Psyciencia
  • SECCIONES
  • PSYCIENCIA PRO
    • ÚNETE A LA MEMBRESÍA
    • INICIA SESIÓN
    • CONTENIDO PARA MIEMBROS
    • RECURSOS PARA MIEMBROS
    • TIPS PARA TERAPEUTAS
    • PODCAST
    • WEBINARS
  • NORMAS APA
  • SPONSORS
  • NOSOTROS
Psyciencia
  • SECCIONES
  • PSYCIENCIA PRO
    • ÚNETE A LA MEMBRESÍA
    • INICIA SESIÓN
    • CONTENIDO PARA MIEMBROS
    • RECURSOS PARA MIEMBROS
    • TIPS PARA TERAPEUTAS
    • PODCAST
    • WEBINARS
  • NORMAS APA
  • SPONSORS
  • NOSOTROS

Publicaciones por mes

agosto 2020

67 Publicaciones
  • Ciencia y Evidencia en Psicología

¿Sobrevalorado? El entrenamiento musical no impulsaría las habilidades cognitivas después de todo

  • 31/08/2020
  • Maria Fernanda Alonso

Muchos han investigado el tema, pero ¿existe realmente un vínculo entre formación musical y mejor rendimiento académico y cognitivo? Un equipo de investigadores de la Universidad de Salud de Fujita (Japón) y de la Escuela de Economía y Ciencias Políticas de Londres (Reino Unido) examinaron la evidencia experimental existente sobre el impacto de la formación musical en las habilidades cognitivas no musicales y el rendimiento académico de los niños.

Metodología: para esta investigación fueron analizados los datos de 54 estudios anteriores realizados entre 1986 y 2019, que incluyeron un total de 6984 niños.

Hallazgos: los autores encontraron que el entrenamiento musical parecía ser ineficaz para mejorar las habilidades cognitivas o académicas, independientemente del tipo de habilidad (verbal, no verbal, relacionada con la velocidad, etc.), la edad de los participantes y la duración del entrenamiento musical (Sala & Gobet, 2020).



Suscríbete al newsletter para apasionados por la psicología y neurociencias


Al comparar los estudios individuales incluidos en su metanálisis, los investigadores descubrieron que los trabajos con un diseño de estudio de alta calidad, como los que utilizaron un grupo de controles activos: niños que no aprendieron música, sino que aprendieron una habilidad diferente, como la danza o los deportes, no mostraron ningún efecto de la educación musical en el rendimiento cognitivo o académico. Se encontraron efectos pequeños en estudios que no incluyeron controles o que no asignaron al azar a los participantes a grupos de control (los que recibieron capacitación diferente o ninguna) y grupos de intervención (los que recibieron capacitación musical).

Esto significa, según los autores, que enseñar música a niñas y niños con la única intención de mejorar sus habilidades cognitivas o académicas no tendría sentido. El cerebro se puede entrenar, como en otras habilidades; por lo tanto si se practica música sus habilidades en tal área mejorarán, pero estos beneficios no se generalizarían a otras áreas como las matemáticas.

Los autores advierten que se han realizado muy pocos estudios para llegar a una conclusión definitiva sobre los posibles efectos positivos de la educación musical en las características cognitivas o no académicas.

Los resultados del estudio no quieren decir que la formación musical no sea beneficiosa para niñas y niños, por el contrario, puede ayudar con las habilidades sociales o la autoestima. Y de hecho, ciertos elementos de la enseñanza musical, como la notación musical aritmética, podrían utilizarse para facilitar el aprendizaje en otras disciplinas. Por otra parte, escuchar música que nos gusta nos lleva a liberar más dopamina, la cual sabemos que sabemos que tiene un rol fundamental en el desarrollo y funcionamiento cognitivo, emocional y conductual de las personas.

Finalmente, si tenemos en consideración la necesidad de estimulación externa para cumplir con las tareas y obligaciones, se ha encontrado que las personas que requieren mayor estimulación de este tipo tienden a desempeñarse peor cuando escuchan música mientras realizan una tarea mental, y las personas con baja necesidad de estimulación externa, por otro lado, tienden a mejorar su rendimiento mental con la música.

Referencia bibliográfica:

Sala, G., & Gobet, F. (2020). Cognitive and academic benefits of music training with children: A multilevel meta-analysis. Memory & Cognition. https://doi.org/10.3758/s13421-020-01060-2

Fuente: Science Daily

  • Cursos recomendados

7 Cursos online sobre inclusión y diversidad en los entornos escolares

  • 31/08/2020
  • David Aparicio

He compilado siete cursos online con programas específicos para evaluar y mejorar las condiciones de los entornos educativos de las personas con algún tipo de discapacidad. Todos los cursos son certificados por reconocidas universidades de diferentes partes del mundo. Los cursos son preparados por expertos en educación, inclusión y evaluación clínica. Para conocer sus planes de estudios y requisitos solo debes hacer click en el titulo que más te guste:

  1. Manejo del TDAH, el autismo, las discapacidades de aprendizaje y la conmoción cerebral en la escuela (Universidad de Colorado)
  2. Trastorno del espectro autista (UCDAVIS – Universidad de California)
  3. Cómo proporcionar servicios de educación social, emocional, conductual y especial en la escuela (Universidad de Colorado)
  4. Inclusión de la discapacidad en la educación: creación de sistemas de apoyo (Universidad de Cape Town)
  5. TDAH: Estrategias para el día a día con niños de escuela primaria (Universidad de Buffalo y la Universidad de Nueva York)
  6. Cómo apoyar a los niños con dificultades para leer y escribir (Universidad de Londres)
  7. Cómo crear aulas positivas (Relay – Escuela de educación)
  • Recursos para Profesionales de la Psicología

Habilidades de terapeutas de tercera generación (video)

  • 31/08/2020
  • David Aparicio

Nathalia Diaz explica muy hábilmente y en menos de ocho minutos, los puntos principales del paper de Jorge Barraca Mairal que trata de las habilidades que deben desarrollar los terapeutas de tercera generación, y las diferencias que hay con las habilidades de terapia tradicional.

https://youtu.be/e4IXK5VAgjw

Abstract del paper:

En este artículo se repasan las técnicas de tres de las terapias de tercera generación conductual (Terapia de Aceptación y Compromiso, Psicoterapia Analítico Funcional y Terapia Conductual Dialéctica) para reflexionar sobre el tipo de destrezas que el terapeuta debe desarrollar si pretende lograr una actuación competente al practicarlas. Este examen lleva a distinguir entre: (1) habilidades de escucha y discriminación de respuesta; (2) habilidades de fluidez, repertorio y competencia verbal; (3) habilidades de ejecución motora; (4) habilidades de imaginación-creatividad; (5) habilidades de conexión-empatía; y (6) otras habilidades (trabajo en grupo entre terapeutas, meditación, atención plena, etc.). Un análisis de estas destrezas permite concluir que los nuevos desarrollos parten de las tradicionales habilidades del terapeuta cognitivo-conductual pero replanteadas y con formas decididamente más elaboradas. Por otro lado, se revela que las competencias habitualmente entrenadas en la licenciatura, así como las que pueden derivarse exclusivamente de la lectura de los textos en que se divulgan estas terapias, resultan limitadas para un trabajo eficaz dentro de estos nuevos modelos. En conclusión, se propone la implementación de una formación práctica o procedimental a través de talleres, materiales audio-visuales y supervisión de casos. Palabras clave: habilidades terapéuticas; terapia conductual de tercera generación; terapia conductual dialéctica; psicoterapia analítico funcional; terapia de aceptación y compromiso.

Descarga el artículo completo de Jorge Barraca Mairal en formato PDF.



Suscríbete al newsletter para apasionados por la psicología y neurociencias


  • Artículos Recomendados de la Web

Cómo pedir disculpas

  • 30/08/2020
  • David Aparicio

Muy buen artículo de Anna Goldfarb para The New York Times:

Acepta tu responsabilidad. Ignora la necesidad de ponerte a la defensiva o dar excusas como: “No lo dije a propósito” o “¿Por qué eres tan sensible? Obviamente era una broma”. Evita ahondar en nimiedades y deja que la otra persona exponga sus sentimientos, dijo Bonior. Deja en claro que no tomas a la ligera lo que hiciste. Los estudios revelan que decir tus sentimientos puede ayudar a manejar la ansiedad y la depresión. Entonces, decir cosas como: “Me avergüenza haber dicho eso” o “Me consterna haberte lastimado” puede aliviar un poco la angustia ocasionada por la situación. No obstante, no busques hacerte la víctima, así que no exageres las cosas, dijo Bonior.

Valida su dolor. Es tentador usar este tiempo para aclarar tus intenciones: puede que te sientas atacado y es comprensible querer limpiar tu nombre pero, a menos que la persona te pregunte qué fue lo que quisiste decir con tu broma o comentario, no lo expliques. Lo que quisiste decir es irrelevante en una conversación centrada en el impacto negativo de tus palabras. Tampoco es productivo discutir cuál de las versiones de los hechos es la correcta. La memoria no es una grabadora digital; es una codificación emocional de un suceso, afirmó Cole. Acepta que lo que la persona escuchó y sintió fue real: “Mi comentario fue inapropiado y entiendo por qué te molestó”.

El artículo incluye recomendaciones para prepararte antes de disculparte, durante y después de la disculpa. El texto es muy claro y es un artículo ideal para aprender y también como recurso para usar con consultantes que tienen dificultades para disculparse. Léelo completo en The New York Times.



Suscríbete al newsletter para apasionados por la psicología y neurociencias


  • Artículos de opinión (Op-ed)

Más empatía y menos ideología

  • 30/08/2020
  • Buenaventura del Charco Olea

Las personas que poseen una forma de entender la vida o principios arraigados, sean éstos “tradicionales” como el patriotismo o la religión o más “modernos” como el feminismo, el liberalismo o el animalísmo tienden a hablar de la necesidad de educar a los niños y jóvenes en esa ideología.

Y eso no es necesariamente malo, personalmente soy una persona bastante posicionada ideológicamente y creo que está bien que la gente tenga principios, ya que suele reflejar un interés por lo que ocurre a su alrededor, una conciencia activa, cierta escapada al egocentrismo imperante en el mundo de las redes sociales y una cierta inquietud intelectual, de cuestionamiento de la existencia y búsqueda de alternativas a lo establecido incluso.

Considero además que todas las ideologías, sí, todas incluso esa que te parece tan despreciable, intentan lo mismo: acercar al mundo hacia aquello que ellos consideran mejor y más positivo (otro tema es que lo que para unos sea una mejoría para otros sea algo dantesco) así que no veo nada intrínsecamente malo en ellas. Otra cosa es que como dice el refranero castellano, del dicho al hecho… pues se jode la marrana.



Suscríbete al newsletter para apasionados por la psicología y neurociencias


El problema de las ideologías es que tienden a crear una perspectiva frentista, y más en estos tiempos que las redes sociales han provocado una reducción de los argumentos a twits de apenas una frase o a una imagen con una frase: lo cual es un contenido más fácil de compartir y virilizar pero que tienden al reduccionismo y a la crispación. Se activan así procesos que la psicología social ha estudiado muy bien, en las que se percibe a los individuos en dos grupos: los que están conmigo y los que están en el otro lado (algo a lo que además los hispanos, cainítas y más papistas que el papa como la madre que nos parió, somos particularmente dados). Esto tiene una finalidad: aumentar la cohesión, la unidad dentro del “endogrupo” (los que percibo de los míos) contra los del exogrupo (los contrarios) activándose una serie de sesgos sobradamente demostrados por los cuales tendemos a valorar más positivamente a los nuestros (que son muy buenos muy buenos) frente a los contrarios, que son muy malos muy malos.

Cuando eres empático y ves el dolor ajeno y cómo sufre te vuelves un poco menos dogmático y menos confrontativo

Por eso creo que la verdadera revolución o innovación real en el tema no sería educar en un principio u otro (por más que unos sean más “actuales” que otros, ya que a fin de cuentas), ya que eso sería el mismo perro con distinto collar. Es decir, que puede cambiar el hecho de cual es el contenido de esa ideología, pero si miras la historia siempre se ha educado a las personas en una perspectiva que en ese momento era la más dominante, sino el educar en empatía y de paso, también, conseguiremos aumentar la compasión.

La empatía, como casi todo el mundo sabe —que ahora hay mucha psicología barata y de panfleto bañada de buenismos e imagen, pero con poco contenido sólido— se trata de la capacidad de ponernos en el lugar del otro, intentando vivir las cosas tal y como el otro las vive. Si educamos a la gente en valores o ideologías, tendemos a que vean el mundo desde las gafas de esa doctrina, siendo incapaces de considerar válidas las opiniones del otro, lo que lleva mucho más al choque. Sin embargo, si fomentamos la empatía de las personas conseguiremos dos cosas: más entendimiento y sobre todo y más importante: más humanidad.

En el primero de estos objetivos, el entendimiento sería mayor porque al poder ver el mundo “con las gafas del otro” nos sería más fácil comprender su visión de las cosas, y podríamos no compartirlo, pero ya no nos parecía tan perverso. Al entender al otro y no descatalogarlo de entrada, además, obtendríamos la capacidad de ver que probablemente una persona desde una ideología y yo desde la mía, podemos diferir en muchos puntos pero existen otros en los que estaríamos en común, con lo que sería más fácil remar en la misma dirección de lo que nos une a los dos y dejar diferencias de lado (que ojo, no está mal tener diferencias ni defender posturas, pero si evitar el frentismo).

Por el otro, que es el que creo de mayor interés, es que cuando eres empático y ves el dolor ajeno y cómo sufre te vuelves un poco menos dogmático y menos confrontativo. Cuando una persona sufre, no te tiene que importar que lo haga porque es maltratada por el sistema capitalista heteropatriarcal o porque sea otra hija de Dios, sino sobre todo porque es un ser humano que está sufriendo. Y si puedes empatizar con su sufrimiento se moverá algo en tu interior, un proceso emocional que te invitará a ayudarlo.

Como plantea en Cuerpos y Almas (librón padre que te recomiendo, por cierto) el novelista Maxence Van der Mersch, cuando una persona sufre no importa la explicación de por qué lo hace o los motivos por los que debes ayudarlo (que es lo que tiende a tratar de abordar las ideologías) sino el hecho de que el dolor de otro ser humano no nos debería dejar indiferentes.

Sigue a Buenaventura Del Charco Olea en su página de Facebook o en Instagram.

  • Ciencia y Evidencia en Psicología

¿Una cuestión genética o de crianza? Estudio sobre la transmisión de trastornos de salud mental de padres a hijos

  • 28/08/2020
  • Maria Fernanda Alonso

Los trastornos de salud mental pueden tener componentes sociales, psicológicos y biológicos. Investigaciones han mostrado la existencia de transmisión intergeneracional de diferentes condiciones psiquiátricas, pero sus fuentes pueden diferir sustancialmente. Un equipo de investigadores suecos quiso averiguar en qué medida la transmisión intergeneracional se asocia con efectos genéticos y en qué medida se asocia a la crianza de los padres.

¿Por qué es importante? Los autores señalan que, debido a que la información disponible es limitada, es necesario investigar sobre cómo el riesgo de padecer trastorno bipolar se transmite de generación en generación y cómo el riesgo de los padres de presentar trastorno bipolar se relaciona con el riesgo de sus hijos de sufrir esquizofrenia y depresión mayor.

Metodología: para abordar este asunto, fueron estudiados padres e hijos nacidos en 1960-1990. La muestra incluyó a 2.417.104 individuos que fueron clasificados en 4 tipos de familias: “intactos,” persona que no vivió con su padre biológico; persona que vivió con padrastro; y persona adoptada.



Suscríbete al newsletter para apasionados por la psicología y neurociencias


La semejanza entre padres e hijos se evaluó principalmente mediante la correlación tetracorica (es decir, la correlación de responsabilidad) y, para los resultados clave, las razones de probabilidad de la regresión logística. Las asociaciones intergeneracionales del trastorno bipolar con la esquizofrenia amplia y la depresión mayor se evaluaron mediante el diagnóstico de trastorno bipolar en padres y la transmisión del trastorno bipolar en su descendencia.

Se estudiaron tres fuentes de semejanza entre padres e hijos: genes más crianza, solo genes y solo crianza.

Hallazgos: el análisis de datos se realizó del 28 de octubre de 2019 al 8 de enero de 2020. El equipo encontró que la transmisión del trastorno bipolar entre generaciones pareció ser en gran parte genética, aunque los efectos de la crianza también parecen tener un papel modesto; sin embargo, la transmisión intergeneracional de la enfermedad bipolar a la esquizofrenia parece ser totalmente el resultado de los genes. En el caso del trastorno bipolar a la depresión mayor, la transmisión parece resultar igualmente de los genes y de la crianza (Kendler et al., 2020).

Explican los autores que estos hallazgos sugieren que los genes son en gran parte responsables de la transmisión del trastorno bipolar entre generaciones, aunque es probable que también se presenten efectos modestos en la crianza. Y concluyen que la transmisión intergeneracional entre el trastorno bipolar y la esquizofrenia amplia parece ser completamente genética con una correlación genética moderada; para el trastorno bipolar y la depresión mayor, la transmisión parece resultar igualmente de los genes y la crianza con una correlación genética modesta.

Referencia bibliográfica:

Kendler, K. S., Ohlsson, H., Sundquist, J., & Sundquist, K. (2020). An Extended Swedish National Adoption Study of Bipolar Disorder Illness and Cross-Generational Familial Association With Schizophrenia and Major Depression. JAMA Psychiatry . https://doi.org/10.1001/jamapsychiatry.2020.0223

Fuente: Jama network

  • Salud Mental y Tratamientos

Recurso clínico: cuestionario de valores personales II

  • 28/08/2020
  • David Aparicio

Fabián Maero en Grupo ACT comparte la adaptación realizada por Solange Estévez y Dalila Acuña del cuestionario de valores personales II (PVQ-II), una herramienta sumamente útil para los terapeutas que trabajan desde la terapia de aceptación y compromiso. Los detalles:

El área de Valores en ACT es una de las pocas en donde nos interesa fomentar cierto nivel de elaboración y reflexión en las personas con que trabajamos. Explorar distintos aspectos de los valores personales puede proporcionarle mayor riqueza al proceso, de manera que lo que hoy les traemos es una herramienta que puede ayudarles en el trabajo clínico. Se trata del cuestionario de valores personales II (PVQ-II), un cuestionario desarrollado por John Blackledge, Joe Ciarrochi y Ann Bailey, que tiene algunas características que lo hacen particularmente interesante.

El cuestionario tiene tres grandes partes. Comienza al estilo de todos los formularios de valores de tipo narrativo, brindando una breve guía y un espacio para describir valores personales en nueve áreas vitales: Relaciones Familiares, Amistades/Relaciones Sociales, Pareja/Relaciones Románticas, Trabajo/Carrera, Educación/Crecimiento/Desarrollo Personal, Recreación/Ocio/Deporte, Espiritualidad/Religión, Comunidad/Ciudadanía, y Salud/Bienestar Físico.

Pueden descargarlo haciendo click en este link: cuestionario de valores personales II, y va a quedar disponible en la sección de recursos de la web de Grupo ACT.



Suscríbete al newsletter para apasionados por la psicología y neurociencias


  • Artículos Recomendados de la Web

España: Medidas acordadas por el ministerio de educación para el retorno a las aulas

  • 28/08/2020
  • David Aparicio

Emilio Sánchez Hidalgo compartió en El País, las principales medidas definidas por el gobierno de España para iniciar el regreso a la escuela de los niños y adolescentes. La lista es amplia y parece bastante difícil de controlar. Todavía no sabemos qué tan efectivas son en el entorno escolar, pero nos da una idea de las posibles medidas que se implementarán en los países que no han abierto sus escuelas:

  • Las mascarillas serán obligatorias de forma general a partir de los seis años, independientemente de que se pueda respetar la distancia de seguridad.
  • También serán obligatorias en transporte escolar a partir de los seis años. Además, se recomienda su uso en niños de tres a cinco años en esos trayectos. Cada niño tendrá asignado un sitio fijo en el autobús.
  • La distancia física de referencia entre alumnos será un metro y medio.
  • Se tomará la temperatura antes de empezar la jornada lectiva a cada alumno y profesor. «En caso de que se realice en el centro educativo, este dispondrá la forma de llevarlo a cabo evitando en todo caso aglomeraciones y asegurando el mantenimiento de la distancia mínima interpersonal», indica Sanidad en una nota de prensa. «Los centros educativos pueden establecer mecanismos para la identificación de síntomas en los alumnos a la entrada al mismo o una declaración responsable de los progenitores», añade el departamento.
  • Los alumnos se lavarán las manos de forma «frecuente y rigurosa», según Celaá, al menos cinco veces al día.
  • Las clases serán ventiladas muy frecuentemente, al menos, ha dicho Illa, antes y después de cada clase, en el recreo y al final del día. Si es posible, el ministro de Sanidad anima a dejar las ventanas abiertas toda la jornada lectiva.
  • Se intensificará la limpieza de los centros, en especial en los baños y en los lugares de mayor uso.
  • En cada centro habrá una persona responsable de controlar que se cumplen los protocolos sobre la pandemia y que actúe ante la aparición de contagios.
  • Se organizarán grupos de convivencia estable, los llamados grupos burbuja (que limitan los contactos con otras clases). Este tipo de grupos se fomentarán en educación infantil y en el primer ciclo de educación primaria, es decir, hasta segundo de primaria. Estos niños no tendrán que mantener la distancia de seguridad. Asimismo, en los cursos posteriores se recomienda organizar al alumnado en grupos burbuja en la medida de lo posible.
  • Sanidad y Educación piden que se eviten las actividades en el centro educativo que impliquen la mezcla de alumnado de diferentes grupos de convivencia o clases en las que no se pueda mantener la distancia de un metro y medio. «Se minimizará el contacto entre clases» todo lo posible en cursos posteriores, según ha dicho Illa.

La lista continua, para leerla completa visita la página del El País.

  • Ciencia y Evidencia en Psicología

Aumentan los niveles de estrés, ansiedad y sedentarismo en estudiantes universitarios

  • 27/08/2020
  • Maria Fernanda Alonso

La experiencia universitaria, naturalmente, trae consigo ciertos niveles de estrés y ansiedad, especialmente en las instancias de examen. Una investigación reciente encontró que la pandemia ha tenido un efecto negativo inmediato en los estudiantes universitarios reflejado en un aumento significativo de sus niveles de ansiedad, depresión y sedentarismo (Huckins et al., 2020). La investigación es parte de un estudio de varios años que se centra en la salud mental de los estudiantes universitarios a medida que avanzan en sus carreras. El estudio completo combina la detección móvil de teléfonos inteligentes con la neuroimagen funcional.

Metodología: para el estudio se utilizó la aplicación StudentLife, que es una herramienta de detección desarrollada en Dartmouth, para recopilar pasivamente información sobre el comportamiento de estudiantes voluntarios en relación al uso de sus smartphones: duración del uso del teléfono, cantidad de veces que se desbloquea el teléfono, duración del sueño y el tiempo sedentario.

Los datos sobre depresión y ansiedad se recopilaron mediante evaluaciones autoinformadas semanalmente, también provistas a través de la aplicación StudentLife.



Suscríbete al newsletter para apasionados por la psicología y neurociencias


Hallazgos: el equipo de investigación encontró un cambio a gran escala en la salud mental y el comportamiento en comparación con la línea de base registrada para este grupo en años anteriores.

Los síntomas autoinformados de depresión y ansiedad dentro del grupo de investigación de estudiantes aumentaron notablemente al inicio del brote de COVID-19. En ese momento, también se estaban implementando importantes cambios de política relacionados al COVID-19, incluida la solicitud de que los estudiantes abandonen el campus y el cambio al aprendizaje remoto.

Estos cambios coincidieron con el final del cursado y la llegada de los exámenes finales, que de por sí es uno de los momentos más estresantes para los estudiantes en cualquier período académico.

Según el estudio, la ansiedad y la depresión disminuyeron ligeramente después del período de exámenes finales a medida que los estudiantes se instalaban en lugares de refugio. Esto sugirió cierta resiliencia frente al COVID-19, pero los niveles se mantuvieron consistentemente más altos que en períodos similares durante períodos académicos anteriores.

La investigación también encontró que el comportamiento sedentario aumentó dramáticamente durante el inicio de la crisis de salud pública a principios de marzo.

Por último, el equipo informó una conexión entre la ansiedad y la cobertura de noticias de COVID-19. El vínculo entre la depresión y los informes de noticias fue evidente, pero no tan fuerte. A medida que se intensificó la cobertura de noticias, hubo un aumento en el comportamiento sedentario y una mayor duración del uso del teléfono. Por otro lado, la disminución en el número de lugares visitados fue consistente con las políticas de distanciamiento social y de refugios implementadas por los gobiernos locales.

Referencia bibliográfica:

Huckins, J. F., daSilva, A. W., Wang, W., Hedlund, E., Rogers, C., Nepal, S. K., Wu, J., Obuchi, M., Murphy, E. I., Meyer, M. L., Wagner, D. D., Holtzheimer, P. E., & Campbell, A. T. (2020). Mental Health and Behavior of College Students During the Early Phases of the COVID-19 Pandemic: Longitudinal Smartphone and Ecological Momentary Assessment Study. Journal of Medical Internet Research, 22(6), e20185. https://doi.org/10.2196/20185

Fuente: Science Daily

  • Ciencia y Evidencia en Psicología

10 formas de lidiar con el estrés de vivir en crisis crónica

  • 27/08/2020
  • Maria Fernanda Alonso

Estamos agotados, como mínimo. Nos toca afrontar un contexto de estrés constante, donde estamos en alerta todo el tiempo, con miedo y ansiedad por la amenaza inminente de un mal potencialmente grave. La pandemia mundial nos presenta desafíos diarios que, sea como sea, debemos abordar (las cuestiones de salud y económicas no dan tregua). Todo esto acompañado de incendios que parecen no poder controlarse, sequía, crímenes en aumento, mayor vulnerabilidad de personas víctimas de violencia de género que se ven obligadas a compartir más tiempo con sus agresores y precisan nuevos recursos para pedir socorro. Todos necesitamos ayuda para lidiar con el estrés de vivir en crisis crónica.

¿Cómo administrás tu energía y atención en un contexto de crisis mundial?

Volver a pensar y renovar compromisos importantes en tu vida puede ser muy energizante y favorecer tu capacidad para enfrentar situaciones difíciles. O tal vez tomes este tiempo para diseñar estrategias y realizar cambios de rumbo. En cualquier caso, orientarte hacia tus valores siempre será una buena inversión y forma de recuperar algo de control.



Suscríbete al newsletter para apasionados por la psicología y neurociencias


Empezá preguntándote qué es importante realmente para vos. ¿Cuál es tu perspectiva a largo plazo?, ¿qué te ha funcionado en el pasado?, ¿qué no te funciona?

El punto no es castigarse por alguna decisión equivocada, ni apurarnos a tomar nuevas decisiones o autoengañarnos con un plan maestro que eliminará toda incertidumbre. De este contexto pueden surgir nuevos talentos (o reaparecer otros relegados), y tenemos la oportunidad de apartar tiempo para descubrirlos.

10 formas de lidiar con el estrés de vivir en crisis crónica

  1. Establecé límites saludables: contemplando la situación, adaptá tus horarios y fijá parámetros seguros para los proyectos con los que está trabajando. Una sugerencia es trabajar por intervalos de 30 minutos y luego tomar un breve descanso.
  2. Ayudá a tu cuerpo a relajarse: realizá ejercicios de respiración durante unos minutos; estirá y mové las articulaciones dentro de tus posibilidades físicas. Si te proponés ir un poco más allá, podrías empezar a incorporar algunos ejercicios de mindfulness en tu día.
  3. Fijá rutinas: tener un orden establecido ayudará a tu cerebro a sentirse más calmado y en control.
  4. Armá rituales: al cerebro le encantan las señales, por eso, armá rituales que le indiquen que es seguro entrar en modo creativo y dar riendas a la curiosidad.
  5. Usá una libreta personal para escribir estas preguntas y pensamientos: escribir te ayuda a procesar, encontrar claridad y sanar.
  6. Probá algo diferente: usá colores e imágenes para involucrar el procesamiento no verbal y la sabiduría.
  7. Hacé una nota visual sobre lo que estás decidiendo: si te sentís atascado con un asunto, crea recordatorios visuales con notas adhesivas y colocalas donde puedas verlas (el espejo del baño, la puerta de una alacena). Permitite pensar en ello hasta encontrar claridad.
  8. Realizá actividades familiares, en equipo o con amigos (aunque debas respetar el distanciamiento físico, podés servirte de la tecnología para esto).
  9. Concentrate en tu proceso de pensamiento: enfocá tu atención en una tarea a la vez, dedicate a ella, planificala y llevala a cabo. Hacé lo mismo con tus fortalezas, sueños, esperanzas y deseos: dedicales tu atención plena individualmente.
  10. No estás solo, no lo olvides. Puede que te sientas sólo, pero lo más probable es que haya alguien dispuesto a ayudarte, tanto como vos estás dispuesto a ayudar a otros.

Fuente: Psychcentral

Paginación de entradas

123…7Próximo

💌 Recibe nuestros artículos en tu correo.  

Regístrate
PSYCIENCIA PRO
  • Inicia sesión
  • Cuenta
  • Cierra sesión
  • Artículos
  • Recursos
  • Webinars
Recomendados
  • El estatus científico de las técnicas proyectivas
  • El diagnóstico del TDAH en adultos: características clínicas y evaluación
  • Cómo actuar cuando alguien expresa directa o indirectamente pensamientos de suicidio
Tips para terapeutas
  • Cómo lograr que los niños ansiosos, y sus padres, acepten la terapia de exposición
  • ¿Qué hacer cuando los pacientes usan el “sí, pero” para evitar el cambio?
  • Cómo ayudar a los pacientes cuando experimentan mucha ansiedad y desregulación en la sesión
Recursos
  • Tarjetas del efecto de la co-rumiación
  • Metáforas y ejercicios ACT (Vol. 1)
  • «Valida», un recurso de 7 tarjetas para practicar la validación
Podcast
  • «La construcción de una carrera con sentido» con Tiare Tapia – Watson, episodio 21
  • «Efecto Flynn, pruebas psicológicas y la evolución de la psicología en Panamá» con Dimas Villarreal – Watson, episodio 15
  • «Los miedos del terapeuta», con Gabriel Genise – Watson, episodio 1
Webinars
  • Entrenamiento a padres, madres y cuidadores como intervención de crianza efectiva
  • DBT en adolescentes
  • Abordaje y evaluación clínica de los trastornos alimentarios
Psyciencia
  • Contáctanos
  • Publicidad
  • Nosotros
  • Publica
Psicologia y neurociencias en español todos los días

Ingresa las palabras de la búsqueda y presiona Enter.