño motriz, se conservan intactas.

7: Un estudio realizado por el centro médico Beth Israel Deaconess ha demostrado que prácticas como la meditación y el yoga pueden contribuir a la prevención del Alzheimer, ya que mejoran la conectividad cerebral, disminuyen la propensión a padecer atrofia en el hipocampo, reduce los niveles de cortisol — hormona que influye en el desarrollo de la demencia — y aumenta la materia gris y el espesor cortical, lo que ralentiza el envejecimiento.

8: A pesar de las contraindicaciones populares, una investigación llevada a cabo por la Universidad Old Dominion de Norfolk (Virginia) concluyó que consumir café con frecuencia puede reducir los índices de proteína beta amiloide en el cerebro (estrechamente relacionada con el Alzheimer) hasta en un 50%.

9: Se ha comprobado que un historial de ansiedad y depresión puede aumentar el riesgo de desarrollar demencia. Una vida social activa, con participación en grupos de alta interacción, es un tratamiento preventivo ideal tanto para enfermedades neurodegenerativas como para trastornos psicológicos del estado de ánimo.

10: Para los adultos mayores, pasar tiempo de calidad con sus nietos ha sido identificado como un método preventivo sumamente eficaz contra el desarrollo del Alzheimer y la depresión senil. Según el estudio, realizado en Australia por el Women’s Health Aging Project, el rol activo de los abuelos en la vida de sus nietos se asocia con efectos positivos en el buen estado de las facultades cognitivas.

Fuentes: Brightfocus | Alz.co.uk | Alzheimers.net

Sponsor exclusivo

Curso online con casos clínicos, técnicas de TCC y certificación. Por Carmela Rivadeneira y Ariel Minici.

Paginación de entradas

Anterior 1 … 474 475 476 477 478 … 679 Próximo
Sponsor exclusivo de la semana
Formación Método Gottman Nivel 1

Únete a Psyciencia Pro y apoya nuestro trabajo 💞.

      Únete a la membresía    
Contenido para miembros
  • Inicia sesión
  • Tips para terapeutas
  • Podcast
  • Recursos
  • Webinars
  • Artículos
  • puzzled woman with pen studying in room
    Cómo reaccionar cuando un paciente busca la tranquilidad excesiva
  • Club de lectura de Psyciencia: La Matrix, manual de usuario: entrenando la flexibilidad psicológica
  • 10% de descuento para el máster terapias contextuales
  • Entender el trastorno de estrés postraumático (PDF)
  • Cómo simplificar la gestión de pacientes y evitar cancelaciones (webinar)
Psyciencia
  • Contáctanos
  • Publicidad
  • Nosotros
  • Publica
Psicologia y neurociencias en español todos los días

Ingresa las palabras de la búsqueda y presiona Enter.